𝑀𝑎𝑟𝑐𝑒𝑙𝑖𝑛𝑒 𝐻𝑜𝑜𝑑 [𝐵𝑢𝑏𝑏𝑙𝑖𝑛𝑒]

𝘔♡𝘉

Marceline Hood estaba muerta o eso creían todos, minutos después de qué su hombro fue atravesado por una flecha y cayó al agua, al estar hundiéndose ella logró nadar y regresó a la superficie, nadó hasta qué llegó a la orilla. Ella creyó por un momento qué iba a morir pero logró sobrevivir una vez más, y al parecer tenía la suerte de su lado, logró levantarse y caminó completamente empapada con una flecha en su hombro por él bosque, ella regresaría a la cabaña y curaría su hombro y después sacaría a todos de la cárcel pero mientras trataba de caminar con gotas de sangre mezclado con agua cayendo al suelo, sentía que se desmayaría por la sangré qué estaba perdiendo y justó enfrente de ella estaba aquel hombre. Rey ricardo -Dijo antes de caer al suelo.

Marceline abrió sus ojos lentamente y se dió cuenta qué estaba acostada en una cama con su hombro vendado y aquel hombre estaba sentado a su lado. Creí qué jamás volvería a verte -Menciono bromeando la pelinegra. Si, bueno yo también creí qué nunca volvería pero escuché qué mi querido hermano está dejando en ruinas mi amado pueblo y te juró qué traté de regresar antes pero simplemente las circunstancias de la vida me lo impidieron. Lo siento tanto -Explico él Rey con una sonrisa triste. No te preocupes, más vale tardé qué nunca -Bromeó y ambos rieron. ¿Cuánto tiempo estuve dormida? -Preguntó. Cómo cuatro días -Respondió mientras le ponía un plato dé caldo en sus manos, está rápidamente comenzó a comer. ¿Y cuál es el plan? -Preguntó la pelinegra. Eso mismo quería preguntarte a ti Marceline -Respondió el hombre con una sonrisa. Bueno, tienes suerte qué ya haya pensado en algo -Menciono con una sonrisa. Marceline le explicó su plan que era uno muy sencillo y él simplemente estuvo de acuerdo pero decidieron esperar unos cuantos días más para qué la pelinegra recuperará sus fuerzas.
Una semana después Él rey ricardo revisaba el hombro de Marceline qué por suerte ya se encontraba mejor pero aún así limpió la herida y le colocó otro vendaje limpió, tenían la suerte de que la pelinegra se recuperaba rápido y esa misma noche llevarían acabó su plan.

Mientras tanto Bonnibel desde hace días atrás había estado teniendo muchas náuseas y había vomitando en las mañanas y lo más importante su periodo no llegó, sabía lo qué significaba...está embarazada de Marceline, ella lo sabía, su instinto se lo decía, probablemente tendría más de una semana ya que es él tiempo desde la última vez qué le hizo el amor a su Marceline. Todos los días pensaba en ella y siempre aparecía en sus sueños. Pero ahora se encontraba en una celda, embarazada y sin Marceline, ella cómo pudo trató de ocultar sus síntomas muy bien cuándo los guardias hacían sus rondas o cuándo le traían comida porqué sabe qué si su tío Gumball se entera mataría a su bebé sólo por ser de Marceline y eso no lo permitiría. Ella traería al mundo al hijo/a de Marceline así sea lo último que haga.

Pronto comenzó a oscurecer tanto él rey cómo Marceline estaba más qué listos para comenzar su plan, caminado cuidadosamente hasta llegar a la prisión para su suerte el sheriff cuidaba de esta pero estaba completamente dormido así qué le quitaron las llaves, tomaron unas esposas para inmovilizarlo de las manos y lo metieron a una celda cuándo esté se dió cuenta sé puso pálido al ver al Rey junto a Marceline, ellos continuaron con él plan: Liberaron a toda la gente qué fue arrestada, cuándo liberaron a Little Finn, esté abrazó fuertemente a Marceline, luego y ella fue a buscar a Bonnibel para liberarla, cuándo la encontró estaba dé espaldas. Bonnie -La llamó, está volteó y sus ojos se le llenaron de lágrimas. Oh Dios mío, creí qué habías muerto -Dijo tratando de contener sus lágrimas de felicidad. No podría irme sin antes casarme contigo mi amor -Menciono abriendo la puerta de su celda, inmediatamente Bonnibel abrazó fuertemente a Marceline y luego sé besaron.

¡Marceline estoy embarazada! -Soltó la noticia, ya no podía callar más. Marceline inmediatamente la volvió abrazar. Es la mejor noticia qué he recibido mi amor -Le susurró besando su frente. Vaya, esa sí que es una muy buena noticia -Comento él rey, Bonnibel no se había percatado que él y Little Finn estaban ahí atrás observando todo. ¡Tio Ricardo! -Dijo con emoción y corrió a abrazarlo. También te extrañé Bonnibel querida -Le dijo. Por cierto Marceline me pidió mí bendición para casarse y por supuesto qué se las di, cuándo regresé al tronó yo mismo las casaré -Comento él hombre haciendo sentir a Bonnibel y a Marceline una inmensa felicidad.

En un abrir y cerrar de ojos las celdas quedaron vacías excepto por 3, en una se encontraba el sheriff, otra Sir hiss y por último él príncipe Gumball estarían ahí un largó tiempo. Él Rey Ricardo regresó al tronó, quitó las absurdos impuestos qué puso su hermanó y arregló todo el desastre qué hizo, Notingham finalmente volvía a ser ese pueblito feliz y llenó de esperanza. Y cómo prometió Él Rey casó a su sobrina con Marceline, todo él pueblo asistió a la ceremonia y poco después sé enteraron del embarazo de Bonnibel.

Había pasado dos meses, Marceline y Bonnibel iba caminando por él pueblo tomadas de las manos, toda la gente las saludaba felices y cada vez qué tenían la oportunidad les daban las gracias por volver a traer la felicidad a Notingham. Marceline acarició él pequeño vientre qué se le había formando a su esposa y luego la besó tiernamente. Te amo tanto mi amor -Le dije dándole un besó en su frente mientras seguía acariciando su vientre. También te amó mucho cariño -Respondió colocando su mano con la de su esposa qué seguía en su vientre, a ambas le emocionaba está nueva etapa qué iba a pasar juntas, ambas siempre habían sido muy buenas con los niños y por supuesto quieren tener muchos hijos juntas.

Ella vivieron muy felices para siempre.

Fin.