ACT THREE | AMIGOS EN CASA
RUBY Y JAMAL FUERON A LA CASA de Danielle. La madre de Danielle, los invito a pasar, ellos aceptaron y se unieron a la fiesta de la familia de Dani.
— Hi Dani, are that tacos? — dijo Jamal.
(Hola Dani, son tacos)Jamal se fue a comer todo los tacos posibles, mientras que Ruby admiraba la decoración, era un perfeccionista.
— Dani, who is the artist of all this wonder. — dijo Ruby y la tia salió bailando de la cocina.
(Dani, quien es la artista de esta maravilla)— Is there. — dijo Dani y Ruby miró a la tía.
(Esta hay)— Ma'am, you are the artist of all the decoration. — la tía toda orgullosa de si misma asintió. (Señora, usted fue la artista de toda la decoración)
— My name is Tanya Carmen. — la tia no sabía muy bien hablar inglés mejor dicho, casi nadie de mi familia sabía hablar inglés, pero hacía su esfuerzo.
— Acá en la casa se habla español, menos el muchacho que tiene toda la boca llena de tacos. — Jamal el muchacho de Los tacos, llamado y nombrado a si por la familia Martin, estaba con toda la boca llena de tacos.
— Ruby you heard my abuelita.
(Ruby ya escuchaste a mi abuelita)Jamal intentaba hacer su esfuerzo por bailar como los cubanos. La familia Martín empezó a bailar también, la tia Tanya Carmen, agarró a Jamal y lo saco a bailar. Mi abuela, llamaba a Jamal - Hamal.
Pero Jamal lo aceptaba ya que le dio de comer. Los Santos vinieron no todos, Oscar "Spooky" y César, junto con otro Santo.
Oscar y César eran familia, y siempre estaban invitados incluso cuando yo me enfadaba con ellos. Mi familia para mi era perfecta, quitando que mi primo era un pandillero, y que la familia de mi padre todos estaban y algunos siguen estando en pandillas como Oscar.
— Oscar mijo. —la madre de Danielle abrazó a Óscar y después a César. — Que bueno veros.
— Y este muchacho quien es? — pregunto el abuelo, levantándose del asiento y mirando los de arriba abajo.
— Soy José Guzmán, señor.
— Matías Martín. — el abuelo no se fiaba de ningún pandillero y gracias a Dios se fiaba de Oscar.
— Matías, siéntate. — dijo el tio, Mario.
— Encantado soy Mario Martín. — dijo y extendió la mano hacia José.
José, Oscar y Cesar entraron a casa, todos bailamos, Danielle bailo con sus primos, la rumba que todos amaban.