IV

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–Como crees que le este yendo a Uraraka?– preguntó un chico de cabello bicolor, con un rostro que te daría tranquilidad y también miedo pero más que nada, te enamoraría– te dijo que comenzaba a trabajar hoy ¿No es así?– preguntó algo curioso–

–Si así es, espero esté bien– respondió una chica azabache, la misma chica que le mencionó a la castaña ser la cuidadora del hijo de la familia Bakugou, Momo Yaoyorozu una comerciante muy reconocida y es que no solo era por su trabajo, también que ella por ser tan elegante y de portar un cuerpo de modelo, todos caían rendidos a sus pies, y es que quien no querría casarse y tener como mujer a la hija de una de las familias más millonarias pero, la chica sabía bien que cuando querían con ella era por su físico y dinero, eso no le agradaba para nada aunque, era muy diferente cuando se trataba del chico heterocromatico que tenía frente a ella, para ella el era un príncipe, se sorprendió y entristeció cuando vio como el chico no buscaba tener nada con ella, solo serían socios y eso la desilusionaba un poco, ya que si comenzó a sentir algo por el chico–

—Bicolor, atlético, hermoso, y la marca en su ojo izquierdo que importa, se veía más hermoso  y sexi así, el hijo menor de la gran familia Todoroki, Shoto Todoroki un chico frío pero, si te muestra su sonrisa te desmayas eso es lo que dicen, todas o la mayoría de mujeres estaban locas por el aunque el había empezado a sentir algo por una chica, solo que estaba preocupado de no ser así de importante como lo era ella para el, cuando la conoció fue como amor a primera vista, se podría decir que hase unos cinco meces atrás, conoció a Ochako, quien lo cautivo solo que desde hase solo un mes, no estaba seguro de decirle lo que sentía, aveces hasta pensaba en pedirle consejos a su madre y hermana o a Yaoyorozu, ellas se conocían un poco más y tal vez al ser la azabache amiga de la castaña le daría un consejo de cómo dar el primer paso y declararse pero, dudaba y de último lo dejaba pasar, quizás estaba pareciéndo un adolescente pero, enrrealidad tenía 27 años, había tenido novias antes pero, no había llegado a tener algo serio con alguien, sus hermanos ya tenían parejas y bueno su hermana esperaba un hijo y por primera vez pudo ver a su padre llorar pero, no era de felicidad era de odió hacía la pareja de su hermana Fuyumi,  su familia era todo un caos pero, estaba bien asi—

–No te preocupes Todoroki– mencionó la azabache con una sonrisa, al ver como el chico estaba algo cabizbajo– Uraraka es muy inteligente y lo importante es que ella sabe lidiar con personas como lo son Katsuki, ella no tiene problema con ese tipo de personalidad.– fianalizó de decir Momo, el bicolor elevó la mirada y asintió con levedad, la chica tenía razón, todo estaría bien y eso lo tranquilizó un poco, continuaron con su trabajo como era costumbre–

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«Volviendo con los protagonistas»

—En su pasado se había llevado varios sustos y hasta ataques de pánico, pero esto casi que la llega a matar de verdad, no estaba acostumbrada a que la gente se apareciera como fantasmas, le recuerda a su “Novio” o bueno a su difunto novio, apenas y lo recuerda, decidió dejar eso atrás, le disgustaba recordar lo que hase ya bastante tiempo atrás había sucedido, justamente por eso aveces era imposible controlar como actuaba, claro que sí la tratarán de una manera grosera o como si fuera una cualquiera no le molestaba pero, si trataban a otra persona así su mente se nublaba—

–En este momento estaba nublada por el miedo que sintió y no pudo evitar dar un salto y ahogar un pequeño grito, al ver aquel chico rubio en la silla de ruedas, respiró como si todo lo malo hubiera pasado, ya que se dio cuenta de que ese chico que se adentro a la cocina era el hijo de los Bakugou–

–¿Que crees que hacés?– ‹“no es lógico?›” se preguntó la castaña en su mente pero, sonrió ampliamente al chico mientras lo miraba fijamente, sus ojos parecían fuego ardiente, parecían cálidos y también era muy lindo, atractivo, si en silla de ruedas lo era como sería sin la silla? y no pudo evitar pensarlo–

–Bueno...– el rubio se fijó en la mirada de la chica y no evitó pensar en lo redondo que era su rostro ‹“Igual que la luna..”› sus ojos avellana le parecían muy grandes pero, el tampoco evitó pensar en lo atractiva que la chica era, lo malo era que el no se fiajaba mucho en como eran las chicas, aunque esta tenía cara de niña y cuerpo de mujer?. Era confuso ya que eso no le importaba– estoy preparando tu almuerzo, aunque la hora ya no cuadra hehe..– mencionó la castaña con algo de nerviosismo, pues la hora de la comida del chico había pasado–

–¿Quien te dijo que podías tocar la cocina? Ehh! Cara redonda– la chica se sonrojo por la vergüenza, creo un pequeño puchero en sus labios por el apodo y rápidamente se quitó el delantal y doblandolo lentamente respondió–

–Al ser tu nueva cuidadora, mi deber es prepararte de comer, cuidarte y estar al pendiente mientras tus padres no estén, lamentó mucho si no e preguntado antes de utilizar la cocina pero, no pense en preguntar porque te hubiera interrumpido y lo mejor era preparar algo antes de que simplemente lo rechazes.– todo lo dijo tan correctamente, con cuidado y esperando que el rubio entendiera retuvo aire en sus pulmones hasta que escuchó un poco audible “Mhh” por parte del chico, entonces liberó el aire de sus pulmones, con tranquilidad–

–De todas formas no voy a comer nada de lo que allas hecho– la castaña bajo un poco la mirada por eso pero, rápidamente recobro el ánimo y acercándose un poco a él le dijo–

–Ni siquiera un poquito?– dijo mientras le miraba con súplica, el rubio negó con la cabeza y ella se alejó un poco,mientras suspiraba y cerraba los ojos mencionó– supongo que ya a nadie le gusta dar opiniones de cómo quedan las comidas...–miro por el rabillo del ojo como el chico no se inmutaba entonces, utilizo las últimas palabras– será que no saben cocinar y por eso no dan opiniones?– llevó su mano a su mentón sosteniéndolo y sonrio de lado al notar como esas últimas palabras hicieron chasquear la lengua al rubio–

—Uraraka aunque no lleve nada casi de conocerlo tiene esa personalidad que es con las que solía lidiar antes, por eso no le costaba saber cómo hacer que se retractaran de alguna manera de lo que decían y bueno...—

–Joder!.. sirve eso en la mesa, si no me gusta te largas, entendido tonta?– la castaña asintió varías veces y vio como el chico se iba en su silla de ruedas al comedor, ella se dispuso a servir aquel Curry de pollo picante en un plato, Mitsuki le había mencionado bien que su hijo era fanático de las comidas super picantes y que eso era algo que no le podía hacer falta a su comida, claro a la castaña no le gustaba pero, lo hacía por qué era su trabajo cuidar y consentir al chico que tendría que cuidar, solo esperaba que le gustará si no se tendría que ir, eso lo veía como si la fuera a despedir–




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Hola!!!✨
Vine a dejarles el cap IV 🌟

Agregué el shipp Todomomo por qué me gusta y llama la atención no esperaba escribir algo mínimo de ellos, pero  ahora creo que sí hehe!

Espero sea entretenido para vosotros y que les siga gustando ✨

Saludos mis bellas estrellitas ✨✨

Bye, feliz día, tarde o noche✨


Tú? y Yo? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora