Tantas luces que hacían brillar hasta el último rincón de la habitación, voces por todos lados y un insoportable olor a fijador de cabello; aún así el hombre de cabello castaño era el más feliz del mundo. "Un diseñador alternativo" es como todo el mundo lo catalogaba. No solo por sus diseños que mezclaban la dulzura de su personalidad con toques sacados de películas de terror que a veces llegaban a ser demasiado oscuros; sino porque quienes lucían sus diseños estaban lejos de encajar en el estereotipo de "modelo ideal".
Mikey estaba sumamente orgulloso de lo mucho que había construido a su corta edad. Era su pequeño imperio, un mundo en el cual podía ser libre y aquellos como él también podían serlo. Afuera comenzaban a llegar fotógrafos, cámaras de televisión, un público exclusivo de celebridades, críticos, periodistas y otros diseñadores; pero detrás del escenario estaba él, ayudando a peinar, maquillar y acomodar las prendas, ahí es dónde se desarrollaba la verdadera magia. Magia que fue interrumpida por un golpe y un grito. A unos pasos se encontraba un chico de cabello bicolor en el piso sosteniéndose el tobillo.
—¡Frank! ¿Estás bien?
—Estoy bien, Mikey. Fue culpa del estúpido tacón.
—¿Puedes caminar?
—Sí, eso creo. Ayúdame a levantarme.- Mikey se agachó a recogerlo pero en cuanto le puso de pie, los ojos de su amigo se llenaron de lágrimas que trató de aguantar para no arruinar las cruces perfectamente maquilladas sobre sus ojos. —No, olvídalo. Déjame en el suelo.
—Frank eres mi modelo estelar, no te voy a dejar en el suelo.
—¿Qué vamos hacer ahora?
Mikey se quedó en silencio un minuto después de ayudarle a sentarse en una de las periqueras vacías. Miró el contador sobre sus cabezas. Faltaba poco más de media hora para iniciar. Cuando volvió su vista, su hermano ya estaba ofreciéndole a Frank un par de pastillas y colocando una bolsa de hielo en su tobillo. —Tengo que hacer una llamada, esperar conseguir algún modelo que llegue en cinco minutos.
—Mikey, lo siento...
Mikey le sonrió cariñosamente para darle a entender que no había problema. Pero sí lo había, los atuendos de Gerard y Frank habían sido diseñados para complementarse, Gerard no podía salir solo. Salió del backstage para tener mejor señal para llamar a alguna agencia cuando miró hacía la cabina del DJ. Había dos personas ahí; un viejo amigo que le estaba haciendo el favor de poner la música para su espectáculo y la solución a su problema. Se dirigió ahí y golpeó la puerta de acrílico hasta que llamó la atención del hombre que conocía y este salió envolviéndolo en un abrazo.
—Hey, Chris.
—Michael. ¿No deberías estar detrás de escena organizando todo?
—Sí, pero necesito un favor.
—¿Quieres revisar la música?
—No. A él. -Señaló al hombre que permanecía con los audífonos puestos dentro de la cabina. —¿Cómo se llama?
—Es Peter... ¿Para qué necesitas a Wentz?
—Iero se lastimó el tobillo y no puede caminar.
—¿Y no puede hacerlo alguien más?
—Tienen la misma estatura y complexión y aunque no lo creas, no tengo muchos modelos que midan 1.68 y tampoco puedo conseguirlos a pocos minutos de empezar. ¿Vas a dejarme preguntarle o no?
—Es tu show, Mikes...- Le hizo una seña para que entraran juntos a la cabina y se aseguró de que los micrófonos estuvieran apagados antes hablar. —Oye, Pete. Mikey Way quiere saber si quieres modelar uno de sus diseños.
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"Infinity On High" (Terminado)
FanfictionOne Shot de un universo alternativo dónde Mikey Way es un diseñador de modas; su modelo estelar sufre un percance a unos minutos de salir a escena así que necesita pensar de prisa en como solucionarlo; por suerte su salvación está muy cerca.