Come & Ge It.

Capitulo cuatro: ¡El mejor día de la vida!

Me moví incómodamente entre mis sabanas, odio la vida.
Abrí un pequeño agujero entre las sabanas y tome mi celular, ¡LAS MALDITAS 6:00 AM! Solté un gruñido, ¿Qué es lo peor de ser famoso? Despertar tan temprano, y dormir poco.
Me espante un poco al ver un ojo de color azul en el agujero que había hecho entre las sabanas.
—¡Despertaste! —Chillo una voz conocida, Cara Jocelyn Delevigne. Retire pesadamente las sabanas de mi cara y solté otro bufido. —Hoy tenemos una entrevista, despierta. —Se montó encima mío, tomo una almohada y me comenzó a golpear suavemente con esta, la empuje bruscamente hacia el lado vacío de la cama y me pare flojamente.
Empecé a caminar hacia la entrada de la habitación-les digo que estamos en una habitación de hotel.-Cara hacia un escándalo preguntándome cosas que no entendía ya que no estaba despertada al 100%, ni siquiera al 50%.
—Tranquila, comete un Snickers. —Me dijo Candice al encontrarse con el rostro que tenia en este momento, rostro zombie. La ignore y me tire en la primera silla que encontré.
—Oigan, ordene unos hotcakes, jugo de naranja, café y las ensaladas de frutas que tanto le gustan a Candice. —Hablo Miranda. —¿Qué te sucede, pequeña? —Sentí un brazo rodearme, no tengo idea de quien es ya que tengo mi cabeza hundida en el sillón.
—¿Por qué tan temprano? —Oí un bufido de Miranda por mi pregunta. Claramente no tengo el corazón roto, ningún chico me dijo “no”, porque para mi claramente es más importante dormir al menos diez horas.
—Tenemos una entrevista en tres horas, era mejor si las despertaba temprano. —Dijo y se marchó, dejándome con mi corazón roto por falta de sueño.
Alce mi rostro y todas estaban ahí, Taylor estaba escribiendo algo en su cuaderno de viaje, le gusta escribir en todo lugar. Miranda estaba de espaldas con una bata mirando algo en su celular, Cara y Candice estaban discutiendo porque quien tenia los mejor abdominales Zac Efron o Ansel Elgort, las cosas entre ellas son muy normales. No es por ser metida, pero los de Zac son únicos y originales.
—La comida llego. —Dijo Miranda quien estaba desesperada por la comida hace ya un largo tiempo, técnicamente estaba pegada a esa puerta.
Todas se pararon, Cara y Candice llegaron a la conclusión de que la comida era mas importante que esos dos y Taylor dejo de escribir cuando escucho “comida”, yo por mi parte fui un poco mas tranquila, hoy no tenia demasiada hambre.
Tome un plato, un hotcake, un vaso y café, comí lentamente, hoy no estaba de humor ¿Por qué?
Bueno, ¿Alguna vez has tenido el sentimiento de que algo saldrá mal? Pues así me sentía en este momento, algo saldrá mal pero no tengo idea que.
—Miranda, dinos nuestra agenda de hoy. —Dijo Candice con un tono de típica niña caprichosa, ella solía hacer ese tono cuando todo estaba incómodo y tenso.
—Señoritas, lo primero de hoy es una entrevista, luego una sesión con otro grupo asiático y seremos libres por el resto del día, por ahora. —Suspire. Bueno, al menos hoy la agenda no era pesada.
—¿Por qué tan malhumorada? —Pregunto Taylor sentándose junto a mi, alce los hombros. No tengo la menor idea. Tome un hotcake y me atragante con el, luego tome la crema batida y la eche directamente en mi boca. —Esa es mi chica. —Dijo orgullosamente Taylor.
El desayuno fue lento y aburrido, si no fuera por las ocurrencias de Cara y Candice hubiera sido el desayuno más aburrido de la historia.
Saque mi valija y empecé a revolver toda la ropa, tome un camisón que me cubriera del frío, unos simples vaqueros y unos converse, obviamente también tome ropa interior.
 No me voy a arreglar mucho ya que cuando lleguen nos darán un nuevo vestuario que enseñe mucho o que sea muy alternativo, porque a todo el mundo le encanta verme vestida de galaxia.
Tome una toalla, mi shampoo y crema para el cuerpo. Me había depilado recientemente así que no había de hacerlo, ni tampoco de mencionarlo…traten de olvidar eso.    
—¡AHHHHHHH! —Un grito se escuchó por todo el cuarto, por todo el piso, por todo el hotel, tal vez por toda la ciudad.
Me sobresalte, ese grito provenía del baño y la única que estaba en el baño era Candice ¿Y si un asesino en serie la mato y ahora tenemos que resolver el misterio de su muerte? Rápidamente todas nos acercamos a la puerta del baño, Cara trato de abrir la puerta pero no lo logro, tenia seguro y Taylor intento con una tarjeta pero tampoco lo logro.
