NOSOTROS© (EDITANDO PARA CONTINUAR CON LA HISTORIA)

Capítulo 1

Idiota sin cerebro

Ella

—Y ¿qué tal tu primer día?—pregunta mamá al ver la cara de trauma que tengo.

A decir verdad... Ejem... no fue nada bonito como pensé que sería.

Ejem... te lo merecías, solo a ti se te ocurre hacer tal tontería.

Cállate y no opines.

Que agresiva, pero sabes que tengo razón.

Que no la tienes, pesada. Y nadie dijo conciencia opina.

Después no digas que no te lo dije, porque te lo dije.

Ya vete, shuu.

—Interpreta mi silencio —contesto con amargura en la voz.

Resoplo.

—Pero, ¿qué paso?

—No quieres saberlo ¿vale? Gracias a idiotas sin cerebro todo me sale mal, pero no es para tanto ¿no? La vida sigue. ¡Pero eso no quita que tenga ganas de apuñalarle el ojo! es necesario o no moriré tranquila...Y ustedes son unos cabezotas por acordarme de la asquerosa mañana que tuve.

—...

Apuñalo la patata con el tenedor y todos en la mesa se me quedan mirando ante mi pequeñito arrebato de locura, Easton abre la boca para hablar y lo fulmino con la mirada. Claramente no es buen momento, y si dice algo alguien acabara con un ojo espichado.

—Lo que paso fue que insulto a un chico —informa Emma reprimiendo una sonrisa –le salió mal y muy caro —esta vez no aguanta y se ríe.

Le lanzo un trozo de carne a la cara.

—¿Por qué? ¿Te trato de besar? —Easton me señala con la cuchara sonriendo malicioso.

—¿Te beso? —pregunta Thiago deteniendo el tenedor que iba a su boca.

—¿Eh? ¡No!

—Claro que sí, se ha puesto roja —Easton se ríe.

—¡Que no, pesado!

—¡Sí que te gusta! —Emma se carcajea.

—Muéranse mejor.

Y de seguro ustedes mis queridos amigos se deben de estar preguntando; —Y ¿por qué insultas a una persona en tu primer día Ella? —pues verán, el muy idiota con cerebro fundido fue el que empezó. Antes de echarles el chismecito, siéntense y tómense una tacita de café. La cosa fue de la siguiente forma:

Hoy en la mañana

Cruzamos el arco que da acceso al campus.

Se me descuelga la mandíbula, la universidad es igual o hasta más magnifica que en los folletos y en la página web, y me quedo impresionada al instante en el que veo los elegantes edificios de piedra que se ciernen frente a nosotros. El área está inundada de Padres que se despiden de sus hijos, los de primer curso están ataviados con camisetas y chaquetas con el logo de la UTA, y algunos están perdidos y confundidos.

El campus es increíblemente grande. Es casi obligatorio asistir a la charla de orientación pero no quiero estar más de una hora aburrida, así que trato de escabullirme pero es mi hermano Easton el que me detiene obligándome a asistir.

Más de dos horas de sentada escuchando a una profesora repetir lo mismo cincuenta veces. Se me durmió el culo y casi me duermo en la silla. Cuando acaba me levanto de un salto y salgo de ahí como si me estuvieran persiguiendo.