Secretos Oscuros

Agradecimiento

Después de esa llamada, duré un tiempo feliz, hasta que recordé lo de Tonny, por qué se fue tan rápido, a él no lo despidieron ya que no lo vi en la gran oficina aquél día que nos votaron, así que, todavía estaba trabajando, por qué su reacción. Por un buen rato me invadían dichas preguntas en mi mente confundida.

Olvidando ese suceso, me bañé y me puse un vestuario como si fuera una reunión de familia, no quería que me vieran como un empresario. Sin demora me monto en mi carro y me dirijo a la dirección que me habían dado para la cita.

Llego a la casa de dicha dirección y toco la puerta, espero como cinco segundos y siento que van abrir la puerta, cuando veo quién la abrió, agarro mi pistola rápidamente, una que guardaba en casa y decidí traerla por si acaso, ya que la otra no sé qué pasó con ella, entonces la saqué esta que tengo porque era el hombre de seis pies que me encontré en el Bar aquel día de descanso, con el cual choqué y casi me golpea, me miró, pero esta vez no fue como aquella, era diferente su mirada, podía sentir como si quería algo de mí, así que me dispuse a saludarlo, cuando le iba a dar la mano se agachó y me dio un fuerte abrazo, no me resistí y colaboré, aparte de eso, acerca su cabeza a mi oído y me dice: "gracias por salvar a mi hija". En ese momento casi quedo inconsciente de la sorpresa que me acabo de llevar, me soltó y pude ver en sus ojos aguados, alegría y que lo que decía era verdad, me invito a entrar, mientras caminábamos recordábamos cuando nos vimos por primera vez, todavía seguía asombrado, este hombre es papá de... Sin terminar de hablar veo a Laura y a su madre platicando en el comedor, el cual estaba exquisitamente preparado, al verlas mi pensamiento se desconectó dejándome sin palabras, cuando las vi no supe que decir, pero ellas al verme sintieron una felicidad de como si hubiesen visto un ángel o a un héroe, en lo que razonaba me saluda la doctora y luego Laura, sin más preámbulo nos dirigimos a la mesa.

Mientras comíamos dialogábamos sobre lo que solía hacer, con respeto pedí saber los nombres de los adultos, el hombre dijo que se llama José Antonio y la doc. dijo que su nombre es Ana María, el mío es Wander dije, después de que ellos terminaron de presentarse. Sin poder más aguantar Laura dijo a vos de guerrera:

― "Papá dile para qué más lo citamos, ¡Dile!".

Entonces cuando José toma la palabra nuevamente me dice: "Wander, tengo una Propuesta para ti, quieres trabajar encubierto en la OPDG, "Organización Profesional de Delitos Generales". Me quedé como una estatua, pensé que el trabajo era como empleado en algo de la casa o un puesto en una empresa, pero así, es más grande la responsabilidad, aunque me gustaba la invitación, mejor lo niego porque querré seguir el caso de las mujeres. Sin que diera respuesta me dijo que están pisándole los talones al responsable del caso de las mujeres, entonces sin otro respiro conteste que sí.

Cuando se terminó el almuerzo, Laura les dijo a sus padres que necesitaba un guardaespaldas y me ofrecí, hasta que José resolviera lo de mi reclutamiento en la OPDG, y me dijo que comenzaba hoy mismo, entonces salimos a donde una amiga la cual le habían matado a su madre.