Esta vez se escuchó algo caer y romperse ¡ES UN ASESINO EN SERIE! Algo se escuchaba acercándose a la puerta, la perilla comenzó a moverse. Me escondí detrás de Taylor y Cara pero estas trataban de empujarme para esconderse detrás de mí, ¿Y Miranda? YA LA ASESINARON.
La puerta se abrió lentamente.
MIERDA.
—Los voy a asesinar. —Candice salió del baño con el cabello lleno de espuma y tallándose los ojos. ¿Qué demonios? Candice soltó un gruñido mientras trataba de quitar con su toalla la espuma de sus manos.
—¿Qué te sucedió? —Pregunto Taylor demasiado confundida.
—¿Qué me sucedió? ¡¿Qué me sucedió?! Se fue la maldita agua a mitad de mi baño. —
3…
2…
1…
Se escucharon fuertes carcajadas por todo el cuarto, Taylor reía, Cara reía, yo reía, probablemente Miranda también reía. Candice soltó otro gruñido ante el gran apoyo que le dábamos.
—¡Oigan, saquen a Candice del baño! Me acaban de decir que se fue el agua en todo el…—Llego Miranda gritando y corriendo, pero claramente ya era muy tarde. Puso una cara de confusión al vernos riendo exageradamente, subió su mirada hacia Candice y en unos cuantos segundos ella también estaba riéndose exageradamente.
(…)
—¿Quieren dejar de reírse? —Se quejó Candice. Las carcajadas se escucharon mas fuerte incluso se oía a Cara golpeando cosas. —De acuerdo, genios ¿Cómo piensan que nos bañaremos? —Todas callamos, es cierto ¿Cómo demonios nos bañaríamos? No hay agua. Mire a Miranda quien tenia una expresión de película de terror.
—Tranquilas, iré a preguntar. —Dijo Miranda haciendo que todas nos calmáramos un poco. —Ustedes ayuden a la señorita. —Señalo a Candice con una sonrisa burlona y se retiro hacia la recepción.
Taylor tomo una toalla y empezó a restregar bruscamente el cabello de Candice, esta se quejaba demasiado por el exceso de fuerza que usaba Taylor. Eso no estaba ayudando, la espuma no desaparecía, incluso aumentaba.
—¿Qué clase de shampoo usas? —Pregunto Taylor espantada al ver que la espuma no desaparecía.
Cara estaba abriendo y cerrando la llave del lavado por si llegaba el agua y yo estaba pensando como demonios bañarnos sin agua, tal vez el jugo de naranja funcione…de acuerdo no, terrible idea.
Luego de unos minutos oímos la puerta abrirse y cerrarse, todas corrimos hacia la puerta esperando que fuera Miranda quien llegaba, y si era ella. Mirada se dio cuenta de todas nuestras miradas centradas en ella y empezó a reír nerviosamente, oh.
—Pues…—Ninguna retiro la mirada y Miranda seguía riendo nerviosamente. —¿Alguna vez han ido al trabajo sin ducharse? —Todas la miramos sorprendidas pero su rostro no reflejaba broma, estaba hablando en serio.
La primera en quejarse fue Candice, luego empezó a gritarle a Miranda, Cara también le estaba gritando al igual que Taylor y también Miranda quien les gritaba a esas tres, no se entendía un demonio de lo que estaban diciendo, todas gritando era estresante.
Ahora si, ¡¿Cómo demonios iríamos a esa entrevista?! Candice estaba llena de espuma, no conocíamos a nadie que nos ayude…Espera, yo si conozco a alguien.
Me lance hacia mi cama buscando mi celular, lo tome y rápidamente marqué un numero en él, me lo acerque a la oreja esperando a que contestara…por favor.
—¿Por qué llamas tan temprano? —Me emocione a escuchar esa dulce y hermosa voz. En realidad, solo era Victoria pero en estos momentos ella era como un ángel.
—Victoria no sabes cuánto amo escuchar tu voz, ¡Necesitamos tu ayuda! —Hable demasiado rápido.
—¿Necesitamos? —Pregunto ella al otro de la línea algo confundida.
—Sí, Miranda, Cara, Taylor, Candice y yo. —Oí un chillido de emoción de parte de ella, y empezó a a decir algo en mandarín o coreano. —Bueno, necesitamos tu baño. —Ella dejo de hablar.
—¿Qué? —Pregunto confundida.
—Nos quedamos sin agua y tenemos una entrevista en casi dos horas, por favor. —Rogué como una niñita.
