Dis-ease | Saturno

$0,99 JK

꧁༒☬¿𝘊𝘶á𝘯𝘵𝘰 𝘯𝘦𝘤𝘦𝘴𝘪𝘵𝘢𝘴 𝘨𝘢𝘯𝘢𝘳 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘴𝘦𝘳 𝘧𝘦𝘭𝘪𝘻?
𝘌𝘴𝘰 𝘨𝘰𝘭𝘱𝘦𝘢 𝘦𝘯 𝘵𝘶 𝘤𝘢𝘣𝘦𝘻𝘢 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘶𝘯𝘢 𝘣𝘰𝘵𝘦𝘭𝘭𝘢 𝘥𝘦 𝘷𝘪𝘥𝘳𝘪𝘰
𝘕𝘰 𝘴é 𝘴𝘪 𝘦𝘭 𝘮𝘶𝘯𝘥𝘰 𝘦𝘴 𝘦𝘭 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘵á 𝘦𝘯𝘧𝘦𝘳𝘮𝘰...
𝘓𝘢 𝘰𝘴𝘤𝘶𝘳𝘪𝘥𝘢𝘥 𝘯𝘰 𝘥𝘦𝘴𝘢𝘱𝘢𝘳𝘦𝘤𝘦 𝘴𝘪𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘢 𝘤𝘶𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘮𝘦 𝘲𝘶𝘪𝘵𝘰 𝘭𝘢𝘴 𝘨𝘢𝘧𝘢𝘴.☬༒꧂

Dis-ease - BTS
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Capítulo $0,99

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ᴴᵃⁿⁿᵃᵐ ᵗʰᵉ ʰᶦˡˡ, ˢᵉᵘ́ˡ, ᶜᵒʳᵉᵃ. ¹⁰ ⁴⁵ ᵖᵐ

Jk

A esta hora todas las puertas que llevan a la burbuja individual en la que nos sumergimos por la noche en nuestro apartamento, están cerradas. Al salir de mi cuarto, el lugar más espacioso y solitario del mundo, a mis ojos, tuve la posibilidad de cruzar a Jimin en el comedor, nadando entre aroma a fondo de sopa fría y un mundo de papeles, auriculares y concentración. Ya es, dicen, el muchacho en la cima del mundo, sin embargo se queda practicando, bueno... si es que a ese calvario interno de ser perfecto se le puede llamar practicar y no enfermedad, hasta las 4 de la mañana. Y a las seis de nuevo arriba, estudios elementales para cualquier mortal que desea ser alguien en la vida... alguien más que un miembro de este grupo, claro. A veces se duerme en la mesa y los de limpieza o seguridad lo despiertan para llevarlo al cuarto. Alguna que otra vez lo crucé durmiendo en el sofá bajo las partituras como un vagabundo...

Me preocupa... ¿Realmente me preocupa? Me he mirado al espejo de este baño infeliz unas treinta y siete veces hoy y nunca me he visto realmente. Ahora sí. Bajo toda la capa de maquillaje y exigencia que he tenido hoy entre entrevistas y sonrisas falsas, veo el rostro de alguien que digo que soy yo. Lo digo, porque se me repitió tantas veces que soy JK, que ya no sé ni quién soy tras el artista.

Ojeras, cansancio... el no sentir nada... nada de nada.

Me paso la mano por el rostro y al respirar, lo que hay en ese baño es aire caliente. Es uno de los que tiene la residencia, pero al parecer es el favorito de todos, y está húmedo todavía. Siento el perfume de la crema de ducha de Jin inundándome la nariz, es como tenerlo encima, ¡Por favor!

Necesito salir de este abrumador encierro de sopa, humedad, perfume... y de mi cabeza también.

Estoy por tomar el pestillo de la puerta y siento unos golpes al otro lado que me hacen sobresaltar.

—¿Estás bien? —pregunta Jimin al otro lado.

No sé porqué le importa, pero siempre le importa...

—Insomnio, lo clásico de hoy en día —contesto restándole importancia al abrir la puerta y finjo la sonrisa que mejor me sale desde que me obligan a llevarla a cada maldito lugar fuera del condominio.

Un día me quedé dormido, dos decidí hacerlo, tres vinieron a despertarme de la agencia y sermonearme por flojo. Así que a la noche siguiente no dormí, porque tenía miedo de quedarme dormido de nuevo y tener que oír cómo estaba perdiendo los estribos y no podía permitírmelo porque era una falta de respeto a mis compañeros. Y ahora... se me volvió costumbre. Lo clásico, te duermes mucho, y luego no duermes nada.