caos

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Pasó un pequeño y largo tiempo, pude ver atravesar de los binoculares para ver el más allá de donde me encontraba logré ver unos tres cascos, y luego dos personas pasar de un lado a otro acercándose, les avisé al que me guió, estaba claro que quería salir de ahí, pero también era algo tentador quedarse, las cosas se ponían cada vez más interesantes, busqué un lugar o escaleras para subir a la azotea, en cuanto pude ver unas escaleras, subí, me senté en la orilla, se escuchó un tremendo golpe en las puertas principales, los soldados corrían para buscar lugares  para protegerse y atacar cuando estos empezaran entrar, lo único que me faltó era una bolsa llena de palomitas y disfrutar el espectáculo, se veía que pudieron entrar los enemigos se cuidaban de cualquier ataque, no eran muchos que digamos, pero note como lanzaban bombas de humo, para evitar que estos fueran vistos, al principio quedó en silencio, la intriga me mataba, el humo empezó a desaparecer,  todos se atacaban, lanzaban bombas de fuego y otros disparaban, pero nunca pensé que el enemigo subiera a la azotea donde yo me encontraba, me percaté de ello y esquivó el golpe, fue suerte, bajé como pude antes de que pudiera hacerme algo, pude escapar, y refugiarme, suspire aliviada, un estruendosa explosión provocó que todas las ventanas reventaran, me percaté de ello y me tiré al suelo, vaya, esto es una guerra, pero por que tuvieron que venir y atacar, aquel sonido, me dejó aturdida, el mismo hombre que estaba a mi lado se me acercó, no entendía lo que decía cerré mis ojos por un rato

Addison: (fue genial) (pero aterrador)

Eso fue lo último que pensé antes de perder la consciencia

la hija del hacker Donde viven las historias. Descúbrelo ahora