Hacia las estrellas (Hawks y tú)

3. Un sábado con Hawks

-Edit del 17/11/21: Corrección de unos fallos-

Narración en 2ª persona

Ese fin de semana, el sábado para ser más específicos, fuiste a dar un paseo por la ciudad para ver si encontrabas al héroe alado.

Y lo hiciste. Intentó ayudar a una señora mayor a cruzar la calle, pero esta al parecer lo confundió con un criminal que tiene la cabeza parecida a la de un león y lo empezó a golpear con su bolso mientras le gritaba.

—Debe ser por el peinado...— pensaste mientras mirabas con algo de distancia.

Te dio pena...y risa, pero eso último es algo que Hawks no necesita saber.

Tras ver esa escena fuiste con él y le saludaste para luego ir con él caminando tranquilamente por la calle mirando como algunos niños paseaban con sus padres.

—Vamos a ese parque un momento, necesito mi dosis diaria de cafeína.— dijo el alado para luego dirigirse hacia allí, también murmuró algo en bajo después de decir eso pero no alcanzaste a escuchar de que se trataba.

Quedaste algo confusa al escuchar que iba a comprar el café en un parque, pero se desvaneció en cuanto viste la razón por la que había dicho eso.

A un lado en el parque había dos máquinas expendedoras con comida y bebidas dentro, viste como el rubio se acercó algo animado a la que había en la derecha mirando de arriba a abajo lo que había dentro.

—¿Te gusta el café de este sitio?.— preguntaste mientras ibas hacia el, riendo un poco por el entusiasmo que parecía tener, el hombre asintió.

—Es el mejor de toda la ciudad.—

—Lo tendré en cuenta para otra ocasión.— tras decir eso sacaste algunas monedas de un bolsillo para contarlas. Por suerte tenías el dinero suficiente.

—Oye, ¿Qué haces sacando eso?— el héroe tomó tu mano con las monedas y la cerró mientras te miraba —dije que te iba a invitar a un café, si pagas tu entonces no estoy invitándote.—

Lo pensaste un par de veces mientras lo mirabas para luego guardar el dinero en el bolsillo de nuevo -Gracias, aunque si te soy sincera no me importaba pagarlo.-

—Pues a mí sí, quedaría mal si no cumpliera mis promesas...aunque técnicamente no te prometí nada.— dijo con una leve risa para luego sacar un billete de su cartera y comprar ambas bebidas.

Te agachaste y recogiste ambos cafés para luego ofrecerle uno, Hawks te lo agradeció antes de abrir el suyo y darle un par de tragos.

—Ah, mucho mejor...ahora sí que podré estar todo el día de un lado a otro sin parar.— dijo con una pequeña sonrisa, estarías mintiendo si dijeras que eso no te había preocupado aunque fuera solo un poco.

¿Es que acaso está todo el día patrullando y deteniendo a criminales? ¿Cuando descansa?

Esos fueron los principales pensamientos que tuviste, además de preguntarte cuándo hacia sus pausas para comer si supuestamente no tenía tiempo.

Saliendo de tus pensamientos abriste tu propio café y tomaste un poco, sabía bien para ser algo que vendían en un parque por tan poca cantidad de dinero.

Pero lo que más notaste fue su dulzura, no necesitabas mirar la etiqueta de los ingredientes para saber qué más de la mitad era leche y azúcar

—¿Cafeína y azúcar? Creo que Hawks no se lleva muy bien con su horario de descanso, ¿Cómo es capaz de dormirse este hombre?.— pensaste mientras lo mirabas tomarse el café, parecía feliz.