Al fin...
Después de tanta lucha, tanta muerte, tanto tiempo de vivir escondidos bajo tierra y murallas.
Después de mas de 800 años de temor, la humanidad podría salir libre de su escondite y continuar con la vida antes del Apocalipsis.
Solo que no fue de gratis y eso Emelia lo tenia mas que claro. La única "sobreviviente" (si así se le puede llamar) de aquella guerra.
Rodeada de los cuerpos muertos de sus compañeros y con un interminable dolor, sabia que solo tenia unos minutos de vida. Las lagrimas bajaban inconscientemente mientras intentaba con todas sus fuerzas alcanzar el walkie talkie en el uniforme de su compañero fallecido, el aparato tenia unos minutos o tal vez horas, quien sabe si solo segundos pidiendo una señal de vida, pero la falta de piernas y el dolor insoportable que sentía al moverse no le permitía alcanzarlo para intentar dejar su orgullo de lado y rogar por su vida.
Recuerdos de los momentos felices de su niñez llegaban a ella, antes de ser forzada a entrar al ejercito y entregar su vida y corazón para salvar la humanidad, recordaba como era el ser una niña otra vez, sin complicaciones ni temas complejos por los que preocuparse.
y es que solo tiene 16 años, debería estar en casa tomando chocolate caliente o contando historias de terror en la noche con sus amigos, no a punto de morir de dolor en los residuos de una guerra, por que los NIÑOS tienen derecho atener una buena infancia y a gozar su vida hasta mas no poder.
pero desafortunadamente, nadie escucho los gritos de ayuda de Emelia hasta que ya fue demasiado tarde.
Emelia había muerto con los peores dolores y los mejores recuerdos, para el amanecer ya no quedaba nada mas que un contenedor vacío en su lugar.
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13 Años de Imaginación.
RandomDiversos cuentos ficcionarios de un escritor principiante. Contenido: Thriller. Mención de sangre, muertes y temas parecidos. Misterio