Capítulo 4: I follow you

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Las pupilas negras de la mujer miraban con frialdad a aquel ser humano que proclamaba ser un Dragón Xiaolin con orgullo. Aunque supiera que él no era el responsable de su tragedia todavía el sentimiento de furia y venganza recorrían en su sangre, sin embargo, no seria para nada bueno que se rebajara a comportamientos inadecuados solo por el simple hecho de querer vengarse.

Ignorando lo antes preguntado por lo demás volteo a observar a su nuevo aprendiz, con lo poco que había visto y examinado en las semanas que estuvo convertido en perro, se percató que el niño era un diamante en bruto, solamente necesitaba que alguien lo puliera y esa seria ella. Aparte de que en el proceso hiciera que se diera cuenta de nuevos sentimientos encontrados el tal proclamado Príncipe Heylin.

"Rojo y verde" Pensó divertida mientras que los demás espectadores todavía esperaban una respuesta de ella

— Oye, es de mala educación no responder cuando te preguntan —

— Pensé que eran demasiado inteligentes para suponer que mi silencio era porque no quiero responder a su pregunta — Soltó un chasquido con la lengua

Sin querer estar más tiempo con esas personas, agarro de la cintura al pelirrojo juntándolo a su cuerpo sorprendiéndolo al instante, era mejor hablar en privado ante toda esta gentuza. Un humo negro los empezó a absorber mientras que los dos bandos contemplaban como se desvanecían.

— Regreso — Murmuró con miedo Dojo, tenía ya bastante tiempo que sus pequeños ojos veían a la dama de antes

Un incómodo silencio inundó el lugar donde estaban, fuera lo que fuera esa mujer tenían que estar atentos.

Cuando por fin llegaron a la casa del pelirrojo supo de inmediato que su mala suerte empezó desde la mañana, ahora sin querer el destino le dio a Jack a un nuevo ser de otro sitio para que cuidara o eso era lo que quería suponer, ya que él no era de buen sabor.

— No te haré daño Jack — Hablo la mujer al ver como el joven empezaba a ponerse nervioso ante su presencia — Eres mi aprendiz después de todo — Despacio acerco su mano sobre el pelo rojo y acaricio levemente

Ronroneo sin querer Jack al sentir las caricias dadas en su cabeza, pero antes tenía que estar seguro de que no era una broma de mal gusto — ¿En verdad seré tu aprendiz? —

— Van a desear nunca haberte conocido cheri cheri men — La antes carta que tenía Jack en este juego iba a hacer reemplazada por otra más fuerte — Llámame Erina, tiene siglos que no me acuerdo de mi verdadero nombre —

Jack proceso detenidamente lo dicho ante, si las palabras eran verdaderas de aquella mujer entonces no tenía nada que arriesgar, demostraría a todos que él también puede ser el protagonista de otras historias. Después de ese acontecimiento la conversación se fue guiando a otros temas, no había prisa con empezar su entrenamiento, además que necesitaban conocerse mejor para tener una conexión irrompible.

Conforme pasaban los días los dos se fueron acostumbrando a la presencia del otro, en esos pocos días también esos dos habían empezado a crear otro tipo de vínculo, uno más fuerte.

El de familia...

La mujer trataba al joven como si fuera su propio hijo y eso se dio cuenta Chase un día cuando quiso comunicarse con Jack a altas horas de la madrugada.

Inicio del flashback

— El cuerpo humano tiene que tener un descanso de ocho horas señor Young — Había mandado a dormir temprano a Jack, ya que dentro de unos pocos días empezarían su entrenamiento, sin embargo, el sonido de tono de llamada que sonaba en el laboratorio la hizo querer investigar, tomando la sorpresa de encontrar el nombre del dragón puesto en la gran pantalla de la computadora 

— No es contigo esta llamada, llama a Jack — Tenía una suerte que estaba del otro lado de la pantalla si no ya esta conversación hubiera acabado desde el principio, no le gustaba para nada de que la mujer se quedara estática en su lugar todavía 

— Como la maestra de Jack soy yo, yo decido que cosas le convienen a él en su vida y usted no está en esa lista — Sonrió disimuladamente, un día de estos sus mismos comentarios la llevarían a su segunda muerte si es que eso era posible para ella

Ninguno apartaba la mirada del otro, era como si quisieran dar a entender que no darían su brazo a torcer.

— Una verdadera dama haría lo que le estoy pidiendo — Sonrió burlesco al ver como la mujer tenía un tic en el ojo por ese comentario suyo 

"Los modales hacen a las personas" Era la misma frase que se repetía cuando estaba a punto de perder los estribos

Suspiro con calma, si así quería jugar el hombre, que así fuera — Luzco como una chica, pero pienso como un chico —

— No es propio de una dama comportarse como (Slime) — Recordaba todas las veces que su madre y abuela le repetían eso — Es fácil ser vulgar cuando tienes una mente retorcida —

Final de flashback

No espero ninguna reacción del otro individuo y apago la computadora grande esa noche, ahora sin querer tenía aún posible dragón queriendo su cabeza en su sala dé trofeos. 

Cheri Cheri MenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora