El juego del olvido

Capítulo 7

*Tanya*

Prácticamente pasé de tener días tortuosamente tranquilos a ver al chico misterioso por todos lados. Ahora está frente a mí

Solo han pasado algunas horas desde que mamá y yo discutimos y me echó de casa, por eso me sorprendió que me llamarla

Solemos darnos nuestro espacio cuando estamos molestas con la otra

— Así que ella es tu hija— habla el extraño

— Siento haberte hecho esperar para decírtelo, pero en vista de la gravedad del asunto creí pertinente reunirnos para discutirlo

— ¿Qué está pasando mamá?

— Ya habías visto a Demian antes ¿No es así?

Con algo de remordimiento asiento, detesta que no le comparta este tipo de cosas... Dice que en los detalles pueden estar las respuestas que buscamos

— ¿Desde cuándo?

— Un par de días... No pensé que fuera importante, las pesadillas son normales en mí— miento, ya tenía mis sospechas

— ¿Qué es lo que has visto?

— Ve por ti misma— toco su antebrazo

No me gusta la cara de preocupación que tiene en este momento

— ¿Debería empezar a preocuparme? — el chico frunce el ceño

— Creo que aquí hay algo grande

— ¿Algo como qué? ¿Qué pasa mamá?

— Necesito más información, quizás los ancestros tengan algo de utilidad para decirnos

— ¿Quieres que te acompañe? — me aventuro a consultar

— No tardaré— sale casi corriendo

Incómodo, es justo como describiría este momento

— Entonces... Tanya... Hasta que nos conocemos

Bufo

— Al fin puedo ponerle nombre al rostro que ha invadido mis días

Ahora que puedo verlo mejor... Madre mía, si en las visiones se veía guapo en persona es completamente impresionante

— Jamás me imaginé que encontrando a Dilara fuera a dar con la chica de mis visiones

— ¿Qué estás buscando aquí? — soy directa

— Respuestas... Quedé algo paranoico después de que te aparecieras hace unos días y me mostraras una pila de cadáveres

Quedo tiesa cual estatua

— ¿También viste un montón de cuerpos? ¿Sabes quiénes son? Yo solo pude vernos a nosotros

— Espera, espera... ¿Nos identificaste entre los cuerpos?

— Sí, de hecho... Tú me indicaste en dónde estábamos

— Yo... En el primer sueño que tuve contigo, me internabas en un bosque y me mostrabas que el cuerpo frente a nosotros eras tú misma, o eso creía yo... Pero la llamaste Emily

Me pongo más rígida de lo que ya estaba

— ¿Te molestaría llevarme a conocer los alrededores? Tengo curiosidad

— En realidad Demian, llevo algo de prisa

Alguien llega a casa, y por las pisadas fuertes sé que se trata de Edward

— Tanya ¿Estás aquí? Tenemos que hablar y no aceptaré un no por respuesta

Pongo los ojos en blanco