𝕀𝕟𝕥𝕖𝕣𝕟𝕖𝕥 𝔽𝕣𝕚𝕖𝕟𝕕𝕤? 𝕎𝕙𝕒𝕥 𝔽𝕠𝕣? (ℝ𝕦𝕓𝕖𝕘𝕖𝕥𝕥𝕒)

𝖢𝖺𝗉𝗂̀𝗍𝗎𝗅𝗈 5

Una vez enviada mi solicitud a una persona que se me hizo interesante porque le quitó el puesto a un tipo cuando yo estaba a punto de salirme de la aplicación,decido irme a dormir.

Me levanto de mi cama—otra vez—con mucho esfuerzo y saco de mi closet una de las dos pijamas que tengo.Me la pongo y arrojo mi ropa sucia a el sexto que tengo a un lado de la puerta.

Me coloco mis pantuflas de unicornio—que por cierto tuve que pelear con una señora por ellas pero valió la pena— y me dirijo a el baño que se encuentra a el final de el pasillo.

Paso por las escaleras y logro escuchar la voz de mi padre en la entrada.Me asomo lo suficiente para poder ver con quién habla y me sorprendo al reconocer su rostro.

Es el jefe de mi padre.

¿Pero qué hace el aquí?.

—Gracias por traerme a mi casa en su coche señor **.

—No hay de que agradecer enserio lo hago de buena gana—le sonrie a mi padre.

—Pero enserio gracias.

Espera ¿eso es un sonrojo?.

—Bueno lo veo mañana en la oficina De Luque—alborota el cabello de mi papá— que descance.

—Igualmente,adiós.

Y con eso último el señor ** se retira.

Antes de que mi padre logré verme me apresuro a caminar hacia el baño.Una vez dentro comienzo a lavarme el rostro y cepillar mis dientes.

¿Por qué el jefe de mi padre le sonríe tanto?.

Será que...

No.

No me voy a hacer ideas equivocadas.No otra vez.

Recuerdos de Vietnam...

Le preguntaré después.

Por el momento debo enfocarme en el problema de hoy y de que acabo de escoger a un desconocido para ser mi nuevo "amigo".

Uhhhh que emoción.

Creo que lo mejor será irme a descansar.

Terminó mis necesidades en el baño y me dispongo a ir a mi habitación.Paso por las escaleras nuevamente y escucho hablar a mi padre o bueno más bien reír por teléfono.

Me quedo observando desde mi lugar sin ser visto por el.

—Samuel—escucho detrás mío.

Doy un pequeño salto por el susto y aguanto un grito,giro para comprobar que efectivamente es mi abuela.

—Hola abuela...—saludo nervioso—¿Que haces tan tarde despierta?.

—No intentes cambiar el tema jovencito—regaña en voz baja.Rayos me descubrió.—¿Qué te he dicho de espiar a la gente y más a tu padre?.

—Que está mal y que si lo hago te cuente todo lo que escuche.

—Exacto así que vamos a mi habitación porque tu padre puede escucharnos.

Me toma de el brazo y me arrastra hacia su pieza.

Cierra la puerta y se recuesta en su cama mientras yo tomo asiento en uno de los bancos que hay por ahi.

¿Qué hora es?

Hora de chismear con mi abuela.

Cómo extrañaba esto.

—¿Y el café?—pregunto indignado.

—No hay pero ahí hay agua—señala la jarra y un vaso que se encuentran en su mesita de noche alado de su cama—¿Te sirve?.

—Me sirve.

Me sirvo un poco de agua y tomo un poco para refrescar mi garganta y hablar agusto.

—Ahora cuenta chisme.

—Pues que a mí padre lo ha venido a dejar....—hago una pausa dramática—sonido de tambores por favor—.Mi abue toma su agenda y una pluma para hacer lo pedido.—Su jefe,el señor **.

A mí abuela casi se le cae la mandíbula cuando escucho eso.

Si me asuste.

—¡Lo sabía!—grito feliz—¡Lo sabía!.

Iba a levantarse de la cama para festejar pero la detuve.

—Abu no grites que si no nos escuchará mi padre.

Se le tiñen las mejillas color rosa y se calma un poco.

—Lo siento es que esto de verdad me hace muy feliz.

—Lo se abuela pero no hay que hacernos ideas equivocadas otra vez.No querrás que nos pase lo de la última vez.

—No fue nuestra culpa—la miro a los ojos—bueno está bien quizás esa vez si nos adelantamos un poco pero de los errores se aprende.¡Es una señal!.

—¿Qué es una señal?—preguntan desde la puerta.

Casi me ahogo con el agua al ver que era mi padre parado en el marco de la puerta.

—Oh nada mi niño,solo que Sam me estaba contando unas cosillas.Nada de lo que debas preocuparte—dice como si nada mi abuela,mientras yo la veo con asombro.

¿Cómo puede mentir tan fácil?.

¿Cuántas veces me habrá mentido a mi?.

—Oh enserio pues me alegro que se digan secretos sin decirme nada a mi eh—comenta mi padre con una falsa indignación.

—Oh ya va a entrar Don Dramas De Luque—dijo mi abuela con falso fastidio reteniendo su risa.

—Pues no,para su información ya me voy a dormir y creo que Sam también debería hacer lo mismo—dijo dirigiendo su vista hacia mi.

Yo no aguantaba mas la risa por la escena dada así que solo pude asentir y despedirme de la abuela con un beso.

—Hasta mañana abu descansa.

—Tu igual mi niño—me jala la mejilla—y no le hagas caso a tu padre.Tu puedes irte de mi habitación cuando te plazca eh.—Me da un beso en mi frente y salgo de la habitación no sin antes despedirme de mi padre igualmente.

—Hasta mañana papá—le doy un beso en la mejilla.

—Hasta mañana Sam, descansa.

Me dirijo a mi habitación otra vez y en el transcurso me pongo a pensar que haría si se escucha otra voz en la primera planta de la casa.

Un exorcismo seguramente.

Ya saben algo así como actividad paranormal.

Okey creo que no fue buena idea pensar en eso ahora que me quedé parado a mitad de pasillo.

¡Corre Samuel corre!.

Abro la puerta de mi cuarto y la cierro de un portazo.Seguramente mi padre me regañe mañana en el desayuno pero en estos momentos solo me importa vivir.

Me arrojo a la cama de un salto y me enrollo con las sábanas.

Me felicitó mentalmente por haber dejado la luz apagada antes de ir a el baño y no haberme golpeado con el sexto de ropa sucia porque de lo contrario quien sabe si estuviera contando esto.

Dios nos escuche hermanos.

En fin creo que ya es hora de dormir.

Aunque dudo que pueda descansar ahora.Quiero decir no es como si estuviera tan cansado...

Sam se ha desconectado.