LB《CAPITULO 8》1

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Estaba nerviosa y no porque el elevador se detuvo, sino por la persona que está conmigo.


—Le marcare al de seguridad, para que venga a sacarnos—le dije.

Él solo asintió, pero nadie contesto la llamada, aunque les mande un mensaje, pero en ese momento mi celular se apago.

—Se apago.

—Entonces esperaremos hasta que alguien se percate—menciono él.

—Sigues molesto—me volteo a ver.

—Si, porque si algo te pasa no me lo perdonaría.

—Estoy grande puedo cuidarme sola—  arquea una ceja.

—Estas segura, ¿Cómo te ibas a venir cuando terminara la carrera?.

—Una pregunta sin respuesta—dije riendome y me mira mal.

Me dio nervios aumentaban cuando se me queda viendo fijamente.

—¿Oye estas bien?.

—Si, ¿por qué?

—Segura.

Me dijo mientras se ponía en frente de mi, puso su mano derecha apoyándose en la pared y con la otra me agarro la cara haciendo que lo mire fijamente y poniendo mis manos en su pecho.

—Te pone nerviosa el estar aquí sin poder salir—sonrió—. O te pone más nerviosa que sea yo el que este contigo—yo solo me quedé callada—. ¿Qué pasa Larissa?, no te pongas así, no muerdo o al menos que quieras.

No sabia como reaccionar, me agache y me salí por un lado, él solo negó tres veces sonriendo.

Se recargo y nos quedamos viendo fijamente, ninguno de los dos estaba incomodo donde esto parecía un juego de miradas y perdía el que la desviara primero. Su pelo estaba un poco desordenado, camine hacia él y pase mi mano para acomodarlo. Se que odia que le toquen su cabello pero eso no me importo. El solo veía él movimiento de mis manos,  cuando me agarro de la cintura pegándome con su cuerpo.

Estábamos tan cerca que podía sentir sus labios rosando con los míos y nuestras respiraciones estaban aceleradas, pero ninguno de los dos hacia el intento de separarse. Sentía que en cualquier momento nuestros labios se unirían, bueno eso pensé yo cuando el elevador empezó a moverse y nos saco de la burbuja en la que estábamos.

El elevador se abrió y ninguno de los dos dijo ni una sola palabra y caminamos hacia el departamento.

Al entrar los chicos estaban de un lado para el otro, Miriam y Valentina marcando con su celular y los demás parecían preocupados.

—¿Qué tienen?—pregunte mirándolos y Aristeo me fulmina con la mirada.

Todos voltearon a vernos y me abrazaron las chicas y los chicos soltaron un suspiro mientras se sentaban en el sillón.

—¿Dónde estabas, sabes la hora que es?—Vale mira su celular—. ¡Casi las tres de la mañana!

—Ella me siguió hasta las carreras—hablo Aristeo.

—Al menos hubieras avisado, nos tenías preocupados—dijo Alan—. Espera que, ¿qué ella te siguió a las carreras? —y él asintió.

—Y que tal te fue Aristeo—los chicos preguntaron entusiasmados el iba hablar pero lo interrumpo.

—¡El gano!—les empecé a contar lo que vi.

Él se sentó en el sillón, de reojo vi como el se me quedaba viendo atento y sonreía. Me evite contar la pelea y lo del elevador. Su mirada en ningún momento la despegó de mi y Alan pareció notarlo, Aristeo se dio cuenta y puso sus manos en su nuca mirando hacia el techo con una sonrisa.

—La verdad estuvo muy divertido, aunque con miedo en ese lugar—sonreí.

—Un día nos tienes que llevar Aristeo—dijo Miriam.

—Ya les dije que no—respondió mirándola.

—Solo una vez—dijo su hermana.

—Por más que se arrodillen y me rueguen, jamás las arriesgaría a algo tan peligroso—Voltea a verme—. Y tu no lo vuelvas hacer—yo solo negué.

Después de un rato los chicos y yo compramos bebidas y yo me puse ebria. Aristeo no tomo, Sofía, Vale y Alan si tomaron. Miriam, Oliver, Iván ya se habían ido.

—Nosotros ya nos vamos—dijo Sofía.

—Adiós chicos, se van con cuidado—dijo vale.

Yo me estaba quedando dormida.

—Adiós chicos—volteo a ver a Aristeo—. Tu, ven aquí— él se acerca a mi—. Ponte de espaldas.

Me subí a su espalda y le susurre que me llevara a mi habitación a lo que me dijo que si mientras sonreía y al entrar a mi habitación me dejo en mi cama.

—Aristeo antes de que te vayas—me quedé unos segundos en silencio—. Eres mi corredor favorito—el solo asintió—.  Y esa camisa te queda jodidamente sexy—me mordí el labio inferior.

Él solo sonrió y se fue.

Aristeo.

Nadie me había estado tan atento en mis movimientos en la carrera, ella es la segunda y eso me alegraba, después de tanto tiempo alguien más me dijo que era su favorito. Y lo que paso en el elevador, mierda es la segunda vez que estoy tan cerca de ella.

—Vi como la mirabas, ni a Dafne la mirabas así—dijo Alan.

—Nada que ver, Larissa es solo una amiga, tranquilo—niega.

—Si tu dices, tal vez llevas poco tiempo conociéndola, pero has escuchado la frase "Amor a primera vista"

—Eso no existe Alan, solo tu crees en eso.

—Nomas no me hagas decirte, te lo dije—y se fue hacia su habitación.

—Hermano, deja atrás a Pamela y date la oportunidad de amar a alguien más.

—Ella esta en el olvido—dije mirando hacia otro lado.

—Tal vez ella está en el olvido, pero sigue en el fondo de tu corazón.

—Eso no es cierto—volteo a verla.

—¿Qué harías si ella regresará en el momento donde tú estas feliz, pensarías lo mismo?—niego—. Si llega ese momento y estas con alguien, vas a lastimar a esa persona, espero y equivocarme—ella se levanta y va hacia la habitación de invitados—. Larissa es una buena chica, conócela mejor—sonríe y se va.

Tal vez tengan razón, pero Pamela la ame con todo mi corazón y me fallo, no quiero que vuelva a pasar lo mismo.

Lara solo es una amiga...

🍁Amor De Septiembre🍂  (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora