Mi pequeña princesa|Nash Grier|

Capítulo 32

Matt corrió hasta a mi y no le importo que estuviera empapada sentí sus brazos rodearme y juntarme a el, le correspondí al abrazo. Extrañaba tanto a Matt el era como un hermano para mi, es mi amigo del alma que a pesar de todas las malas que hemos pasado el sigue ahí siempre con una sonrisa para apoyarme, por mas triste que este el siempre intenta sacarme una sonrisa siempre que lo veo me pregunto ¿que haría yo sin este chico? No corrección ¿que haría yo sin este maravilloso idiota? Seguramente mi vida seria mas amarga y sin alegrías.

- ¡Matt! - Lo abrace con todas mis fuerzas, el se separó y me guió al cuarto de el.

- ¿Que ha pasado? - Pregunto con preocupación.

Mire su cuarto y nada había cambiado su cama ahí estaba delante de su pared azul y las fotos de nosotros aun seguían el esa mesita de noche, fotos desde pequeños hasta ahora. En su cama reposaba una caja de pizza y a los lados una bolsa llena de gomitas y otra que contenía chocolates justo como lo había dicho en el mensaje.

- Estoy toda empapada ¿podría cambiarme primero? - Pregunte y el asintió.

- Si quieres te presto algo mio, algunas cosas de tu maleta se mojaron y mamá las puso a secar. - Dijo y después abrió su closet sacando un short y una camisa blanca.

- Gracias Matt. - Entre a su baño pues era claro que ya sabia donde estaba, me quite toda la ropa menos la interior y sentí algo helado en mi cuello miré en el espejo y ahí reposaba aquel lindo collar que Nash me había regalado, no me lo quitaría.

Termine y salí del baño y note que Matt ya también se había puesto su pijama.

- ¿Pizza? - Pregunto.

- Pizza. - Le sonrei y el puso una rebanada en mi plato, me senté con el.

- ¿Quieres contarme que ha pasado? - Pregunto el mientras comía de su pizza.

- Na-Nash. - Intente hablar pero la voz se me quebró, odiaba eso querer hablar pero que se te forme un nudo en la garganta por cada palabra que dices, eso era horrible.

- Tranquila. - Dijo el mirándome. - ¿El esta bien? - Pregunto.

- Supongo que ha de estar mejor que nunca. - Dije poniendo los ojos en blanco.

- ¿Por que? - Pregunto.

Cuidadosamente me baje de la cama y camine hasta donde estaba una pequeña bolsa mía donde tenia mi celular, lo prendí y puse la contraseña. Entre a mis mensajes de Whatsapp y abrí la conversación de aquella chica y aquellas imágenes seguían ahí, le entregue el celular a Matt.

El lo tomo y comenzó a leer, vi como apretaba su puño mientras veía el celular, y luego sonó el *Tin* avisándome que había recibido otro mensaje.

- ¿De quien es? - Pregunte.

El rostro de Matt mostró sorpresa y después estaba rojo de la furia cosa que hizo que asustara ¿seria el nuevo mensaje?

- De nadie. - Dijo bloqueando el celular y poniéndolo debajo de su pierna.

- Matt. - Dije amenazadoramente.

- Es de la misma persona. - Hablo.

- Dámelo quiero verlo. - Dije estirando mi mano para que me lo diera.

- Oh créeme que no quieres. - Dijo tomando mi celular entre sus manos.

- ¡Matt! - El me entrego el celular.

Abrí el mensaje "Hey pequeña he conseguido la imagen del beso, no es ningún mal entendido ahí se ve claramente como los dos disfrutan del beso"
(imagen de Nash besando a Sandy)

Mi mundo se hizo pedazos, el me estaba engañando, las lágrimas no tardaron en hacerse presentes. ¿Como se atreve? En la tarde había dicho que me amaba y ahora ya esta besándose con otra y aun peor el no hizo nada para detenerla, ¡Eres un hijo de puta Hamilton Nash Grier! Eso es lo que eres.

- Tranquila. - Sentí como Matt abrazaba mi brazo.

- No soy la única. - Hable entre sollozos.

Me era inevitable llorar no podía creerlo, jamás me imagine que el podría hacerme algo como eso a mi no no podía creerlo.

- ¡Lo odio! ¡Lo odio! - Dije entre dientes y sentí como mi rostro estaba empapado por mis propias lágrimas.

- Tal vez es solo un mal entendido, no creo a Nash capaz de hacer eso. - Dijo rascando su nuca.

- Pues lo ha hecho Matt. - Limpie algunas lágrimas de mis ojos.

- Te juro que cuando lo vea lo golpeare hasta el cansancio, nadie se mete con mi pequeña. - Matt me abrazo mas fuerte y beso mi cabello.

¿Que haría yo sin su apoyo?

Matt cada momento trataba de sacarme una sonrisa con sus chistes y ocurrencias, lo logro dos veces. El es el mejor de todo el mundo.

- ¡Es enserio! Taylor en su primera cita se cayó arriba de una hamburguesa. - Decía el haciendo movimientos con las manos.

- Oh Dios. - Reí un poco y Matt me miro con ternura.

- ¡Si! Y la chica se río por horas así que el se enojo y se fue. - Contó Matt mientras reía y comía chocolate.

No creo poder lograr que Matt se duerma.

- Matt ya son las 2:12am deberíamos de dormir, me siento agotada. - Dijo metiéndome entre las cobijas.

- ¡A su órdenes capitán! - Grito y se acostó también.

- Shhh Matt vendrá mi tía y nos regañara por que aun no estamos dormidos. - Digo mientras lo cobijo como si fuera un niño pequeño.

- Hasta mañana pequeña. - Siento como besa mi frente.

- Hasta mañana Matt. - Digo mientras beso su mejilla.

No puedo dormir parece que al sueño le salieron pies y huyo de mi.

- ¿Matt? - Pregunto.

- ¿Si? - Contesta el.

- No puedo dormir. - Confieso.

- ¿Guerra de almohadas? - Pregunta.

- Guerra de almohadas. - Digo.

Los dos nos levantamos de golpe, no puede ser una noche de mejores amigos sin una guerra de almohadas.
........

Estoy enojada con Nash.