Capítulo 7: El festival

528 97 45
                                    


-¿Listo?- preguntó Sero.

Era la mañana del festival, él y Todoroki estaban de pie en los límites del bosque.

-Yo... estoy algo nervioso- admitió agarrando la correa de su bolsa- ¿Estás seguro de que funcionó?

-Bakugou se asomó en su cuarto esta mañana. Esta completamente desmayado.- Hanta vio la inseguridad en los ojos del hongo- Hey, no tengas miedo.

-Es más fácil decirlo que hacerlo.

Sero rio.

-Lo sé, perdón si fue una estupidez. Pero... estaré contigo en todo momento, no dejaré que nada malo te pase- al darse cuenta de lo que dijo se sonrojó y empezó a mover las manos- ¡No es que yo sea la gran cosa, por supuesto, solo decía que en caso de que pase algo puedo ayudarte y...

Se detuvo al escuchar la risa de Todoroki.

-Está bien, confío en ti.

Hanta entendía que tuviera miedo, era lógico considerando que estaba a punto de alejarse de todo lo que conoce como el mundo para ver algo totalmente nuevo.

-Es solo...- el hongo miró hacia los árboles que lo separaban de la libertad- ¿Y si no es tan increíble como lo imaginé? 

El azabache sonrió y extendió una mano hacia él.

-Lo será- aseguró.

Como si fuera lo que necesitaba oír, Shoto tomó su mano y caminaron fuera del bosque.

-Abre los ojos- indicó el hada.

Todoroki lentamente acató a lo que le dijeron y un paisaje completamente nuevo se extendió frente a sus ojos.

Podía ver casas que empezaban a aparecer y se iban reproduciendo más y más hasta llegar al castillo, que sobresalía imponente por sobre los demás tejados del reino. Unos metros frente a él había un camino de pierda que llevaba directamente a la ciudad, y podía ver destellos del mar asomarse por detrás del castillo.

-Bienvenido a Yueei, Roki- dijo Sero sonriendo ante los ojos abiertos de admiración que tenía el otro- Vamos.

Jaló suavemente de la mano contraria para que empezara a caminar.

A medida que se acercaban más la emoción de Todoroki crecía, y constantemente giraba la cabeza para poder ver en todas direcciones. Sentía que no le alcanzaban los ojos.

Se adentraron en el reino y de inmediato Shoto deseó poder dibujar más rápido. Podía ver letreros de panaderías, librerías y tiendas de ropa. Los troncos de los árboles estaban decorados con listones coloridos y por encima de la calle estaban colgados banderines amarillos.

Se detuvieron contra una muralla para que el bicolor pudiera dibujar lo que veía y Hanta sonrió al notar la alegría que desbordaba su mirada.

-¿Terminaste? Aun queda mucho más por ver- Todoroki volvió a guardar el cuaderno y asintió.

-Enséñame más- pidió.

Caminaron por las calles deteniéndose en distintos puestos para que el hongo admirara. 

No tuvieron ningún encuentro con guardias, aunque la mayoría de la gente se volteaba al verlos pasar. No es común ver a un hada y un mitad hongo paseando por la ciudad.

Llegaron hasta la plaza principal, donde se estaba desarrollando la mayor parte de la acción junto con música en vivo guiada por una chica de cabello morado.

-Increíble- murmuró Todoroki mientras miraba embelesado una caja de música que reproducía una agradable melodía.

Sero solo se dedicaba a mirarlo con una sonrisa en el rostro y su corazón latiendo con fuerza. Sabía perfectamente cuál era su problema: Estaba enamorado.

Fairy Tail ~ |Seroroki|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora