Alcanzando la Divinidad

Capítulo 12: Día 63-70

"Jiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii ~".

*Contracción nerviosa*

"Nyuuuuuuuuuu ~."

*Contracción nerviosa*

"Meeeeewww ~."

* Contracción * * Contracción *

"Zzzzzzz".

* Contracción * * Contracción * * Contracción *

'* Suspiro * ¿Puedo voltear la mesa?'

Han pasado tres días desde que me desperté en la mazmorra y cuatro días desde mi increíblemente intenso desafío de salas de bonificación. Había dormido toda la noche en esa habitación, pasando mi primera noche en el calabozo mucho para mis chicas, gato divino, y sorprendentemente mis invitados se preocupan.

Actualmente era mi día 63 desde que llegué a la ciudad, y decidí sacar a Ryu de su habitación cargando la cama en la que estaba para permitirle disfrutar de un cambio de escenario en un espacio abierto.

Tenía la esperanza de que sería una buena oportunidad para que ella se relajara en el hermoso paisaje tranquilo de la caverna, con el agua reluciente gracias al musgo resplandeciente, el sonido del agua cayendo de su fuente como una pequeña cascada, el pozo cortado y dividió cuatro áreas de la caverna, y los suaves sonidos de las burbujeantes aguas termales.

Encuentro que siempre estoy hipnotizado por la vista, ya que calma mi mente con solo mirar a mi alrededor.

Y sin embargo, a pesar de toda esa belleza natural, de toda la belleza de las dos mujeres que actualmente están conmigo, y de toda la belleza del gato de grado divino en toda su sagrada pelusa, estaba muy incómoda.

Podrías pensar en despertarte en una habitación de bonificación vacía dentro de la trampa mortal conocida como la mazmorra, en un lecho de musgo increíblemente suave con tus invocaciones, criaturas que son más construcciones de maná, con sus propias personalidades que en realidad no necesitan dormir. , que estaban profundamente dormidos recostados contra ti me habría incomodado.

Podrías pensar que descubrir que subí de nivel sin mi propia entrada o memoria sería incómodo.

Podrías pensar que encontrar una armadura nueva y extraña de una calidad mucho más alta que la anterior que llevaba, ya equipada para mi cuerpo, que estaba completamente curada de las heridas que claramente recuerdo haber recibido, habría sido incómodo.

Incluso podrías pensar que el hecho de que no solo yo, sino mi convocatoria no tuviéramos memoria o conocimiento de lo que sucedió después de que terminó la pelea sería incómodo.

Demonios, podrías pensar que sería incómodo con lo malditamente enérgico y positivo que me sentí después de despertarme de todo eso, como si acabara de tener uno de los mejores descansos de mi vida, como si hubiera renacido y mudado algún tipo de piel que me pesaba.

Pero no, nada de eso me incomodaba.

Nada de eso me molestó más que algunos pensamientos diversos.

Me desperté de mi letargo en la mazmorra, renací como un nivel 2, con un cuerpo curado y recién equipado, y con un maldito salto en mi paso, simplemente me fui sin ninguna preocupación en el mundo.

No hubo drama, ningún cambio, ninguna escena cliché de ningún evento que altere el mundo, ni nada que haya cambiado.

La mazmorra no tuvo ningún cambio o hizo una escena inaudita que llamó la atención como algún tropo de anime o fanfiction.

Me fui a casa, me di una ducha, preparé la cena para mi Familia y mi invitado, y me fui a dormir como cualquier otro día.

La única diferencia fue que mis chicas me regañaron por mi ausencia y simplemente lo descarté diciendo que ahora estaba en el nivel 2, lo que hizo que Methe dejara de cuestionarme y me consiguió una cerveza de felicitación por mis logros.