Capítulo 9: Escapar

506 104 13
                                    


Su padre era lo peor de la historia.

Había recorrido toda la casa en busca de algo que lo ayudara escapar, pero su padre se había llevado todo lo que podría ser usado como arma.

La puerta principal estaba cerrada con llave, las ventanas también y la chimenea tenía rocas que impedían el paso.

No podía quedarse ahí, debía ir con los amigos de Sero y advertirles para que detuvieran a Endeavor. Debía haber algo...

Intentó sacar todas las rocas que estaban en la chimenea, pero de todas formas su pileo era demasiado grande para entrar, por lo que solo se ganó más heridas en las manos.

Y entonces se le ocurrió.

Posiblemente se lastimaría pero daba igual, era la única opción.

Agarró una de las rocas que sacó de la chimenea y subió a su habitación. Tomó aire para prepararse y la arrojó con todas sus fuerzas contra el cristal de la ventana.

El cristal se hizo añicos y la piedra calló del otro lado, hacia el bosque. Todoroki sonrió.

Agarró el reloj de su mesita de noche y se lo metió en el bolsillo para después salir por el agujero que había hecho, pero cuando quiso agarrarse del árbol frente a él su sweater quedó enganchado en uno de los cristales haciendo que perdiera el equilibrio.

Cayó abruptamente al suelo del bosque, con muchos cortes en el cuerpo pero una sonrisa en el rostro.

Era libre.


***


Izuku, Kirishima y Bakugou estaban en la habitación del pelirrojo cuando oyeron algo golpear la ventana.

Al principio pensaron que era un pájaro, pero después de que se repitiera otras dos veces, el peliverde se levantó para ver que sucedía.

-Es... ¿Todoroki-kun?

-¿Qué?- Kirishima se levantó para ver- ¿Cómo hacemos para que entre sin que lo vean?

-Lancemos una tela- sugirió Bakugou.

Entre los tres sacaron una de las sábanas de la cama y la cortaron para hacer una cuerda que lanzaron por la ventana. Cuando sintieron un pequeño tirón, empezaron a jalar para subir a su amigo.

-Todoroki-kun que... ¡Oh por dios!- exclamó Izuku, y no sin razón.

El bicolor estaba sucio con tierra, tenía varios cortes en la cara y los brazos junto con un gran moretón en la mejilla y el antebrazo izquierdo. Sus manos estaban manchadas de sangre y cuando se puso de pie vieron que también tenía moretones en las piernas.

-¡Traeré agua!- dijo el pecoso antes de salir corriendo.

-¿Qué te pasó?- preguntó Eijiro.

-Es una larga historia, tuve que escapar de mi casa. Pero eso no es lo importante, van a matar a Sero.

-¡¿Qué?!

-Mi padre se enteró de que me ayudó a salir, me dijo que se aseguraría personalmente de que lo arrestaran y lo ejecutaran por sus crímenes contra la corona.

Midoriya volvió con unas tiras de tela blanca y un bowl con agua.

-Siéntate Todoroki- indicó el príncipe mientras caminaba de un lado a otro.

Izuku empezó a limpiar las heridas del hongo, pero este solo quería levantarse e ir a buscar a Hanta.

-Si lo arrestaron debe estar en los calabozos, eso está abajo- razonó Kirishima- Llegar ahí no es tan difícil, el problema será salir con él. Yo podría bajar, pero llamaría la atención igual que si bajas tu Kat. Tal vez...

Fairy Tail ~ |Seroroki|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora