Desde el momento en el que Yonji entro al salón un niño lo llamó raro por su color de cabello y sus cejas, pero el era más raro su cabello parecía el de un anciano, la maestra estuvo ocupada con una niña que no dejaba de llorar y por eso no le dijo, trato de ignorar a ese niño pero no funciono, así que se fue a explorar la guardería.
-Pequeño estas perdido?- pregunto una amable mujer de cabello verde oscuro.
-No, solo quería ver el lugar, mi salón esta a dos esquinas de este- dijo Yonji señalando el camino por el que había llegado.
-Oh, pero que niño más inteligente, tus padres deben estar muy orgullosos de ti- alago la maestra.
-No tengo papá, solo a mami y eso es suficiente- dijo Yonji con seguridad.
-Oh, esta bien, mi nombre es Makino y soy la maestra del salón de al lado por hoy- dijo sonriendole.
-Eres linda, Jii-Chan dice que siempre hay que darle un alago a las damas- dijo Yonji sacando de su bolsillo una pequeña flor un poco arrugada.
-Pero que lindo caballerito- sonrio Makino.
-Vamos a tu salón- dijo tomando la mano de Yonji.
-Esta bien- respondió Yonji.
-Te gusta hacer amigos?- pregunto Makino.
-No... los niños se alejan de mi por que le tienen miedo a los amigos de mami- dijo Yonji con normalidad.
-M-Me puedes decir como son los amigos de tu mami?- pregunto Makino preocupada.
-Pues son raros, pero divertidos, Robin-Chan siempre me enseña cosas divertidas, me enseño como hacer un arco iris con un vaso de agua y una linterna, Usopp cuenta las mejores historias, Franky siempre arma cosas geniales, me regalo un robot para mi cumpleaños- dijo sonriendo al recordar como el robot le explotó en la cara a Franky cuando lo estaba armando.
-Ellos parecen interesantes- dijo Makino algo aliviada, conocía esos nombres y esas personalidades.
-Pero también son tontos algunos, como Zoro, es muy tonto y se pierde siempre, mamá lo tiene que buscar cuando vamos de paseo, Brook se asusta muy fácil y Luffy solo piensa en comer y pelear, Nami es inteligente pero solo roba, Chopper come dulces conmigo y Jinbe me enseña a pelear, pero mami le dice que todavía tengo que crecer más para que me enseñe como golpear con el aire- explicó emocionado, con estrellitas en sus ojos.
-Jajaja, los conozco- dijo Makino riendo al recordar a los chicos.
-Enserió?- pregunto Yonji.
-Si, cuidaba de Luffy cuando era niño- explicó Makino.
-Wow, me puedes contar como era Luffy de Pequeño?- pidió Yonji.
-Esta bien, ven a mi salón a la hora del almuerzo si quieres- dijo Makino antes de dejarlo en su salón.
-Adiós sensei- dijo Yonji para entrar a su salón.
-Es un niño encantador- pensó Makino antes de entrar en su propio salón.
Las horas pasaron rápidamente para Yonji, estaba ansioso de reunirse con la linda señorita de cabello verde para saber como eran sus tíos de pequeños, la hora del almuerzo llegó y él corrió hasta el salón donde sabía que estaría Makino.
-Makino-Sensei, puedo entrar?- pregunto en la puerta.
-Claro pequeño- dijo Makino sonriendo.
-No molesto?- pregunto Yonji bajando su cabeza.
-No, solo estaba cubriendo a una compañera, soy la subdirectora así que no me estas molestando- dijo sonriendole a Yonji.
-Puede contarme más de tío Luffy?- pregunto Yonji.
-Claro, ven- dijo tomando la mano de Yonji para dirigirse hacia un árbol árbol el patio.
-Sakura- susurro Yonji al ver el hermoso árbol de sakura.
-Son lindas verdad? Este árbol a estado aquí desde que yo era una niña, muchos mayores lo han visto crecer- dijo Makino antes de sentarse y sentar a Yonji a su lado.
-Dijo que conocía a los amigos de mami- recordó Yonji.
-Si, los recuerdo muy bien, Luffy, Zoro y Usopp venían a esta escuela desde que eran pequeños, casi crecieron juntos y Luffy siempre estaba lastimado por sus travesuras, no había día en que él no tuviera una curita en sus brazos o en sus mejillas- dijo Makino.
-Eso suena a algo que haría tio Luffy- dijo Yonji mientras seguía comiendo.
-Si, Luffy y sus hermanos siempre fueron así, apesar de ser mayores les gustaba jugar juntos- recordó Makino al trío de hermanos.
-No conoció a mami cuando era niño?- pregunto Yonji.
-No, lo siento, a Sanji solo lo he visto en fotografías que Luffy me envía- explicó Makino a Yonji.
-Oh, esta bien- dijo Yonji.
-Por que no me cuentas sobre ti? Ya hiciste amigos?- pregunto Makino.
-No, los niños son tontos y las niñas juegan entre ellas- dijo Yonji.
-Oh, deberías tratar de hacer al menos un amigo- aconsejo Makino.
-Lo intentare- dijo Yonji mientras guardaba su bento.
Estando en el salón vio como unas niñas molestaban a otra, pero cuando se acercó se dio cuenta que era un niño.
-Oigan ya dejen de molestarlo- dijo Yonji.
-Tu no te metas rarito- dijo una de las niñas.
-Vamos- dijo jalando la mano del niño pelimorado.
-G-Gracias- susurro el niño secando sus ojitos con la manga de su suéter.
-Como te llamas?- pregunto Yonji.
-Haru- dijo en un susurro.
-Soy Yonji, por que te molestaban- pregunto.
-Por que no tengo mamá- dijo con tristeza Haru.
-Quien te cuida entonces?- pregunto Yonji confundido.
-Mi papá- respondió.
-Yo solo tengo a mamá y no me importa- dijo sonriendole a Haru.
-Gracias por defenderme Yonji-Kun- dijo Haru sonreído.
-Claro, ahora somos amigos y no dejaré que nadie te moleste- dijo Yonji.
-Quieres ser mi amigo? N-No te paresco raro?- pregunto Haru con timidez.
-Claro que no, ya casi es la hora de ir a casa dijo la maestra, vamos juntos a esperar a nuestros papás- dijo Yonji.
-Esta bien- dijo Haru.
-Bien niños, espero que se hayan divertido el día de hoy, pero ya en poco tiempo vendrán sus padres a recogerlos asi que espero vengan mañana para seguir aprendiendo- dijo la maestra.
-Si maestra- respondieron a coro los niños.
Ya en la salida estaban los dos niños dibujando mientras esperaban.
-Haru-Chan vamos- dijo un rubio vestido con colores demasiado llamativos.
-El es mi tío Gambia, me voy adiós Yonji-Kun- se despidió Haru para ir corriendo con el rubio.
-Adiós Haru- se depidio Yonji.
-Bueno a esperar a mamá- dijo Yonji para si mismo.
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Siempre serás mí bebé
FanficEn el momento en que ese bebé peliverde fue puesto en sus brazos Sanji sabia que daría incluso su vida para protegerlo así como lo hizo su madre, no dejaría que nadie lo tocara y así fue como tomó la decisión de ser él quien criaria a ese niño como...