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Verdad a medias
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—bien, ¿Quienes son los Wolf? —pregunto Alphard mirando expectante a sus abuelos.

Walburga abrió los ojos con sorpresa, en cambio Orión suspiro con nerviosismo, como preparándose. El salón de la antigua y noble casa Black se encontro en un silencio sombrío, los adultos sin saber que decir y el menor esperando una respuesta a todas sus dudas.

—eh, Al, querido —balbuceo, buscando las palabras correctas —los Wolf, como sabrás son tu familia materna... —Walburga paró de hablar de manera abrupta, ella no era así, era Walburga Black, se estaba intimidando por un niño —Alphard, somos tus abuelos, no nos tienes que pedir explicaciones del por qué hacemos las cosas —replico con firmeza, con el mismo tono que utilizaba con sus hijos en su juventud.

Orión solo miro a su esposa con curiosidad, hace tiempo no oía ese tono de voz, le traiga tantos recuerdos tristes y nostálgicas.

Black menor solo ladeó la cabeza, confundido, a el no le intimidaba cuando su abuela se ponía modo McGonagall pero peor, era como si fuera inmune a todo eso.

—abuela conmigo no va —dijo serio —solo dime la verdad.

—Alphard, eres muy maduro para tu edad, yo quiero que vivas tu niñez, esa es una de las razones que no quería que se te acercaran a esas personas...

—espera, me estás diciendo que tú les prohibiste —eso Alphard ya lo sabía, pero quería ver como reaccionaba.

—Al, nosotros sabemos porque hicimos las cosas, solo queremos que crezcas un poco, y para que no estés con la duda —prosiguió con dureza —todo lo que hicimos es para protegerte. Yo sé, Alphard, yo sé que eres capaz de todo, pero esto es demasiado para un niño.

—¿es tan horrible saber la verdad? —pregunto con cautela.

—Al, tu no te tienes que preocupar de nada, solo quiero que vivas tu niñez, después tu abuela y yo te contaremos toda la verdad —prometió Orión.

—¿el tío Regulus sabe de esto?

—sabe poco...

—¿Sirius también sabe? —murmuro, desviando la mirada, viendo fijamente al cuadro de su padre de joven, que se encontraba en el salón, sabía algo de el, muy poco en realidad, al estar en el antiguo habitación de su padre –cosa que tuvieron que remodelarlo– y ver en el sótano todas esas cosas, muchas cosas rojas, postrer de mujeres muggles, y demás sólo para molestar a sus padres, era tan gracioso imaginar a Sirius y su abuela discutiendo.

—claro que sabe, es tu padre —bufo —el podría ser el único en poder ayudarte —murmuro también mirando la foto de su hijo —bueno, ya terminamos, después voy a hablar con Hidra y decirle que no se meta donde no la llaman —demando.

—Hidra solo quería ayudarme... —rio con ironía, acordándose de algo —abuela, adivina quién es el padre del hijo de la hermana de mi madre.

Walburga solo se encogió los hombros con indiferencia, Orión sonrió con burla, ya lo sabían.

—claro que lo sabemos, Anna Wolf, se casó con un mestizo, aparte que tubo que entrar a su saquito por el, era raro, ya que los Wolf jamás se metían a algún conflicto del mundo mágico, después fue tu madre, entro con Sirius a la Orden del fénix, solo que ella si túbo el apoyo de tus otros abuelos, ellos no tenían los ideales purista tan marcados como nosotros —informo —después de que muriera el innombrable, Anna se fue a vivir con sus padres, ya que querían meterla a Azkaban con tu primo pero los Wolf al ser una familia muy poderosa e influyente, pudieron eliminar cualquier prueba que existiera.

𝐋𝐎𝐒 𝐁𝐋𝐀𝐂𝐊¹ (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora