𝗥𝗘𝗦𝗢𝗡𝗔𝗡𝗖𝗘 ─ 𝗷.𝘀𝘂𝗻𝗴𝗰𝗵𝗮𝗻𝗴 ✔

CAPÍTULO 8

Como futuro rey, el padre de Sungchan había decidido que sería una buena idea para él liderar la primera y siguiente misión.

Sungchan se había unido a algunas misiones de vez en cuando, pero nunca las dirigió. Como jefe de los guardias, Haechan casi lideraba las misiones con Sungchan como mano derecha. Esta vez, fue al revés.

Había llegado el día de la expedición.  Antes de que Sungchan se fuera a buscar su caballo, su padre rápidamente repasó toda la información que necesitaba saber.  Cuando llegó al establo, su caballo ya estaba listo para la expedición.

Se montó en su caballo mientras cabalgaba hacia donde los soldados estaban reunidos. Notó que otras personas ya estaban allí, una persona en particular le llamó la atención.

Sintió que su corazón latía más rápido al ver a su alma gemela.

Cuando sus ojos se encontraron, el tiempo pareció detenerse para el joven príncipe, contemplando su belleza. Cuando ella apartó la cabeza de él, el chico frente a ella dijo: "¿Qué estás haciendo aquí?" Renjun preguntó con amargura.

Sungchan no esperaba tal respuesta.  la forma en que Renjun y Aera se veían tan encantadores, sentados en el caballo juntos hizo que Sungchan se pusiera un poco celoso.

"¿Es esa la forma de saludar al príncipe?" preguntó Sungchan con frialdad, manteniendo su conocida reputación de ser una persona fría.

Renjun se burló del joven príncipe, "Lo siento su majestad. ¿Podría decirme lo que está haciendo aquí, príncipe Sungchan?"

Sungchan sintió que le subía la molestia por la forma en que Renjun le hablaba. Es posible que hayan hablado y salido unas 2 veces, pero seguía siendo su príncipe. Aun podía exiliar a Renjun en el momento en el que deseara.

"Como pronto sere el rey, decidí unirme", le dijo a la pareja honestamente, mirando a Aera solo para ver que ella todavía no lo veía de vuelta.

Sungchan suspiró y cambió su enfoque al gran grupo de guardias, "En poco tiempo, nos vamos a las fronteras orientales. Allí vigilaremos en las fronteras y nos aseguraremos de que el envío comercial vaya bien.  Nos quedaremos allí durante una semana y volveremos el año que viene para asegurarnos de que todo está en orden. Todos recibirán instrucciones más específicas cuando lleguemos. ¿Alguna pregunta?"  Sungchan habló.

Nadie se atrevió a levantar la mano, temiendo que un Sungchan enojado sea como su padre, "Bueno, empecemos nuestro viaje hacia la frontera entonces", ordenó, indicándole a su caballo que empezara a alejarse, iniciando el largo viaje hacia las fronteras.

Sungchan miró a la pareja frente a él, preguntándose cómo podría hacer que Aera lo perdonará.

"¿Qué pasa con ustedes tres?"  Haechan preguntó de repente, haciendo que Sungchan se volviera hacia él.

"Nada", mintió.

Haechan suspiró mientras negaba con la cabeza. "¿Crees que soy ciego o tonto?"

"Sí", respondió Sungchan con una sonrisa en sus labios.

"Cállate idiota, estoy hablando. Pero hay una tensión entre ustedes tres. Pensé que te llevabas muy bien con ellos y de repente esta tensión los envolvió", suspiró Sungchan, su estado de ánimo bajó incluso más.

"Gracias por decir lo obvio" murmuró a Haechan.

Sungchan vaciló, sabiendo que Haechan podría difundir fácilmente la información que Sungchan había mantenido en secreto, "Bien, bien, pero no se lo digas a nadie, ni siquiera a tu gato", le dijo a Haechan.