Ryusui & Ukyo |Escenarios|

La curiosidad de Ryusui

—Ryusui, ¿puedes dejar de mirarme? —el arquero se giró para posteriormente fijar sus ojos en los del rubio.

Había sentido su mirada durante varios minutos. Al principio lo ignoró, sin embargo, le comenzó a resultar incómodo. Además, todavía no habían dicho nada de su recién empezada relación a los demás, y aquello les delataba.

—Sí, perdona. —se disculpó. La sonrisa que acompañaba su expresión no brindaba nada de confianza.

—Ryusui... —sus orbes se conectaron, lo que fue suficiente para saber sus intenciones.

 No era tonto; el capitán del Perseo quería algo.

—Estoy curioso... ¿Dónde tienes la marca de petrificación? — el bajo se sobresaltó —. No soy el único que se lo pregunta. Es el gran misterio del Reino de la Ciencia.

—No voy a decirlo. No creo que sea algo tan importante —se rascó la nuca nervioso. No era la primera persona que se lo preguntaba, y estaba seguro de que tampoco sería la última.

—No la tendrás en... —su mirada descendió hasta la entrepierna. Con un rápido movimiento Ukyo se cubrió.

—¿Dónde estás mirando?

—También podría estar...—rodeó al bajo situándose detrás de él—, en tu trasero.

—¡Ryusui!

—Un día podrías mostrármela. —susurró en tono coqueto, posteriormente sopló en el sensible oído del chico sonar.

—¡Para! —el peliblanco le dio un suave empujón para apartarlo.

El capitán rio a carcajadas.

Ukyo bajó la visera de su gorro para cubrir su rostro, aunque sus orejas totalmente rojas eran perfectamente visibles.

—Es broma —se dio media vuelta y elevó su mano en forma de despedida —, o eso puedes pensar.