I Colores: Capítulo 3 I

240 40 13
                                    

Capítulo 3: Marcas

Capítulo 3: Marcas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


I Omnisciente I

La vista de la albina estaba clavada en Dororo, mientras que las cucharadas de arroz bajaban por su garganta. La menor sonreía con nostalgia mientras que en su mente pasaban las escenas de su pasado trayéndole recuerdos agradables...

- Oye...- Escucho decir a la mujer a su lado - Hace rato me llamaste mama ¿No? - Esta sonrió de ojos cerrados únicamente para asentir - ¿Tanto me parezco a ella? -.

Dororo sonrió ampliamente observándola con ilusión, y es que era como ver un reflejo de la misma.

- Si, eres exactamente igual -.

Aquel comentario solamente hizo que la albina comenzara a dudar aún más... Su expresión se frunció para voltear a ver a Hyakkimaru, este tenía una expresión algo más fría de lo usual... Aunque, algo no se sentía bien... Comenzaba a ver algo borroso...

- D-Dororo...- Murmuro tratando de acercarse. La vista de la mujer noto su expresión fatigaba, mostrando en su mirada disconformidad -.

- Entonces si es así... ¿Te gustaría un abrazo? - Dijo de forma abierta para ver a la menor quien simplemente sintió su corazón brincar de alegría y asentir, escondiéndose en el pecho de aquella mujer, quien sonreía de forma dulce y al mismo tiempo, macabra -.

- Dororo...e-espera...- Murmuro para caer al piso mientras la azabache ignoraba tal acto sintiéndose envuelta en el calor ofrecido por Okaka - Do...roro...- La albina giro su vista a Hyakkimaru con la mirada perdida. Este ya había caído hace unos instantes...y ella no tardo demasiado en ceder, desmayándose segundos después -.

La menor giro su vista para ver a sus dos acompañantes dormidos en el suelo sintiendo algo de pena, pues ambos tenían tiempo desvelándose para su seguridad. Dororo observo a la azabache que la tenía en sus brazos con una sonrisa triste.

- No han dormido bien últimamente... ¿Podrías dejarlos descansar esta noche? - La mujer asintió para acariciar el cabello de Dororo y levantarse un segundo -.

Saco un par de mantas cubriendo a ambos por separado para luego apagar la vela que iluminaba la pequeña casa.

- Hace frio por aquí en las noches... Así estarán más tranquilos - Dororo sonrió sintiendo algo de nostalgia, recordando a su madre hacer aquello cuando era aún más pequeña que ahora. Okaka al notar aquella mirada se sentó junto a ella, volviendo a tomarla entre sus brazos para acariciar su cabello con dulzura - ¿Sabes? Puedes decirme mama si te sientes más cómodo... no me molesta - La menor sonrió ampliamente para esconder su rostro en el kimono de ella -.

I Colores I Hyakkimaru x Reader IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora