🍁Amor De Septiembre🍂 (Editando)

LB《CAPITULO 27》1

22 de septiembre el cumpleaños de Aristeo es hoy, será aquí en casa del abuelo. Cuando me avisaron pensaba que era una jodida broma pero no fue así.

Me encontraba en el balcón de la habitación con mi taza de café, aquí en la mansión de el abuelo me atienden de maravilla pero no me quiero aprovechar así que es temporal mientras encuentro un departamento.

- Hola Larissa, puedo pasar- dijo el abuelo que estaba en la puerta mi habitación ya que la tenia abierta.

- Puede pasar Sr Stile- me da una sonrisa y se pone junto a mi.

- ¿Cómo van los preparativos?- dije mirando a las personas que estaban en el enorme patio adornando.

- Supongo que bien- dije mientras daba un sorbo a mi café.

- No quieres verlo verdad- el me mira fijamente.

- Cuando una persona es madura sabe como comportarse con quien la daño y si lo veo solo será por su cumpleaños no para nada más- el me da una sonrisa.

- Tu forma de pensar me agrasa- y le devuelvo la sonrisa.

- Señorita Méndez, Sr Stile la señorita Sofía llego con el pequeño Matías - era Margaret una de las cocineras.

- Las veo abajo iré a recibirlos- dijo el y salio.

- Ahorita lo alcanzo- dije y asintió.

-Oye Mar, me puedes hacer un favor- dije acercandome a ella.

- Dígame señorita- respondio y yo cerré la puerta.

Agarre un regalo y se lo entrgue-. Necesito que pongas esto en la mesa de regalos y si preguntan de quien es dices que es para Aristeo de tu parte- le dije y ella asintió.

-Si señorita yo lo hago-dijo y sonrió.

Íbamos saliendo de la habitación cuando se nos acerca corriendo otra de las cocineras.

- Destruyeron el Pastel del joven Aristeo- dijo Guadalupe

- ¿Quien fue?- dije preocupada.

- El niño Matías.

- ¿El esta bien?- pregunte y no me espere a que me respondiera y salí corriendo con tacones y baje las escalera llegando a la cocina.

Y ahí estaba el pequeño llorando.

- ¡El pastel tenía los palillos ya puestos!- dije mientras lo cargaba.

- No señorita, apenas los íbamos a poner- me tranquilice un poco.

- Te pegaste en algún lado cariño- dije sentandome en una silla.

- No- dijo entre sollozos.

- Entonces porque lloras Mati- dije mirándolo.

- Arruine el pastel de papá y no tendrá uno por mi culpa.

- No te preocupes cielo.

- Su cumpleaños se arruino y se va a poner triste- me mira con una cara muy tierna.

Sonrió a la gran idea que tengo-. Te parece si tu y yo hacemos un pastel para tu papi- se le ilumiraon sus ojitos y dejo de sollozar.

- Pero no tenemos tiempo- miro sus manos.

- Si tenemos tiempo cariño, terminaremos a tiempo- le di una sonrisa.

- Si, yo te ayudo- se bajo de mis brazos y se acerco a mar.

- Mar me das un mandil por favor- dijo con una sonrisa y yo solo lo observaba. Es tan tierno.

- Claro que si- y ella empezó a buscar y saco uno de su medida-. Justo había uno para ti, ven que te lo pongo- y el se negó y extendió sus manos-. ¿Porqué no pequeño?.

Y el voltea a verme-. Me lo pondrá ella- y se miro a Mar y ella asintió con una sonrisa, le dio uno para mi y se me acerco-. Toma- y ne los paso.

Primero se lo puse a el y luego me lo puse yo-. A empezar Mati- el asintió y todos empezamos a hacer el pastel.

Estaba batiendo el atún y matí se me acerca y me mancha de harina-. Upsi no me fije- y le hago una cara de enojada y el agacha su cabeza, agarro harina y cierro mi puño-. Era broma- y me mira.

Abri mi mano- mira una mosca- y el mira mi mano y le soplo la harina y le cae en toda la cara-. Upsi no me fije- repetí las mismas palabras que el y solo soltamos una carcajada.

- Eres divertida, no como mi mamá ella se la pasa regañandome y no se porque si yo la obedezco en todo- el me abraza y me habla al oido-. Una vez se emborracho y me dijo que por mi culpa papá no estaba con nosotros y que era un error- el se puso en frente de mi y una lagrima rodó por su mejilla y se la limpie.

- Nos pueden dejar solos por favor- le dije al personal de la cocina y salieron a checar los preparativos-. Si quieres contarme, estas en confianza cariño- y el asintió.

- No soy tonto, podre tener nueve años pero los niños escuchan y callan- sus palabras me sorprendieron-. Una vez escuche la historia de mamá y mi tío max y fue cuando entendí que mi papá no sabia de mi, fue hace unos meses, me aguante para no llorar y hice como si no escuchara, tengo seis años y comprendo muy pocas cosas y esa fue una de ellas- es inteligente para su edad-. Hay más cosas que no pudo decirte, pero con el tiempo sabras, solo no odies a papá, se que lo amas.

Un niño de nueve años me dejo perpleja, como puede ser posible que sepa tanto y como Pamela lo trata si antes la odiaba ahora más.

No quisimos hablar del tema y ambos teníamos harina, no la pasamos riendo entre el y yo, los del personal regresaron a sus lugares y nos veían a Mati y a mi con una sonrisa.

- Parecen Hijo y Madre pasándola juntos- dijo Mar.

- Matí es un niño increible- dije mirandolo.

- Tu también lo eres pequeño desastre- escuche la voz de el, emociones llegaron a mi pero me aguante.

- ¡Papi Feliz cumpleaños!- el se baja y lo abraza y Aristeo lo recibe.

- Estas todo lleno de harina campeón-dijo soltando una pequeña risa y me mira a mi-. Hola Lara.

-Hola- y miro a Matias-. Cariño, te baño yo o tu papi- lo pensó por unos segundos y me señalo.

-Tu y me puedes peinar- yo asentí y le agarre la mano con una sonrisa.

-¡Ahorita les llevo la ropa!- dijo el.

-¡No te molestes, se donde esta!- y salimos de la cocina.

Se miraba jodidamente bien con ese pans gris y esa camisa del mismo color tan pegada que se le notaban sus cuerpo marcado, si no fuera por ella ahorita me lo estuviera comiendo. Basta Larissa olvídate de el, no merece ni que menciones su nombre.