El Zorro y El Dragón

7.4K 521 1.1K
                                    



El Zorro y El Dragon


-El último-

Desde el ataque a su aldea cuando era un niño siglos atrás, supo que se había quedado solo.

Su especie era mitad humano, mitad dragón y la gente les admiraba y temía por igual, eran semi humanos con formas en su anatomía mezcladas con las de un dragón; era algo tan bizarro de ver como de comprender, que vivieran miles de años, que nacieran de un huevo, que, al llegar a la adultez, pudieran transformarse completamente en dragones majestuosos y surcar los cielos, casi como criaturas divinas.

Toda su gente compartía las mismas características físicas, ojos de rubí, sus dientes afilados, en sus espaldas un par de alas pequeñas, sus pieles blancas contrastando con su cola que mostraba hermosas escamas color escarlata.

Su gente era preciosa, pero ya no estaban.

Él era el último.

Pero, aunque desde niño creció, oculto y solo en las profundidades de una cueva en un bosque, eso no le había impedido ser un chico con el carácter más dulce y amable que la naturaleza hubiera conocido.

Tan es así que las mismas criaturas del bosque le ayudaron e hicieron compañía a lo largo de los años.

Aunque su naturaleza era la de comer carne, él jamás había lastimado a ningún animal, así que aprendió a comer flores y frutas, las cuales cedían con facilidad ante sus afilados dientes.

Ese carácter suyo de proteger a los animales le gano varios encuentros con cazadores que huían despavoridos al ver a una criatura monstruosa ahuyentarlos cuando se atrevían a meterse al bosque a lastimar a sus amigos.

Así por años y años hasta que toda la gente de la región empezó a creer que el bosque estaba maldito y que era custodiado por un gran demonio que asesinaba sin piedad a quien se atreviera a entrar.

Eso ya fue exageración del relato original, él jamás había matado a nadie, espantado sí.

Por eso a modo de reto, de vez en vez jóvenes de la aldea cercana se adentraban y mostraban su valentía junto a sus amigos, querían probar que tan hombres ya eran y como aquel demonio no les asustaba.

Aquello le parecía divertido de observar, le gustaba ver oculto a los jóvenes llegar en grupo fingiendo ser guerreros para después salir corriendo gritando cuando él decidía asustarlos.

Pero en una de esas ocasiones un chico se lastimo el pie mientras huía y siendo fiel a su naturaleza amable, lo ayudo, lo llevo inconsciente a su cueva y sano su pie.

Aquello fue un gran shock para cuando el joven despertó, al verse curado y sin daño alguno.


-Tú...eres el demonio del bosque ¿cierto?

-Así me llaman, pero no soy un demonio, soy un dragón.

-Mi padre dice que los dragones ya no existen.

-Soy el ultimo.


Aquellas palabras resonaron en el corazón del herido joven y pudo sentir su soledad, también sintió su corazón noble y tuvo la necesidad de hacer que no se sintiera solo, si los relatos eran ciertos, los dragones habían desaparecido hacia siglos, eso significaba que llevaba todo ese tiempo solo y quiso remediar eso.

El Zorro y El DragónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora