Capítulo 24: Buenos días

1.3K 77 0
                                    


Pov Calle:

El sonido del despertador interrumpió mi sueño, me estiré entre las sábanas aún con los ojos cerrados. Poco a poco me fui acostumbrando a la luz, mientras que me sentaba en la cama. Un olor a waffles llegó hasta mí, dejándome antojada. Agarré mi ropa del clóset y entre en el baño para darme una refrescante ducha.

Bajé las escaleras dando pequeños saltitos.

Mf- Te vas a caer- y ahí estaba la voz de mi madre, como años atrás, regañándome.
C- Ya estoy mayorcita mamá- dije mientras le daba un beso y me acomodaba en el taburete de la barra.
Mf- ¿Y?- preguntó mientras se encogía de hombros.
Volteé mis ojos, seguía igual de mandona que siempre.
C- ¿Has hecho waffles?- hablé.
Mf- Ajá, tu desayuno favorito- sonrió.
C- Te amo- contesté mientras observaba el plató que dejó en mi lugar.

C- Ma, tengo que salir a hacer unas gestiones, en la noche llego- hablé mientras agarraba mi bolso- te prometo que mañana paso el día contigo- me acerqué para dejarle un beso en la mejilla- el desayuno estuvo buenísimo.

Agarré las llaves de mi coche y salí de la casa para dirigirme a la de Poché.
Cuando llegué mire junto a la ventana, pues ayer mientras charlábamos me contó la que lío cuando se le olvidó las llaves dentro de la casa al salir de fiesta, por eso siempre escondía una copia.

Entré en su casa y al ver que todo estaba apagado, me dirigí hacia su habitación.

Con cuidado e intentando hacer el menor ruido posible, abrí la puerta, y despacio me dirigí hacia su cama.

Poché estaba boca abajo, su melena pelinegra, algo desordenada, caía por sus hombre cubriendo su cara y parte de su espalda. Su respiración era tranquila, se veía hermosa, despreocupada, calmada...

Me tumbé a su lado y con ayuda de mi mano retiré algunos mechones que me impedían ver por completo su cara. Sus facciones eran perfectas, dignas de admirar. Su rostro estaba relajado, su boca semiabierta y sus pobladas cejas perfectamente peinadas. Un color rojizo se asomaba por sus cachetes creando de su cara un cuadro perfecto.

Me encantaba observarla, podría llevarme horas y horas así.

Lleve mis labios y deposite un suave beso sobre ese rojizo carmín. Frunció un poco el ceño, estaba despertando.

Seguí creando un recorrido de delicados besos que ocupaba todo su rostro. Abrió los ojos bruscamente al no saber de quién procedían los besos, pero cuando me vio a mí, se relajó y una sonrisa salió de sus labios, los cuales se me antojaron.
Me incliné en busca de estos, necesitaba probarlos otra vez.


___________________________________________

Holaa❤️❤️ cómo andan??

Espero que os guste el capítulo ☺️☺️

En mi Instagram podéis encontrar la historia, donde la subo antes!!

Instagram: lgtbvibes_

❤️ GRACIAS ❤️

Una amante para dos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora