Capítulo 9 [¡!]

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[¡!]=Símbolo de advertencia.
Capítulo con contenido vulgar (explícito, sensible)

; 𝙲𝙰𝙿𝙸𝚃𝚄𝙻𝙾 𝙽𝚄𝙴𝚅𝙴 ;

| 𝚄𝙽𝙰 𝙻𝙰𝚁𝙶𝙰 𝙽𝙾𝙲𝙷𝙴 |

Primera parte:

Admiraba el control que jean tenía sobre mí, me encantaba sentir que él lo tenía, me hacía sentir deseada y con ganas de sentirlo aún más, mucho más de lo que debería. La respiración se me iba cada vez que recordaba sus grandes manos en mis mulos, el como sonaba cada vez que lo golpeaba y como ahora podía actuar como si nada hubiese pasado, mientras bebía una taza de café caliente y me miraba de arriba hacia abajo.

— ¿Te gusto?—Pregunte rompiendo el silencio. Él arqueo la ceja en confusión— Me refiero... A lo que pasó en... Mi habitación— Susurre al sentir mis mejillas ardiendo.

— Debo admitir que cuando comencé azotarte lo hice como castigo, no me gustó para nada tu comportamiento..—Dejó la taza frente a la mesa sonando el vidrio de esta— Pero al notar que te satisfacía, lo estaba haciendo más para estar seguro de que si era cierto— Sonreía divertido ante la situación.

Enarque una ceja divertida— Así que prácticamente lo hizo a propósito.

Camino hasta mí dejandome casi acorralada contra el cómodo sillón con su mano a mis costados sintiendo su penetrante aroma amargo del café— Así es. Juro que en este momento quiero volver a marcar ese precioso culo que tienes.. Sin nada que se interponga esta vez— Su nariz tocó mí oreja dando una mordida en el lóbulo haciéndome jadear.

Oh.. Santo cielo. Mordí mí labio inferior, sentí mí cuerpo estremecer. ¿Podrían las palabras excitarme? Al parecer sí... Y al parecer, quería sentir de nuevo aquel cosquilleo que me provocaron los azotes.

— Hazlo.. Porfavor—Musite mirando sus ojos clavados en los míos ante mis palabras.

El sonrió con malicia— Dime.. ¿Qué quieres que haga?— Ordenó con la voz cargada de lujuria, una que ambos compartíamos— Dime.

— Quiero.. Quiero que me azotes, Jean—Mí intimidad vibró haciendo que diera un brinco acompañado de un suave jadeo.

Su mirada cambio de un momento a otro, se volvió mucho más oscura. Con deseo. Aquella mirada que me dejaba sin aliento y con la mente en blanco, sus ojos brillaban y su mandíbula estaba ligeramente apretada.

— ponte de pié..—Indicó con su barbilla.

Obedecí ante su fuerte voz, me puse pie frente a él, me di la vuelta de nuevo viéndolo parado con las manos en sus bolsillos mirándome con atención.

— Quita tus pantalones.

Mis mejillas se pusieron coloradas ante aquellas palabras, trague con fuerza antes de quitarme los zapatos dejándolos a un lado para después desabrochar mis pantalones. Sus ojos seguían cada uno de mis movimientos algo que me ponía mucho más ansiosa. Los pantalones quedaron debajo de mis pies dejando solo mis bragas rosas.

— Date la vuelta y levanta los brazos.

Me di la vuela e hice lo ordenado. Sentí sus largos dedos bajar el cierre de mi blusa dejandola sobre él sofá, sus manos fueron hasta mi cintura recorriendo hasta mis pechos presionandolos con fuerza, fue casi inevitable no soltar un gemido. Sus manos masajeaban mis senos a lo que yo solo podía jadear como loca, me encantaba.

— Me gustan tus pechos. Son grandes y me gustan mucho cómo se sienten— Susurro en mi oído. Esas simples palabras hacían que la sangre subiera a mis mejillas y que al mismo tiempo pudiera sentir como provocaban humedecer mis bragas.

𝐈𝐍𝐍𝐎𝐂𝐄𝐍𝐓 ➳ Jeancarlo León (En Edición) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora