35: CASTIGADOS

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ALINE

Ya llevamos más de dos días con el pequeño, la primera noche fue algo feo, ya que no teníamos una cuna donde ponerlo y ahora la oficina que sería de Bruno será cuarto para el bebé, pero mando ampliar la planta en donde dormimos y hará su oficina, ayer Bruno, los gemelos y yo fuimos de compras para el bebé; los gemelos todavía no lo asimilan y siente todavía esa envidia cosa que con Bruno ya estamos tratando ya que sería horrible.

- Ya fui a dejar los niños a la escuela, puedes creer que me dijeron que queremos más a Mason que a ellos -dice Bruno

- No quiero que haya una pelea -digo- Debemos hablar con ellos...

- No deberías irte a trabajar... -digo después de un rato

- Tengo vacaciones por ser padre -dice sonriendo- mi papá cree que es mejor tener un descanso el se hará cargo de la empresa por unos días y mamá, ya sabes recordar su tiempo de secretaria y jefe.

- Entiendo...-digo recordando de como se conocieron

Pasamos toda la tarde hablando de cosas triviales, llega la hora de ir por los niños y salimos, coloco con cuidado a Mason y me siento en la silla de copiloto, iremos a comer afuera, llegamos y vamos a la zona de los carros, zona que detesta Bruno, ya que dice que espera y odia eso.

- Iré por los niños -digo y bajo.

Diviso a los niños y vienen corriendo hacia mi,los saludo y vamos al carro, Mason está en medio y los niños se suben, saludan a su papá.

Vamos hablando hasta que el llanto de Mason se hace presente, volteo y veo que su bracito y su cachete lo tiene rojo.

- ¿le picó un bicho? ¿Les picó a ustedes también niños? -digo quitándome el cinturón de seguridad, Bruno se parquea y abre la puerta trasera del lado de Nikolay

- Estamos en zona de no parqueo -digo a Bruno y este le vale dos pepinos.

- ¿No hay ningún bicho? -dice Bruno- ¿Nikolay y Agapios...?

Mason se acurruca en mis brazos cuando quiero ponerlo en su silla, le sobo el brazo y su cachete eso parece calmarle, miro a Nikolay y Agapios y estos miran a otro lado.

- Ustedes.... -digo no queriendo terminar la frase

- Niños digan, no quiero reporteros cerca de ustedes -dice Bruno viendo las calles.

- Fue idea de el -dice Nikolay señalando a su hermano

- Pero fue el que lo hizo -dice Agapios

Bruno se sube a su puesto enojado, no dice nada, y Mason se niega a irse a su puesto, Bruno habla por teléfono y pide comida, llegamos a la casa y los niños bajan.

- Siéntense ahora -dice en tono duro

- No seas duro... -digo dándole un biberón a Mason

Pero este me ignora y se sienta en medio de los gemelos, habla con ellos, no me meto, hasta que después de un rato.

- Repíntenlo, no escuche -dice

- No lo haremos, es nuestro hermanito-dicen con la cabeza agachada

- Niños, no los dejaremos de querer nunca, son nuestros hijos, somos una familia unida, debemos permanecer así el es su hermano deben de cuidarlo -digo- ¿si?

- Lo sentimos, nuestro hermano nos perdona... verdad.. -dice Nikolay

- Lo sentimos mucho -dice Agapios

Mason balbucea y sonríe coge las manos de Nikolay y Agapios.

- Tienen su respuesta -dice Bruno- ahora bajen su iPad, sus palancas del play.

- Papa!! -gritan

Bruno los mira serio y estos me miran, solo me encojo de los hombros y ellos asienten.

- Enserio disculpa hermanito -dice Nikolay y lo abraza para irse.

- Oye... debes disculparme -dice Agapios con la cabeza agachada- No fue mi intención hacerte daño... -dice y lo abraza para luego seguir el camino de su hermano.

Mason pide bajar y comienza a gatear y juega con los juguetes qué hay, después de un rato los niños bajan y llega la comida, comemos y hablamos, mañana llevaremos a Mason a la guardería y habrá cursos para niños de su edad, mañana retomaremos nuestras actividades, después de un rato veo a los niños en el patio trasero jugar fútbol.

- QUIEN LES DIO PERMISO!! -grita Bruno

- Bruno! Despertaras a Mason -lo reto

- está en el la cuna -dice viendo a los niños- ESTÁN CASTIGADOS!

Los niños sueltan el balón y vienen enojados.

- No tenemos IPad, no tenemos play, no tenemos switch, no tenemos nada! -dice Nikolay

- Póngase a leer o contar las baldosas de la casa, pero están castigados -dice Bruno

- No siquiera podemos ver la hora.. -dice Agapios- aparté las casa es muy grande para ponernos a contar las baldosas.

- Hay más de tres relojes, uno en la cocina, uno en la sala, otro en su cuarto y así consecutivamente -dice- vayan a bañarse.

Los niños miran furioso a Bruno y se van.

- Tienen tu misma mirada cuando se enojan, no digas nada -digo y sigo haciendo lo mío.

-odio que se parezcan tanto a nosotros -dice

- De hecho se parecen más a ti -digo- lo sabes perfectamente, son iguales a ti, cuando eras pequeño.

- Un semen potente -dice burlón.

Ruedo los ojos

Aquí estuvo Ale

DESCONOCIDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora