☾︎ 4 ☽︎

147 25 1
                                    

C.4
☾︎❄︎✵♪ʕ•ᴥ•ʔ♪✵❄︎☽︎

- ¡Hali!

- Que tal Rosita- se le escuchaba un poco decaída.

- ¿Pasa algo?

- Nada...- respondió tratando de sonar mejor- Ya sabes... Mi novio y sus cosas...

- ¿Todavía me tiene celos?

- No, a ti no, a Hoseok...- Rosé quedó horas aconsejando a su mejor amiga por teléfono sobre su novio, pues este tenía un carácter muy díficil, era extremamente posesivo y eso no era sano para Hali.

Cuando tuvo que colgar y quedar en total silencio, pensó nuevamente sobre aquel portal que debería transportarla al otro mundo del que hablaba su abuelo, ya lo había encontrado, pero no sabía si ir o no... Estaba muy indecisa, ¿Y si era peligroso? Está claro que sí iba cumpliría con las reglas que implantó su abuelo. ¿De verdad no puede confiar en nadie?

"No tan fácilmente"

"Siempre mantente en guardia"

"Nunca la bajes"

Sus balbuceos mentales respondían pocas cosas.

Decidida, tomó una gran capa negra y recogió su cabello en una coleta para subirse la capucha y así lograr ocultar su rostro, no iba a dejar que la vean ni mucho menos exponerse.

Tomó una vieja daga de su abuelo y la escondió en su bota derecha para tomar rumbo a la casa del árbol, no planeaba ir desarmada, antes cuando vivía en la ciudad siempre llevaba algo para su defensa propia puesto a que aveces le tocaba caminar por territorios peligrosos.

Esta vez no sería diferente, ¿No?

Levantó la alfombra roja dejando a la vista una pequeña puerta, bajó sus escaleras y nuevamente ingresó a aquel pasillo oscuro, fue dando pasos inseguros hasta que iluminó con su teléfono lo que parecían ser más escaleras.

Abrió otra puertecilla idéntica a la otra y observó todo su entorno.

Ya no era de día.... Era de noche.

Su celular marcaba la misma hora de antes pero su reloj ya no parecía avanzar no un segundo, se había detenido.

Desconcertada salió de esa otra casa del árbol para correr hacia la de su abuela, pero no encontró nada.

Ya no estaba la vivienda de su abuela, no había nada...

Pero si habían dos caminos.

Derecha e izquierda.

Tomó la izquierda, puesto a que siempre se iba por el otro lado, hoy iba a cambiar eso.

Se adentró a un bosque el cual mientras más ella avanzaba más horrible y tenebroso se volvía, escuchó pisadas y unos temblores de tierra, algo grande estaba caminando por allí.

¿Un dinosaurio? ¿Un dragón? ¿Un gigante?

Y si vio una enorme bestia, parecía un lobo, notó que giró su robusto cuerpo hacia su dirección mientras olfateaba.

«Joder... Creo que me encontró...»

Corrí sin mirar atrás, parece que despisté esa cosa... ¡Pude haber muerto! Esto era más peligroso de lo que imaginaba, deben haber más cosas como esas, ya entendí que no debo bajar la guardia...

Un largo rato después me encontraba en una aldea, tuve que saltar una cerca ¿Es idea mía o aquí me siento muy liviana?

Hasta me daban ganas de bailar.

Vi que aún habían varias personas fuera de sus casas, todos vestían de manera muy rara, haciéndome recordar varios animes en donde se usaban cosas así.

Caminé tratando de pasar desapercibida, necesito conocer a alguien de aquí para informarme mejor sobre todo esto... ¿Donde estoy? Parece una aldea.

"Dibuja una D con tu mano derecha"

Hice exactamente lo que me ordenaron y apareció un vórtice negro, muy similar a una noche estrellada.

Muy desconcertada salté dentro y terminé en lo que parecía un jardín secreto. Me di mi tiempo para inspeccionar de que esté segura, habían flores muy raras, unas que nunca había visto, pero no podía negar que su holor era único.

Yo siempre usaba un perfume echo de pétalos de rosas, pero no tenían que ver con tal exquisito aroma.

Me senté en el pasto disfrutando de su tacto, enserio me sentía muy liviana, como una pluma, eso me hacía mucho más ágil.

Probé y di una pirueta, la mejor de mi vida, comenzé a hacer volteretas como toda una gimnasta, algún día cumpliría ese sueño de ser una.

Agotada volví a sentarme cuando sentí un sonido detrás de mí y una punta rozar mi espalda, rápidamente mi piel se erizó y sentí unos escalofríos, una rara presencia.

- Dime quién eres y qué haces aquí.

Me levanté suavemente con mis manos levantadas en señal de paz mientras me daba la vuelta para encararlo.

Logré ver a un joven, no pasaría los 20 años, peliazul, usaba un traje negro portando una filosa espada, tragué grueso.

- ¿Acaso eres sorda o muda?

- Y-Yo...- aclaré mi garganta para hablar engrosando un poco la voz- Soy Rose- El pareció desconcertado por un instante ¿Habré echo bien al decir mi nombre?

- ¿Qué haces en mi jardín Rose? ¿Eres una ladrona?- dió un paso y yo retrocedí otro.

- No...-

- Este lugar está bien escondido ¿Cómo lograste entrar? Solo ella sabía...- balbuceó lo último pero fue escuchado por la pelirosa- No importa, te mataré, hace días que no me divierto.

El chico corrió hacia ella para tratar de cortarle su cabeza con la espada en un movimiento ágil, pero la chica era más rápida aún, se tiró al suelo mientras rodaba escribió una "D" y saltó a al vórtice que apareció logrando salvarla, dejaron atrás al peliazul bastante cabreado.

Apareció en la casa del árbol nuevamente, muchas emociones para un solo día...

- ¿Dónde estuviste ayer? Pasaste todo el día desaparecida- Hablo Shane dándole una mordida a su manzana.

- No creo que te interese a donde yo valla- bufé.

- No, tienes razón, no me interesa, pero ya conversamos sobre los novios secretos, si me entero que tienes uno juro que...-

- ¡Que no por dios!

- Ya estás advertida, lo mato ¿Oíste? Lo mato- dijo mientras pretendía cortarse el cuello.

- ¿Y tú novia?

- Ex-novia, terminamos- aclaró rascando su nuca.

- Me alegra, ella merecía alguien mejor.

- ¡Hey!

- ¡Llegué!- anunció la pequeña Dae- ¿De que hablaban?

- La grosera de tu hermana diciendo que Kathy merecía a alguien mejor que yo, Como si eso existiera- bufó rodando los ojos- Ningún chico es tan perfecto como este bombón de aquí- dijo señalandose a sí mismo con una expresión arrogante.

- Ya quisieras.

- Vamos, acéptalo Rosita.

- Prefiero chupársela al viejo de la esquina.

- Grosera.

---

 신의 조화 𝖕.𝖏.𝖒ೋDonde viven las historias. Descúbrelo ahora