—De acuerdo, hablare con el resto, no cuelgues. —Dijo y yo asentí, lo cual es extraño ya que no me puede ver. Oí como se paraba, abría la puerta y empezaba a gritar en coreano, también oí unos quejidos.
POV VICTORIA:
Me levante flojamente al recibir la llamada de Tn diciendo que necesitaba nuestro baño, muy normal.
—TODAS LEVANTENSE, REUNION DE GRUPO. —Grite por todo el apartamento escuchando los quejidos del resto y una maldición en inglés por parte de Amber. —Te escuche Amber. —Le reproche cuando salió de su habitación.
Cuando todas estaban algo despiertas les ordene sentarse en el comedor, ellas se sentaron flojamente y murmurando un montón de cosas que por ahora no quiero saber su significado.
—Muy bien, ¿Recuerdan a mi amiga Tn Lalice? —Todas suspiraron.
—Unnie, ¿solo nos despertaste para presumir de tu amiga supermodelo? —Dijo Krystal con el ceño fruncido.
—No, ella y sus amigas necesitan nuestro baño…—Hubo unos segundos de silencio y ellas empezaron a reír. —Yah, ¿De que se ríen? —Pregunte con el ceño fruncido al ver como todas ellas se estaban ahogando de risa.
—Vic-ah, ¿en serio tenemos que creerte? —Dijo Luna entre risa lo cual hizo que me enojara más.
—¡Es cierto! Tn ayúdame en esto. —Dije en inglés ya que Amber y Krystal podían entenderlo perfectamente. Puse el alta voz, solo se escuchaban gritos que no eran la voz de Tn. —Tn, ayúdame. —Murmure, al parecer ella lo escucho ya que me murmuro algo y empezó a gritar.
—¡CIERREN EL MALDITO HOCICO, ESTOY TRATANDO DE CONSEGUIR UN BAÑO Y SUS ESTUPIDOS GRITOS DE MIERDA NO ME DEJAN ESCUCHAR! —Los gritos pararon de ese lado de la línea y las risas de este lado. —Lo siento, ¿Qué decías Vic? —Dijo luego en un tono muy sereno. Tn es de la clase de persona que no te gustaría hacer enfadar.
—Dile a mis compañeras que vendrán. —Dije también con un tono sereno.
—Oh, ¡Compañeras de Victoria! Miranda, Cara, Candice, Taylor y yo iremos a su apartamento si nos permiten, por favor…—Rogo ella. Mire a las miembros y estaban muy sorprendidas.
—Cl-claro, pueden venir. —Dijo Amber en inglés y con mucho claro nerviosismo. La mire con sonrisa egocéntrica, y se atreven a decirme que soy mentirosa. ¡EN SUS CARAS!
—Oh, muchas gracias. ¡Candice va a poder quitarse esa espuma! —Grito hacia sus amigas. —¿Cuál es su dirección? —Dijo. Se volvieron a escuchar risas, golpes y gritos del otro lado de la línea.
—Es XXXXXXXXX (Inserten una dirección ya que soy muy estúpida y ni siquiera se me la de mi casa) en el piso XX y la habitación número 64 (y un piso también) Por favor traten de llegar sin hacer mucho escándalo, nos meteríamos en problemas. —Dije. Si alguien se enteraba que venían aquí no ocurriría nada malo, solo que se pueden enterar que vienen a bañarse y podrían malinterpretar todo. Bueno, o algo así.
—Mi nombre es Tn Sin Encádalos Lalice. —Dijo en tono de broma.
—Oh, pues yo recuerdo una vez…—
—Adiós. —Ni siquiera me dejo terminar cuando me colgó.
Claramente no van a ser las mas desapercibidas son altas, son hermosas, son extrajeras, ¿Ya dije que son altas? Son enormes, no podrían pasar desapercibidas.  
POV TN:    
Colgué antes de que Victoria empezara a mencionar la larga lista de escándalos que hice cuando íbamos al instituto, la lista más larga que he visto en toda mi vida. Empezaba desde el día en el que golpee al director en sus partes íntimas, hasta el día en el que la maestra de biología escucho como le decía “Vieja estúpida”, mi época de instituto fue genial. Traten de captar el sarcasmo.
—No puedo vestirme, estoy mojada y llena de espuma. —Se quejó Candice. Todas ya estaban empacando toallas, shampoo’s, jabones y su ropa, la única que tenia un pequeño problema era Candice, un enorme y ridículo problema.
—No queda de otra, tendrás que ir en toalla. —Dijo Miranda en tono de broma haciéndonos reír.
—Eso quiero verlo. —Dije mientras anotaba en mi celular la dirección que nos dio Victoria, el piso y la habitación. Tome mi un pequeño bolso y metí todo lo necesaria para bañarme en la casa de mi amiga que no vive sola ¡yei! —Candice, ¿Qué harás? —Pregunte, esta me dedico una sonrisa.