despertar: una nueva aventura

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Con la partida de los piratas las escapad as de Luffy se habian reducido hasta volverse nulas por la promesa de Makino de ir a visitarlo de vez en vez.

Luffy ya tenía 7 y sus hermanos 10. Habían construido una casa en un árbol para no vivir bajo las reglas de Dadan y les iba bastante bien solos.

Entrenaban, cazaban y se divertían entre ellos.

También Sabo había comenzado a enseñarles a leer y escribir, por suerte sus hermanos colaboraron y avanzaban correctamente en su aprendizaje.

Ahora mismo estaban en su casa del árbol era de noche, los tres estaban despiertos, sentados y hablando.

-Papi tenía razón, papá fue genial - el menor de los tres dijo con brillo en los ojos.

-Es verdad, papá realmente fue increíble
-concordó Sabo.

-Sigue sin gustarme que papá dejara solo a papi -Ace tenía los brazos cruzados y el ceño fruncido.

-Recuerda que papi dijo que estaba enfermo, no nos iba a poder conocer aunque no se hubiera entregado -recordó con tristeza el único rubio.

Ace solo tronó la lengua con desagrado, aunque aún así comprendió y decidió calmarse.

-- Me hubiera gustado conocerlo -dijo el de la cicatriz y bajó el tono al igual que la mirada entristecido.

-Luffy, él nos quería, papi lo dijo, le hubiera gustado conocernos pero la enfermedad no le dejó consoló su hermano rubio al menor y asintió con lentitud.

--Será mejor dormir, es tarde y mañana hay que ir por madera a Gray Terminal -recordó, poniéndose en pie y comenzando a preparar su improvisada para los tres.

Un bostezo involuntario escapó del pelinegro menor, quien frotó su ojo con cansancio, se acomodaron sobre la cama con Luffy en el medio y se taparon, luego no tardando en dormir.

En la mañana fueron a Gray Terminal para conseguir madera ya que su casa del árbol Havia sido dañada en una tormenta reciente, escabaron y cogieron todo lo que pudieron y volvieron a su hogar, comenzando la reconstrucción, en la tarde vieron como no era suficiente y que deberían volver.

-Aún no es de noche, podemos volver a Gray Terminal y coger lo necesario -opinó Sabo.

Los pelinegros estuvieron de acuerdo y
comenzaron a correr hasta el lugar.

Apenas habían comenzado cuando una explosión los alertó, se reunieron cuando otra explosión volvió a sonar.

-Qué está pasando!? -se exaltó Luffy fue cuando el fuego comenzó a rodearlos.

-Debemos volver al bosque! -gritó Sabo y señaló un camino que aún estaba despejado.

Pero cuando el mismo rubio intentó correr por ese lugar el fuego lo inundó y quemó el rostro de Sabo de gravedad.
-!Sabo/Sabo-nii! -gritaron sus hermanos cuando retrocedió con una mano en su rostro.

-Tranquilos, estoy bien -quitó la mano de su rostro
y dejó ver la falta de piel alrededor del ojo izquierdo del chico, siendo sustituida por unas brillantes escamas amarillas y blancas.

-Sabo-nii, tu rostro --Luffy dijo con asombro y cierto horror el menor de los 3 hermanos y el mencionado volvió a llevar la mano a su rostro y lo acarició con cuidado, notando las escamas
sustituyendo su piel.

--Tápate, no puede verte nadie hasta que la piel vuelva a crecer --mandó Ace mirando a su alrededor fue cuando Sabo volvió a cubrirse que escucharon
sonidos metálicos acercándose.

Giraron y vieron como un grupo comenzaba a acercarse con rostros enloquecidos, Hasta que uno familiar hizo presencia.

-Bluejam-gruñó bajo el pecoso mientras su mellizo tapaba con más insistencia su ojo.