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Las hijastras de mi hermana estaban dormidas en la cama de Joshua junto a él. Los 3 habían pasado una larga tarde jugando, y disfrutando el fin de semana.

A veces, cuando el novio de mi hermana mayor no podía dejar a las niñas con su niñera, yo hacía el papel de niñero con ellas. Joshua solía ayudarme, pero esta vez fue la excepción.

Seokmin permitió que Joshua las cuidase mientras yo estaba fuera de casa, solo un par de horas.

No esperaba que fuese algo malo, pero en realidad sí.

A penas llegué a casa, me tomaron como su maniquí viviente.

Mi rostro estaba lleno de pegatinas de estrellas, al igual que maquillaje, el cual Joshua me puso. Y agradezco que lo haya hecho él, ya que las niñas tenían nulo talento en eso.

Brillantina, estrellas, pintura acrílica y maquillaje, mi rostro era toda una obra abstracta.

Al igual, mi cabello no se quedó atrás, con una pequeña diadema con más estrellas.

Tenía el universo en mi rostro.

No fue un mal trabajo el de aquel trío y no me quejo tanto, ya que he tenido momentos peores con ellos.

El cansancio les llegó pronto, al igual que el sueño y pronto Shua ofreció leerles un cuento para descansar.

El Principito leyó, en tanto yo recogía la sala y escuchaba un poco las risas risueñas de las niñas.

Cuando terminé, ellos dormían, incluyendo a hyung.

Tomé el libro de las manos del mayor y fui hasta mi habitación.

Todo estaba silencioso, eso quería percibir. Aunque en realidad, fuera solo había bullicio de autos, motos, buses y personas gritando.

Eso lo noté cuando me incliné a través de mi ventana y vi todo lo que acompañaba a la calle.

Suspiré.

Ya tenía un mes viviendo aquí y esperaba que abril pasase pronto.

Balanceé un poco mis piernas, observé el corto vello en ellas moverse por la brisa.

Deseé sentirme así toda la vida.

El Principito hablaba con una serpiente cuando abrí el libro en una página al azar.

Ella se leía sospechosa.

Y esa mira que sentí al poco tiempo de leer se sentía incómoda.

Miré de reojo a la ventana frente a mí y ahí estaba un chico de mirada afilada, observándome fijamente.

Fueron cortos segundos en el que lo vi, hasta que volví a mi lectura.

El chico de la ventana #2 [soonhoon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora