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— vamos Sasha, ya que estás tan aburrida y sin nada que hacer... ¿porqué no mejor ver algún directo? — comentó la tailandesa mientras gracias al aburrimiento que ella sentía, daba vueltas sobre una silla, mirando las acciones de su mayor.
Desde muy pequeñas eran mejores amigas, inseparables. Aunque en múltiples ocasiones han tenido sus diferencias. Sasha amaba a Anne tanto que hasta llegaba a protegerla, pero claro solía pasarse de la raya creando que hayan momentos un tanto conflictivos entre ambas.
— está bien... ¿qué me recomiendas para ver? — preguntó la rubia un poco rendida.
Tomo entre sus manos aquella silla giratoria dejando qué con lentitud dejará de moverse, Anne frunció los labios en forma de enojo.
— pues... ¿Qué tal a Marbbles?
— ¿Marbbles?
— ¡Sí! una chica quién juega bastante bien, suele jugar juegos tipo... ¿Competitivos? He jugado algunos, pero realmente no soy mucho de jugar. — se encogió de hombros
Sasha movió un poco su cabeza mirando a la tailandesa con curiosidad.
— sabés que, no me interesan mucho esas cosas.
Anne sonrió de forma suave, jalando su propia silla hacía su ordenador. Sasha con mucha curiosidad la siguió apoyando sus brazos en el espaldar de la silla.
— mirá. — habló mirando a la pantalla y luego de reojo a su contraría.
En ella había un directo, de aquella chica. Tenía rasgos asiáticos, un cabello azabache ordenado y bastante bonito. Unos ojos achinados ¿Será Asiática por sus rasgos? pensó la alemana admirando con mucha curiosidad la pantalla enfrente de ella.
— ¡Hola a todos! Aquí Marbbles. — comenzó a hablar aquella chica, su voz era totalmente adorable y llena de inocencia. — el día de hoy tengo pensado jugar Legends of runeterra, me lo han recomendado mucho y la verdad... Conocen realmente mis gustos. — soltó una risa, esa risa era melodiodica ante los oídos de la curiosa rubia.
Anne ahora posaba su mirada en la rubia quién miraba con curiosidad la pantalla.
—¿Verdad que es linda? — comentó ahora mirando a la pantalla.
Si, tenía cierto platónico con la asiática. Cosa que Sasha sabía.
— nada mal... Ya veo porqué te gusta. — soltó una risita suave, golpeando el hombro de su mejor amiga, quién se había sonrojado con fuerza.
— ¡No me gusta! Es linda y todo pero... ¡No me molestes, Waybright! — exclamó un tanto molesta mientras se cruzaba de brazos.
Para Sasha, aquella tailandesa era bastante tierna, una risita traviesa había salido de sus propios belfos.
Marbbles seguía hablando, bueno ahora jugando se veía tan tierna haciendo muecas de concentración, sus mejillas se inflaban de manera tierna ¡Daban ganas de pellizcarlas! Había pensado la rubia quién automáticamente ladeó su cabeza con lentitud, mantenía su mirada fija en el ordenador de su mejor amiga. Aquella concentración, aquella sincronización a la hora de jugar, movimientos y estrategias bastante buenas. Aquella chica era realmente bueno en lo que hacía, ¿Otra nerd? Por así decirlo.
— ¡Es tan genial jugando! — exclamó una emocionada tailandesa, quién había donado. En múltiples ocasiones lo hacía.
— ¿qué hacés?
— donandole, siempre lo hago, bueno cuando puedo. ¿porqué?
— no creo que te preste aten... — fué interrumpida al escuchar cómo aquella azabache agradecía por la donación de hace minutos.
— ¿Decías?
Sasha ladeó su cabeza, volvió su concentración hacía la pantalla. La asiática estaba tan concentrada en el juego ( que literalmente no entendía una mierda su jugabilidad, igual ni le importaba ) sólo estaba enfocada en las facciones de la chica, relajadas, estresadas, tiernas etc.
— bueno chicos, eso es todo por hoy, la verdad fue bastante... ¿difícil? Aunque para Marbbles ningún juego es difícil. — soltó una suave risita. - — en fin, nos vemos mañana en un juego directo. — movió su mano en forma de despedida mientras sonreía de forma bastante tierna.
Sasha la miraba, su sonrisa era realmente radiante, hasta podía jurar que brillaba.
Aunque para la Alemana, era otra nerd o hasta obsesionada por los vídeojuegos, nada que fuera gran cosa.
Pero... Gracias a Anne Boonchuy comenzó a mirar más a aquella curiosa chica gamer.
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