La fiesta

573 36 13
                                    

Cap. 19

Lucy al habla

Estábamos solo a dos días de mi cumpleaños y la vida se me seguía complicando, cada día era peor, todo se me venía a la mente y solo quería correr a un lugar donde no me pudieran encontrar jamás.

Tocaron el timbre y me dispuse a abrirles la puerta a Levy y Juvia. La pequeña peli azul entro con su gigantesco bolso, lo dejo en el suelo y se sentó en el sillón muerta de cansancio, mientras que Juvia observaba mi hogar con curiosidad.

-¿Y, qué te parece mi humilde morada?- le pregunté con una sonrisa a la chica con curiosidad.

-Es muy acogedora, me gusta- hizo una pausa -Aquí debes de traer muy a menudo a Natsu-san, a hacer tus cochinadas- me molestó la peli azul de cabellos ondulados.

-he, no, no, nada que ver, nunca he traído a Natsu aquí- protesté toda ruborizada. *Bueno si ha venido pero nunca ha entrado, espera...si lo ha hecho, pero en contra de mi voluntad, eso no cuanta o sí, no, no... bueno no importa da igual*

-Bueno chicas, dejen de jugar y comencemos o no alcanzaremos a vernos lo suficientemente bien- indicó mi pequeña amiga.

-Tienes razón- contesto una emocionada Juvia.

Nos cambiamos, peinamos y maquillamos; Levy se puso un vestido negro con vuelitos blancos, combinándolo con su típica cinta, pero esta vez del mismo color del vestido; Juvia se colocó un vestido cerezo con vuelitos blancos al igual que Levy-chan, y tomándose el cabello en una cola de caballo, mientras que yo solo me coloque un vestido rosa crema, con unos vuelitos blancos y cintas rosas en la parte de la cadera; y al igual que la peli azul más alta, me hice una coleta con un moño de perlas.

Estaba nerviosa...ok, muy nerviosa, pero todavía me sentía triste, este quizás sería la última vez que veamos con mis amigos y con Natsu...

-Las adoro y quiero de todo corazón- expresé colocando mis manos en mi pecho, en el lugar del corazón (izquierdo) -qué esta noche sea inolvidable para las tres- dije con una sonrisa.

Mientras nos dedicábamos sonrisas y nos abrazábamos, comenzaron a sonar los celulares de Levy y Juvia. Ambas contestaron y al minuto colgaron.

-Bien, creo que aquí empezamos- platicó la Mcgarden, más para sí misma que para nosotras.

-- contesto una muy nerviosa Juvia.

-Nos vemos- las despedí con la mano derecha, sacudiéndola en el aire.

Pasaron treinta minutos desde la partida de las chicas y aun no sabía absolutamente nada de Natsu, ya eran las 8:30 p.m. y ya me estaba angustiando.

*Y si le paso algo, y si realmente ya no quiere ir con migo, y si fue a la fiesta con Lissana* me pasaba rollo, mientras sentía que las lágrimas comenzaban a brotar.

[*Pasarse rollo: Imaginar cosas malas que pueden ser ciertas o no (Chilenismo)]

Faltaba un minuto para las 9 p.m. y me llego un mensaje: "Ve a la calle y espera unos minutos. N.D."

*Es un idiota al hacerme esperar tanto* pensaba mientras se me dibujaba una sonrisa boba en el rostro y bajaba al lugar indicado.

Ya allí, una persona que nunca había visto, se me acerco y me entrego un sobre, que contenía una nota dentro: "Ve a la esquina más cercana y súbete al auto rojo estacionado, no te preocupes no te pasará nada. N.D."

Esto ya me estaba asustando, la letra de la nota no era la de Natsu, pero por alguna razón seguí. Como decía aquella nota, me esperaba un carro totalmente rojo, y junto al auto, estaba una hermosa mujer, adulta por lo visto.

-Hola, por casualidad ¿eres tú Lucy?- Preguntó dulcemente la bella mujer.

-Sí, soy yo y ¿usted es?- contesté.

-Sabrás pronto quien soy- respondió guiñándome un ojo -pero por ahora sube, que estamos atrasadas- termino con una sonrisa.

La mujer de ojos azules me dejo en el parque, en donde una niña de cabellos azules me entregó un ramo de rosas, y dentro del manojo de rosas había otra nota: "Las rosas son para ti; ahora dirígete a la entrada del instituto. N.D."

Me subí nuevamente al auto y le di a la señora la dirección, llegando a las puertas del lugar pedido, la mujer me dio un gran abrazo y me dijo...

-Fue un gusto conocerte- expresó con emoción.

-Igualmente- contesté correspondiendo el abrazo.

Me despedí de la amable señora y me concentre en lo que pasaría allí en aquel lugar, pero sin mi consentimiento, sorpresivamente alguien me abrazo por la espalda.

-¿Natsu?- pregunté.

-No, no soy ese inútil, soy yo Lucy- contestó una voz femenina.

-¿Michelle?- dije emocionada -¿Qué haces aquí?, ¿era tuya la idea de los sobres?- cuestioné.

-Pues vine a verte, te extraño demasiado, y pues no, no era mi idea, y mira, ten otro de esos- respondió entregándome otro de los tantos sobres.

-Te extrañe mucho, ¿te quedas mucho tiempo?- pregunté.

-No, no creo, solo estoy hasta mañana, así que te esperaré en tu casa para hablar...bien, nos vemos- contestó dándome un abrazo de despidida.

*Como siempre de sorpresa* pensé alegre. -¡A sí el sobre!- platiqué en vos alta.

"Última nota, ven a la entrada trasera del lugar. N.D."

Corrí hacía la puerta de atrás, pero no había nadie, mire para todos lados, pero no había nadie; me estaba devolviendo para la entrada principal cuando alguien me cubre los ojos con sus manos.

-Natsu- sonreí retirando las manos del peli rosa de mi visión.

-Tan asertiva como siempre Lucy- contestó Dragneel con una de esas sonrisas que tanto amo.

-- contesté sonrojada.

*No te sonrojes, ni mucho menos pensar que amas su sonrisa, maldición soy una idiota* reprimía mis pensamientos.

-Bien, esa parte... esa parte- contestó notoriamente nervioso el peli rosa, mientras se movía inquietamente.

-¿Esa parte?- cuestioné

-mmm... yo... he... yo...te traje algo- contestó ruborizado.

-¿A sí?, ¿Qué es?- pregunté ocultando la emoción que sentía por dentro.

-esto...- dijo entregándome una caja roja de terciopelo.

Al abrir la pequeña cajita había una cadena de oro y un pequeño papel; la cadena decía "Te amo" y el papelito decía: "No me quiero separar de ti, cásate con migo".

-Natsu...- Contesté con los ojos llorosos -No puedo aceptarlo... yo... te amo... pero esto lo estás haciendo muy difícil... yo...- no alcance a terminar cuando Sting me tomo del brazo y contestó por mí.

-Lo siento, pero ella se casará con migo- atacó el rubio.

Natsu solo bajo la mirada, mientras Sting me llevaba a la rastra...


*¡Natsu, ayúdame, no me quiero casar con él, por favor ayúdame!... ¡YO ME QUIERO CASAR CON TIGO NATSU!...* trataba de gritarlo en vez de pensarlo, pero no podía, si lo hacía todo terminaría mal.

Amor Obligado (Fairy Tail) (Actualización Lenta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora