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Cambió de página cuando terminó de leer la anterior, sobre su pecho estaba dormido su pareja, Kyōjurō. Rió ante la sensación de cosquillas que le causaban los largos cabellos del rubio y al mismo tiempo los acarició.
Desde el accidente del otro día no lo dejaba solo por mucho tiempo, y se tomó en serio lo de vigilarlo; por su lado, le parecía tierno verlo preocuparse más por su bienestar que él mismo.
Siguió sintiendo la respiración del rubio sobre su pecho algunos minutos más antes de que despertara algo anondado y adormilado.
-¿Necesitas algo? -
-No te preocupes, estoy bien-siguieron un buen rato así hasta que unos constantes taquitos en la puerta llamaron su atención, Kyōjurō se levantó para atender mientras su pareja descansaba aún en la cama.-
-¿S-
-¡Rengoku-san!-una peli-rosa en cuanto abrió la puerta saltó y lo abrazó, reconociéndola pronto como Mitsuri, su ex alumna podría decirse-¡Escuche que Masaki-san peleó contra una Luna Demoníaca y salió herido! Me preocupe bastante y quise visitarlo pero estaba en una misión.-
-¿Kanroji?-el peli-_____ cuando reconoció la voz de la otra Pilar salió de la habitación, confirmando sus sospechas y siendo abrazado de inmediato por la chica.-
-¡Masaki-san! Me alegra verlo bien, estaba preocupada y mi corazón no dejaba de preocuparse-sonrió, hace años que había conocido a la alumna de su ahora prometido, así que se llevaba bastante bien con ella y le agradaba su presencia.-
-Lamentó si te preocupe mucho, ven, la comida está lista-pasaron a la cocina, aunque Mitsuri notaba a la pareja más melosos de lo normal, digo, no es malo que sean cariñosos pero ahora se notaba aún más.-
-¿Pasa algo?-decidió tomar la palabra cuando su comida fue servida, recibiendo de inmediato miradas curiosas.-
-¿Por qué lo dices?-
-Los noto más.....-se interrumpió de inmediato sola en cuanto vio de reojo los anillos que compartían, siendo este un detalle que nunca antes había visto. Su expresión de sorpresa fue de esperarse-¡Waa, que lindo! ¿Están comprometidos, cierto?-
Ambos intercambiaron miradas, asintiendo a la pregunta de la oji-verde.
-¿Cuánto tiempo llevan?-
-No mucho, almenos dos semanas.-
-...¡¿DOS?! ¿Ya han comenzado a planear la boda?-su silencio le dió la respuesta, suspiró y los tomó a ambos de los hombros-¡¡Necesitamos comenzar a planearla!!-
Sería un largo pero emocionante día.
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Otro recuerdo. Esta vez muy reciente.
-¡¡Aliento de la Llama, novena postura: purgatorio!!-
Su fuerza disminuía a cada segundo pero trataba de mantenerse en pie. Todo por su chico, aunque, no creía poder lograrlo...
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WAAAA, odio cuando quedan capítulos muy cortos pero probablemente tenga más inspiración estos días.
