Chan y Minho se conocieron de casualidad en un bar y disfrutaron de ese momento creyendo que nunca volverían a encontrarse, pero claro que no fué así y al reencontrarse después de lo ocurrido, deciden continuar como amigos (con derechos) hasta que u...
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En los pasillos entre una clase y otra, se topó con Juyeon, quien le sonrió enorme.
-Hey Min... ¿cómo estás?.-
-Hey... bien ¿y tú? ¿Qué tal tu primer día de clases?.-
-Todo muy bien, me gusta la escuela... quería preguntarte ¿Será que puedo sentarme con ustedes a la hora del almuerzo? Aún no conozco a nadie y ...-
-No creo que haya problema Juyeon, te veo allá para presentarte con todos.-
Y los dos se despiden y corren a sus nuevas clases.
Más tarde a la hora del almuerzo Minho repartió la comida, cuando llegó Juyeon, lo presento con todos y tomaron asiento.
- Chicos tengo que hacer algo, Seungmin te veo en el salón.-
Y tratando de esquivar las preguntas de parte de los amigos sale casi corriendo del lugar.
Cuando llegó al gimnasio, no vio señales de Chan por ningún lado, entonces marcó a su número de teléfono, escuchándolo sonar en los vestidores.
Tocó para ver si había alguien ahí y nada, camino hasta donde estaba el teléfono y lo escucho dentro de uno de los lockers del lugar, colgo y dejo de sonar... pero escuchó el agua de la regadera corriendo y camino hacia ahí.
-¿Chan?.- Llamo Minho para avisar que había entrado.
En eso el agua se detiene y escucha a alguien, así que se oculta entre los lockers y ve a Chan salir de las regaderas con una toalla amarrada a su cintura con su pecho al descubierto, sus cabellos mojados y el agua que escurría de ellos caía a sus hombros seguíendo su camino, sobre las líneas que su torso y algunas bajaban por su bien marcado abdomen desapareciendo en la línea de la toalla que estaba en su perfecta cintura.
Minho pasó saliva siguiendo por un momento la ruta de las gotas hasta verlas desaparecer.
Reaccionó cuando Chan se deshizo de la toalla para vestirse y lo más silenciosamente posible se acercó a la puerta, tocó y entró rápido llamando a Chan.
-Aquí estás.- Dice sonrojado.
-Hola... terminé antes y alcance a ducharme ¿estás bien?, estas sudando.-
-Sí, si.. solo corrí para comer con calma.-
Chan sonrió de lado, viendo lo nervioso que estaba el menor.
Se acercó lentamente hasta que quedó frente a él, Minho tenía la mirada en el piso, tratando de no ver el torso aún desnudo de Chan.
-Toca.-
-¿Qué?... Nooo...-
-Lo haz tocado antes y yo te he tocado más de lo que se ve a simple vista Minho.-
