ENANOS PODEROSOS [LA MAFIA EN LATAM]

Serenata para Tres

La convivencia en una misma organización mafiosa los hizo más cercanos. Surgían amistades que jamás creyeron posibles, y llegaron a conocer a esa persona más de lo que pensaron. Dazai estaba enamorado de alguien, pero no se atrevía a confesar sus sentimientos a esa persona, tenía miedo de ser rechazado.

No sólo Dazai estaba enamorado de una(o) de sus compañeros/as de la Narko Mafia, sino también, tres compañeros más lo estaban y entre los cuatro, pidieron ayuda de maneras de conquistar a su persona especial al estilo de Latinoamérica.

Dazai platicaba con uno de sus clientes que compraba su mercancía. Le pedía consejos de conquista a su estilo. Quería hacerlo, aunque lo más probable es que fuera rechazado, ya que esa persona parece no interesarse en nadie de manera amorosa.

"¿Sí me estás entendiendo, Pancho?".

"Sí, claro. Soy el que mejor entiende el español de mis subordinados, por algo soy el jefe".

Alardeó en respuesta.

"Bien. Compra un ramo de rosas rojas, una caja de chocolates, una... cadena de Oro, y quizás.. dime, la chica que te gusta, ¿es japonesa o es de aquí?".

Preguntó antes de seguir aconsejando. Dazai soltó una pequeña risa.

"Él es de Japón, como yo.".

»¿Él?«

"Oh, bueno... Sigue mis consejos igual. Llévale serenata esta misma noche, envíame la dirección y te ayudaré. Llevaré a los músicos y vístete elegante".

Dazai no sabía qué era una Serenata pero, después de una ligera explicación, creyó entenderlo y le parecía divertido.

🏜️

Programó una reunión repentina con algunos se sus subordinados, siendo secreta para el resto. Les contó la idea de su amigo de México y quería ponerla en práctica.

"Kunikida-kun, a tí te gusta Yosano-sensei ¿No? Deberías aprovechar esta oportunidad de que yo pagaré la serenata".

"¡¡NO ME METAS EN TUS IDIOTECES, DAZAI!! Ella no cumple con dos de mis ideales".

Enfureció tan rápido como escuchó las palabras de Dazai. Quería huir de esa reunión, pero recordaba que desafortunadamente para él, Dazai era su jefe ahora y debía obedecerlo. Lo odiaba. Había descubierto su amor secreto hacia Yosano y no podía soportarlo.

"Recuerda que aquí soy Pancho, Chuy-kun. Ahora que lo pienso, Chuy suena un poco como Chūya, pero Chūya es Marcos... ¡Kunikida-kun y Chūya son tocayos en Latinoamérica!"

Murmuraba.

"Y bien, ¿Alguien tiene una última pregunta de la Serenata sorpresa que todos me ayudarán a hacer para ellos tres?".

Kyouka fue de las que no respondió nada. Salió de la habitación siendo discreta y se dirigió al lugar donde se encontraban Tanizaki, Tachihara, Kenji, Atsushi, Naomi, Gin, Chūya, Poe, Yumeno y Lucy. Aún no se acostumbraba a llamarlos con sus nombres latinos. Eran de difícil pronunciación para ella.

"Atsushi, ¿te gustaría ir al OXXO conmigo? Es como un conbini pero de México y tiene menos cosas".

Explicó Kyouka a su manera. Lucy frunció el ceño al ver que Kyouka se llevaba a Atsushi. Estaba celosa de eso, así que decidió ir con ellos.