Capítulo 50

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POV. NARUTO

Una vez más Sasuke no había asistido a clases -¡Mierda Naruto deja de pensar en el!- cada vez que el llegaba a mis pensamientos, mi voz interna me reprendía. Pero me era completamente imposible sacarlo de mi mente.

-Uzumaki- cerré la puerta de mi casillero para poder ver quién me llamaba. Era la idiota de Sakura.

-¿Qué quieres?- le pregunté de mala gana, y ganas para partirle la cara me sobraban..

-Es Sasuke- dijo agitada, seguramente venía corriendo.

-Sakura...- dije con fastidio -No estoy de humor y mucho menos si se trata de el- me di la media vuelta.

-Se irá...- escuché que decía a lo lejos.

-Que le vaya bien- dije sin detenerme.

-Tú no entiendes, ¿cierto? El te necesita- me detuve y regresé hacia ella.

-¿Para qué? ¿Apostaron de nuevo?- pasé mi mano por mi cabello con desespero -No me interesa nada relacionado con el, me da lo mismo si me necesita o no. Le dejé muy claro que no lo quería cerca de mí- me miraba con rabia y puedo jurar que yo a ella también

-Perfecto- miró hacia abajo y luego volvió a subir la mirada -En dos horas se va del país- rebuscó en su mochila y sacó un sobre blanco. Me lo lanzó y por reflejo lo atrapé -Yo me alejé cuando más me necesitaba y tú fuiste el único que estuvo ahí con el, créeme que no jugó contigo- se dio la media vuelta dejándome en medio del pasillo con el sobre blanco en mis manos. Lo miré y al ver su letra el coraje me inundó y con ambas manos lo arrugué haciéndolo una bola de papel que terminaría en el primer basurero que encontrara.

Me acerqué al basurero y miré una vez más la bola de papel. Se iba del país, tal vez sería lo último que sabría de el. No pude hacerlo. Guardé la bola de papel en un bolsillo de mi chaqueta. Regresé a mi casillero y dejé los libros, no tenía ganas de entrar a clases.

Llegué a casa, estaba vacía. Últimamente parecía que nadie vivía ahí. Boruto seguía resentido, ya que un par de veces más le grité por constantemente preguntarme por Sasuke. Nunca le había hablado de ese modo, pero tampoco nunca me había sentido así de destrozado, así de dolido. El no podría entenderme por más que quiera. Me dejé caer en el sillón central de la sala mirando hacia la televisión apagada. Eché la cabeza hacia atrás viendo el techo, tratando de organizar mis pensamientos. Metí mis manos a los bolsillos de la chaqueta y amente sentí la bola de papel. La saqué, la extendí y nuevamente lei mi nombre con bolígrafo rosado. El sabía cuánto detestaba que usara esa tinta incómoda para leer.

-Vamos Naruto, ¿qué puedes perder?- mi mente me animó a leerla, ya no podía sentirme peor. Rompí el sobre por uno de los costados para sacar la hoja blanca doblada en tres y ahora también arrugada. Tinta negra abarcaba más de la mitad de la hoja.

Naruto.

Sé que detestas que escriba con bolígrafo rosado, lo siento no tenía otro sobre. No sé si leerás esto, tal vez no lo hagas y terminará en el basurero, pero no pierdo nada intentándolo.

Fui un estúpido, jamás debí haber jugado contigo. Sé que estuve mal y es algo que jamás me podré perdonar... Pero quiero que sepas que todas las cosas que te dije nunca fueron falsas. Todo lo que te decía salía de mi corazón.

Al principio lo vi como un reto, me decían que era completamente imposible que tú te fijaras en mí. Que era imposible que siquiera me dijeras tu nombre... y vaya que lo fue. Pero valió la pena, las últimas semanas que estuvimos juntos fueron... ¡Increibles!

Ahora me doy cuenta de que a Sai nunca lo amé, sólo fue un capricho que me negaba a perder. Supe que no lo amaba cuando conocí al verdadero Naruto, y ahí fue cuando me enamoré de verdad y por primera vez. Te amo tanto Naru y entiendo que no quieras verme ni saber nada de mí, pero tenías que saber esto, tenía que hacerte saber que te amo y lo seguiré haciendo.

También para decirte que me iré. Nadie (tú, mi padre y Sakura) sabe a dónde iré, sólo les avisé que saldría del país. Después de todo aquí no hay nada que me retenga. Tenías razón... estaba solo y estoy solo, excepto en el tiempo que estuve contigo, la palabra soledad desaparecía de mi vocabulario. Cuando estaba con ustedes, contigo y con Boruto me sentía tan querido. Me sentía tan importante y es algo que les agradezco de sobremanera. Por favor dile a Paulina que me perdone por haberle mentido, seguro estará molesto conmigo. Pero que no se le olvide que el y tú, Naruto, fueron lo más importante que tuve.

Te amo Naruto, y una vez más perdóname...

Sasuke Uchiha.

Me, Myself and I Donde viven las historias. Descúbrelo ahora