Diane
Después de que me llamara Elizabeth me propuse a arreglar todos los papeles legales que siempre me solicitan en la corte, me sentía mal por no haberle recordado y mentido a mi mejor amiga pero, si se lo decía conociéndola estaría corriendo y ya sería un acto egoísta de mi parte, pero si en parte le dije una verdad esos medicamentos me causaban mucho sueño y una gran fatiga por lo que no quise seguirle dando más vueltas al asunto y me aproxime a la habitación de Arturo.
Diane: Arturo, despierta pequeño hoy es un día muy importante arréglate para que desayunes.
Arturo: Diane ¿Qué pasa si dicen que no me puedo quedar contigo?
No quería pensar en eso ya que Arturo era lo único que me quedaba y me prometí protegerlo en lugar de mis difuntos padres, pero me dolería mucho y me rompería en mil pedazos si me lo quitaran, no lo debía de permitir, cuando voltee a ver su cara pude ver tristeza y preocupación pero no era momento para mentirle así que jale aire y con un enorme nudo en la garganta le conteste.
Diane: Te irías a vivir con tu tía Matrona, pero no te preocupes are todo lo posible para que nos quedemos juntos.
Arturo: No quiero que nos separen, si me dicen que me valla con mi tía soy capaz de escaparme, quiero vivir a tu lado, no me importa si vivimos escapando pero prometimos estar siempre juntos.
Me dijo sollozando pero a quien engañaba yo me estaba aguantando las profundas ganas de llorar por lo que no sé de donde saque fuerzas y lo abrase trasmitiendo seguridad ya que él no tenía que pensar en lo que sucedería, no tenía el por qué preocuparse, si no solamente yo.
Diana: No digas eso, aparte es ilegal pero mira si pasa eso te iría a visitar, hasta si llego a un acuerdo puedes pasar las vacaciones con migo, de eso no tienes que preocuparte, andando hay que apurarnos para que cuando termines de desayunar te duches y arregles debes de ir guapo.
Arturo: Vamos
Vi como bajo corriendo para desayunar, cuando bajo pude sentir una gran presión en mi pecho pero no me permitiría llorar haci que me pare con dificultad ya que me dolía horrores el cuerpo, cuando me senté para desayunar alguien toco la puerta.
Arturo: A de ser mi tía Elizabeth.
Diane: No creo, ella me dijo que estaría muy ocupada aparte le pedí un favor haci que no creo que sea ella.
Me pare para dirigirme a la puerta tenía mucha curiosidad pero cuando la abrí me puse feliz ya que era la madre de mi mejor amiga lo más seguro para ver mi situación emocional o no sé.
Diane: O señora Aida pase justo estábamos por empezar a desayunar, acompáñenos por favor.
Aida: Seria un placer, por cierto querida ya estas lista para pelear en la corte el día de hoy.
Diane: Estoy muy nerviosa pero are hasta lo imposible para que Arturo este a mi lado, pero por desgracia en el peor día he pedido mi renuncia.
Aida: Hija hay que desayunar necesito hablar contigo después por lo que quita esa cara larga y muestra tu gran sonrisa que posees, no permitas que te vean vencida.
Nos adentramos a mi hogar para desayunar lo cual fue muy tranquilo y silencioso pero no incomodo al contrario era relajante, pero en cuanto termino de desayunar Arturo se apresuró a bañarse y arreglarse cuando me cerciore que ya se encontrara en su habitación volteé a ver a la señora Aida que estaba embolsando una gran sonrisa a lo que dije.
Diane: Señora Aida, no me deje con la curiosidad ¿Qué necesita hablar conmigo?
Aida: Se muy bien por lo que acabas de pasar hija y por igual manera que estas desempleada, se los motivos pero también sé que eres muy fuerte para no dejarte caer.
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Millonario en busca del amor
FanfictionEsta pequeña historia se relata que: Él es un millonario en busca del amor, fuera de las personas hipócritas, interesadas y superficiales, quiere encontrar el amor sueña con una chica humilde, de buen corazón y que no sea interesada, ara lo imposibl...