• ¿Más que sonrisas? •

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Ya era el último día de la convención, y eso me tenía un poco triste.

No sabía que podía hacer, era el último día que también vería a Ro, y aunque habían pasado muchas cosas que me hicieron acercarme a ella mucho, no me sentía del todo satisfecha, así que decidí hacer algo al respecto.

Vengo en un rato - le mencioné a Cath justo al salir de la habitación, ella no sabía a donde iba, pero yo estaba muy segura de mi decisión.

Camine algunas cuadras buscando tiendas de todo, compre lo suficiente, o al menos todo lo que quería darle antes de que partiera, pues no le había dado algún regalo, y aunque había uno que ya tenía listo, me daba mucha pena dárselo en persona, y por eso lo complemente con lo demás poniéndolo en una caja de color rojo y tapa naranja, sabía que le encantaba el naranja así que añadi muchas cosas de ese color.

Regresé al hotel sólo para cambiarme rápidamente pues iríamos a la plaza y ya se nos había hecho tarde.

Apúrate Cath! - ya estaba esperandola afuera del hotel, porque el taxi había llegado, y ella seguía intentando arreglarse.

Yaa vamos, desesperada - al subirnos fui muy cuidadosa con el regalo que llevaba, no quería que se rompiera, y sinceramente estaba poniéndome más nerviosa de lo normal.

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Llegamos sin pensar en que hubiera tanta gente, pues al ser el último día aprovecharían en lo absoluto.

Ese día venderían cosas y firmarían también, por lo que era la oportunidad perfecta pero, era demasiada gente por lo que me esperaría todo un rato para dárselo personalmente sin retrasar a nadie.

Vas a esperar tanto sólo para darle una caja? - le asentí siendo obvia, Cath sabía mejor que nadie que había empezado a ser algo especial para mí el hecho de estar un rato con Ro.

Y dime...te empezó a gustar? - se sentó a un lado mío mientras esperabamos afuera.

La miré sabiendo que no le podía mentir...

No lo sé...es solo que, jamás me había sentido así por alguien y lo sabes - mi cara se ruborizo un poco haciéndolo más incómodo para mí.

Aww definitivamente sientes algo por ella, y está bien muchas personas lo están pero- se pauso un segundo pensando en lo que diría.

Eres la primera persona que se atrevió probablemente a invitarla a comer - me sonrió y era cierto.

No chingues...es cierto - yo misma estaba impresionada, jamás había podido haber hecho algo así por alguien...

Bueno haré una llamada en lo que esperamos - me dejo sus cosas y fue a hacer su llamada, yo sólo pensaba y pensaba, mientras observaba como mi amiga reía al teléfono probablemente con el mismo chico con el que se empezó a hablar.

Pasaron minutos, que se hicieron una hora completa, entonces era el momento, se hacía de tarde, y el evento terminaría en una hora exacta.

Cath ya podemos ir - ella estaba distraída por lo que tuve que ir por mi cuenta, me acerqué caminando a paso normal.

Ahí estaba ella, con algunas cosas de sobra terminando de firmar para la última persona en la fila, y cuando está se retiro, era mi turno.

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