La agente de Fuerzas Especiales Crystal Jones, marcada por el pasado, sedienta de venganza y dominada por la tristeza a causa del asesinato de su padre, decide regresar a Estados Unidos -luego de abandonar la nación en 2015 para cazar y acabar con H...
Crystal se encontraba en el sótano sola y molesta golpeando un viejo saco de box que era de su padre. Era de tarde y el ex soldado se había ido por lo que le faltaba a su antiguo departamento para venir a quedarse permanentemente en su casa con ella. De la nada empezó a recordar la visita que le había hecho a Ross para presentar sus informes sobre la misión con Sam y Bucky que consistía en atrapar a la pelirroja rebelde y de paso encararlo por algunas cosas que le había ocultado que tenían que ver con ella.
Flashback.
Cuartel General de Fuerzas Especiales. Washington D.C. Dias antes.
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Crystal caminaba muy seria, altanera e imponente sobre las instalaciones de dicho lugar, todos la miraban pasar, pues nunca imaginaron que tendrían en las instalaciones a la agente que acabó con varios grupos terroristas en Europa y Asia de forma sigilosa e implacable como si de una ninja se tratara. La fama de la chica se extendió por las regiones, en como preferia trabajar en las sombras y su constante rechazo al recibir méritos por su heroísmo y su negativa a pertenecer a Los Vengadores o a cualquier otro equipo de esa índole.
La mujer llegó a la oficina del General Ross sin anunciarse. Entró sin tocar al lugar seguida de su secretaria y el General estaba en medio de una reunión.
-¿Qué es esa manera de entrar...- reclama volteando y ve a la castaña y se asombra- Vaya sorpresa Crystal. Jamás imaginaría que estarías aquí- sonríe levemente el hombre.
-Señor lo siento, no la pude detener- Crystal voltea a ver a la secretaria.
-Descuida, no te van a despedir. Es mi culpa- responde la chica seria y luego voltea a ver al General- Señor. ¿Podríamos hablar a solas?- pregunta- Es algo importante y confidencial- recalca viendo a los presentes.
-Por supuesto. Señores- observa a los hombres con quien tenía la reunión y éstos se retiran en silencio con un asentimiento del General. El hombre se sienta y la chica saca un pendrive del bolsillo de su chaqueta de cuero y se lo entrega.
