Omegacember

Parte 6

Ofrenda

Drarry

(Omega! Draco/Omega! Harry)

Estaba a nada de ir a arrancarle la garganta a ese alfa que estaba hablando con Harry, sabía que para el azabache ese alfa era solamente un amigo, aunque el alfa no opinaba lo mismo, y esto lo podía notar por la forma en la que Cedric veía a el ojiverde.

Desde el cuarto año había estado enamorado de Harry, y ¿cómo no hacerlo? a pesar de que el ojiverde era gryffindor en poco tiempo se volvió su mejor amigo, aunque siempre añoró ser más.

Pero sus ilusiones murieron cuando ambos se presentaron como omegas, era imposible estar con alguien de tu misma casta ¿no?

Así que intentó comenzar a interesarse en alfas y betas, pero por más que intentó simplemente no podía ver a nadie de la forma en la que veía a Harry, no podía hacer que su omega saltara de alegría como cada vez que veía al ojiverde, no podía perderse en otro aroma que no fuera el de Harry, simplemente su omega parecía reacio a dejar ir al azabache.

Y esa tarde lo confirmó, su omega se estaba muriendo de celos por ver a ese alfa tan cerca de su Harry, moría de ganas de reclamar a Harry como suyo, a pesar de que sabía que era imposible.

—¿Qué te pasa Dray? Te veo muy perdido—

—Nada Pansy—

Sabía que la pelinegra no le creyó, pero en ese momento no le importaba en realidad lo que dijera.

—¿Por qué no lo acortejas? Todos saben que estás enamorado de él, ya deja de ser un miedoso—

—No es que sea miedoso, Pansy. Y lo sabes, sólo que esto es imposible— dije con cansancio mientras apoyaba mi cara en la mesa para evitar ver la escena que estaba pasando al otro lado del comedor.

—Sigo sin entender porque dices que es imposible—

—Creo que es más que obvio, ambos somos omegas—

Era algo obvio, no entendía como es que Pansy no podía verlo. Y como cada vez que pensaba en lo que pudo ser si ambos no éramos omegas metí mi mano en el bolsillo de mi capa, ahí estaba el primer regalo que planeaba darle a Harry cuando iniciara el cortejo, pero todo se canceló.

-Sabes que no es imposible, yo y Blaise somos alfas y apesar de eso estamos juntos, no veo problema alguno en que tu pareja sea de la misma casta, porque una casta no define tus sentimientos-

¿Qué? ¿Había escuchado bien? ¿Blaise y Pansy estaban saliendo? Recordaba que desde siempre Blaise había estado perdidamente enamorado de la ojiverde, pero no pensó que siguiera con ese enamoramiento después de que ambos se presentaron como alfas

—¿Tú y Blaise?—

—Sí, y yo te recomiendo que empieces a apurarte, porque a este paso te van a robar a tu omega—

En ese momento es cuando volvía a ver en la dirección en la que se encontraba Harry, para encontrar que Cedric estaba -ahora sí- demasiado cerca del ojiverde, y al parecer hasta el azabache se había dado cuenta y lo estaba tratando de alejar discretamente para no hacerle el feo.

No vi ni en que momento me paré, sólo me di cuenta que cuando llegué a un lado de Harry le agarré del brazo para sacarlo del comedor, no sabía porque había hecho eso, bueno, sí. Pero me negaba a admitirlo.

Una vez que ya estábamos lejos del comedor solté a Harry para voltear a verlo, tenía el ceño fruncido en clara molestia porque me lo había llevado así sin más del comedor, aunque después su cara parecía de duda. Seguramente por mi aroma, ya que estaba un poco agrio por los nervios que tenía, pensaba hacerle caso a Pansy, y este era el mejor momento antes de que me arrepintiera.

—Dragón ¿estás bien?—

—Sí, solo que— no sabía ni como decirlo, así que sólo saqué de mi bolsillo la cajita de terciopelo que tenía ahí y se la ofrecí.

Harry claramente frunció el ceño en duda para después agarrar la caja y abrirla, su expresión cambió al instante al ver el contenido de la caja, cualquiera lo hubiera hecho. Ya que adentro estaba el anillo de cortejo de los Malfoy, pocas familias sangre pura seguían manteniendo el anillo de cortejo en su posesión ya que la mayoría de veces se perdía, y la magia de este es que sólo se podía dar un vez en la vida, por ello tenías que estar muy seguro si se lo ibas a dar a alguien, era como una promesa de matrimonio desde el inicio del cortejo.

—Sé que ambos somos omegas, y probablemente no sientas lo mismo por mi, pero tenía que decirte lo que siento. Desde primer año llamaste mucho mi atención por tu actitud tan gryffindor, aunque me di cuenta que estaba enamorado hasta finales de cuarto año, sé que esto será complicado, pero también sé que valdrá la pena. Así que ¿aceptas el cortejo?— no me di cuenta en que momento había bajado mi mirada al suelo, pero cuando no escuché resuesta de Harry levanté la mirada para ver que pasaba.

Seguía mirando hacía el anillo entre emocionado y confuso, obviamente estaba buscando la forma más cortés de rechazarme, así era Harry siempre preocupándose por los demás y esa era una de las razones por las que lo amaba, pero para evitarle este mal rato sólo me di la vuelta para seguir caminando por el pasillo.

Porque no necesitaba que me devolviera el anillo, en el momento que me rechazara iba a desaparecer, por eso muchas familias sangre pura ya no tenían sus anillos de cortejo, los perdían en el momento que la persona a la cual se lo daban los rechazaba.

—Draco, espera—

Me detuve por pura cortesía, no podía seguir escapando de Harry, tal vez lo mejor era que me rechazara de frente, así que me di la vuelta para encararlo.

Venía caminando, pero había algo extraño, seguía teniendo el anillo en su mano, no había desaparecido, mi omega interior tontamente se ilusionó con esto.

—Ay Dray, pensé que ya hasta te habías dado cuenta y por eso te estabas alejando de mí— dijo el ojiverde una vez estuvo enfrente de mí, aunque probablemente vio mi cara de confusión y por eso continuó.

—Desde tercer año no puedo dejar de pensar en ti, deseaba inútilmente que ambos fueramos betas para poder tener una relación normal, pero me di cuenta de que esto era imposible cuando ambos nos presentamos como omegas y te comenzaste a interesar más por las demás castas, creí que te diste cuenta que estaba enamorado de ti y por eso ya no—

No lo dejé continuar porque me acerqué a él y lo besé, ya nada nos iba a poder separar ahora, ya no importaba lo que dijeran los los demás, ahora solo éramos Harry y yo.

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Me gustó mucho el one-shot de hoy jsjsj no sé, desde que lo escribí me dieron ganas de publicarlo