«CAP 7»

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Caminaba sin rumbo alguno mientras trataba de sacar me de la cabeza la mirada de el chico misterioso. No me había dado cuenta pero en un abrir y cerrar de ojos ya estaba afuera de la universidad de Toronto, pare y la veía fijamente.

- ¿Como carajos les diré?- dije mientras soltaba un suspiro-

Era linda la escuela, grande y muy colorida. Negué con la cabeza al saber que la preocupación de la universidad estaba queriendo regresar, comencé a caminar a dónde recordaba que era un centro comercial.

- Necesito azúcar- dije a mi misma mientras comenzaba a caminar-

Al llegar al centro comercial entre a el supermercado y comencé a caminar rumbo a el pasillo de dulces.

Camine hasta llegar a este, comencé a ver qué dulces vendían. Tome una bolsa de chocolate pequeños y comencé a caminar por los pasillos hasta llegar a una máquina dispensadora de café, saque un billete y lo introduje en la máquina para pedir un café.

Al terminar de que me diera mi café la máquina fui a las cajas a pagar los chocolates. Salí de el supermercado y comencé a caminar, estaba metiendo el cambio en mi bolsa derecha de el pantalón pero choque con alguien haciendo caer la bolsa de chocolate.

- Lo siento-

- Tranquila- dijo una voz conocida mientras recogía la bolsa de chocolates- Creo que ya va a ser costumbre chocar conmigo- dijo mientras entregaba los chocolates-

- Oh, eres tú- dije alegre- lo siento por lo de ayer- dije un poco apenada mientras tomaba la bolsa de chocolates-

- Tranquila, si admito que se sintió como si me hubieran tacleado- dijo y su comentario me hizo reír-

- De verdad lo siento- dije muy apenada-

- Tranquila-

Se quedó un silencio hasta que el chico decidió presentarse.

- Soy Blake, Blake Talabis-

Abrí los ojos como platos, era el.

- No te creo. Blake- dije impresionada-

- Si? Pasa algo?- pregunto extrañado-

- Soy ____, ____ Anderson- dije sonriente-

- No te lo puedo creer-

No paso ni un segundo más y se abalanzó a abrazarme. Era el, tengo que admitir que los primeros 4 años que me mudé a Los Angeles lo extrañe tanto que lloraba por las noches al recordar momentos con el y Lauryn. Carajo como no lo había reconocido, su sonrisa que de niños se me hacía linda y sus ojos como chocolate. Debía admitir, me gano el sentimiento, una que otra lágrimas escapó. Tenía mi rostro hundido en su cuello al separarnos le dedique una sonrisa mientras secaba las pocas lágrimas con mi mano.

- Por qué lloras?- pregunto confundido-

- Creo que me gano el sentimiento de verte, hace mucho no nos veíamos y debo admitir que te extrañe- dije siendo sincera-

Mi teléfono sonó y mi sonrisa se borró al ver de quién era el nombre de el que me llamaba, era mi padre, se que se escuchó mal pero creo que el quiere hablar de la universidad y ya no quiero saber de eso.

- Quieres ir a caminar?- pregunto Blake llamando mi atención-

- Claro, si- dije mientras guardaba mi teléfono en el bolsillo de mi pans-

Comenzamos a caminar en rubo a salir de el centro comercial...

CONTINÚARA...
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𝐓𝐡𝐞 𝐩𝐞𝐫𝐟𝐞𝐜𝐭 𝐜𝐡𝐫𝐢𝐬𝐦𝐚𝐬 «𝐁𝐥𝐚𝐤𝐞 𝐓𝐚𝐥𝐚𝐛𝐢𝐬»𝐓𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora