~¿Academia?~

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En la casa haruno se encontraban mebuki, Sakura he Izuna charlando de manera casual mientras se preparaban para desayunar.

“¿entonces yo puedo asistir a ese lugar?, ¿De que me serviría entrar a la academia?” pregunto la pelirrosa a su madre quien le estaba sirviendo un delicioso y nutritivo desayuno.

“todos los niños van a la academia para aprender, para saber lo que significa ser un ninja y para terminar convirtiéndose en uno” dijo izuna mientras probaba la comida de su esposa.

“mebuki, te pasaste......¡está delicioso todo esto!, si sigues así me harás engordar mujer” dijo izuna mientras comía de manera rápida lo que tenía en su plato.

“ajajaj o querido que cosas dices” rio la mujer mientras se sentaba al lado de su hija, Sakura veía la escena con ternura mientras que también se le dibujaba una pequeña sonrisa en su tierno rostro.

“(me alegra verte feliz mamá...espero que tu sonrisa dure para siempre)” pensó Sakura mientras comía con toda la tranquilidad del mundo.

“piensa en que es tu decisión cariño...¿Quieres ser un ninja en el futuro?, ¿O prefieres trabajar conmigo en la tienda?” pregunto la mujer mientras veía a su hija pensar sobre que decisión devia tomar.

“si quieres tomar mi consejo, yo diría que debe esperar, si los viejos del consejo se llegan a enterar del poder que tiene Sakura podrían tratar de matarla o en el peor de los casos intentaran usarla para su planes” pensó en vos alta Izuna.

“el tiene razón mamá....debo vigilar a esos sujetos y no podré hacerlo libremente si me están vigilando a mi...por la visión que ví antes de nacer la mayoría de los problemas de la aldea he incluso la cuarta gran guerra Shinobi fue por culpa de los viejos del consejo” dijo Sakura mientras comía tranquila.

“esos viejos son unos malditos y no me sorprendí nada cuando me dijiste que culpa de ellos el clan uchiha fue casi eliminado..¿Que piensas hacer con eso por cierto?” pregunto curioso Izuna mientras se levantaba y llevaba su plato al lavado y ayudaba a su esposa con la limpieza de los demás utensilios de cocina.

“aun no lo sé pero trataré de que el líder del clan se olvide de la idea de una guerra en contra de la aldea...no todo fue culpa de los viejos del consejo, fugaku formó gran parte de todo lo que pasara debido a su plan de ir en contra del hokage....y pensar que todas esas personas que morirán serán debido a la codicia de ese hombre....”

“si quieres yo podría ayudarte a encontrarte con el, mikoto es una buena mujer y la conozco desde hace muchísimos años, la considero una amiga y en verdad no quisiera que le pasará nada ni a ella ni a sus hijos....¡es más el otro día ella nos invitó a comer a su casa!, Casi lo olvido” dijo mebuki mientras intentaba levantarse de la silla.

“ten cuidado madre, te puedes lastimar” dijo Sakura parándose al lado de ella para poder ayudarla ya que le costaba mucho levantarse cargando aquel muy abultado vientre.

Hace unos meses atrás mebuki descubrió que milagrosamente logro quedar embarazada nuevamente, aunque de milagroso no tiene nada ya que mientras ella dormía una noche Sakura fue a su cuarto y curo la matriz de su madre para que así pudiese concebir otro hijo.

No habían pasado ni seis meses de estar casado cuando descubrió que estás embarazada, la mujer haruno no entendía como había sucedido todo, con el tiempo al ver lo cariñosa que era Sakura con el bebé pensó que quizas ella había echo algo para curarla.

“¿Cuanto falta para que nazca nuestro hijo querida? Ya quiero cargarlo en mis brazos, ¿Sakura seguro que es un niño?” pregunto el nuevo señor haruno a su esposa he hijastra.

“falta muy poco..solo es un mes más y listo...tendremos a otro integrante más en la familia” dijo mebuki mientras se acomodaba el vestido.

“si será niño no te preocupes” le respondió Sakura a Izuna.

“bien, ahora vamos a lo de mikoto, ella me dijo que podíamos ir a eso de las 10 de la mañana” murmuró la pelirrosa mientras tomaba su bolso.

“son las nueve mamá, aún tenemos tiempo” dijo Sakura sabiendo cual era la respuesta que recibiría.

“ vamos Sakura, mírame, con esta panza no podré llegar tan rápido y el terreno del clan uchiha está casi a las afueras de la aldea” sin esperar mas todos tomaron sus cosas y lentos pero contentos salieron de la residencia haruno.

Al pasar por la aldea todos veían con ternura a la matriarca haruno y no solo por el echo de estar embarazada sino tambien por la felicidad que irradiaba.

Treinta minutos después al fin llegaron a la entrada del clan uchiha dónde unos guardias se acercaron para ver qué es lo que los haruno querían.

“¿Que hacen aquí? Este es el territorio uchiha, ustedes no pueden pasar” dijo el sujeto mirando con soberbia.

“mikoto uchiha me ha invitado a su casa...podrías llamarla porfavor para avisarle que llegue...es que no puedo estar tanto tiempo de pie” dijo mebuki acariciando su abultado vientre.

“ve a preguntarle a mikoto-sama si es verdad que espera a esta mujer” dijo uno de los guardias a un jovencito están de pie junto a ellos.

“soy Mebuki haruno querido” dijo la mujer a lo que el muchacho solo asintió y salió corriendo hacia la casa principal del barrio.

“¿Estás muy cansada madre?, ¿Quieres un asiento para que descanses?” pregunto Sakura al verla algo fatigada.

“estoy bien querida nada te preocupes” respondió mientras veía que a lo lejos venía de nuevo el muchacho corriendo lo más rápido que podía.

Una ves que se acerco al grupo le susurro al guardia algo que los haruno no pudieron escuchar, claro los adulto porque Sakura s había podido escuchar todo.

“bien pueden pasar, el los guiara a la residencia de la mikoto-sama, si vemos que intentan hacer algo raro no dudaremos en atacarlos” dijo el joven guardia en modo de advertencia.

“¿atacarías a una mujer embarazada he indefensa?, Debería darte vergüenza, animal” dijo Sakura mientras caminaba detrás de su madre.

Ante lo dicho por la niña los guardias se sintieron avergonzados, ¿Que daño  podría hacer una mujer embarazada? Avergonzados hasta más no poder no pudieron hacer otra cosa más que agachar la cabeza y quedarse en silencio.

“que niña más maleducada” murmuró uno de los guardias para luego quedarse en silencio.

Después de una corta caminata llegaron a la casa principal del clan uchiha dónde mikoto los esperaba en la puerta con una radiante sonrisa y con sus brazos abiertos listos para repartir abrazos.

el poder de un diosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora