Capítulo 3

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III
Kirishima salió apresurado de la primaria para recoger a Izuku en el preescolar, aunque estaba a solo un par de cuadras no quería hacerlo esperar y ni los comentarios de su amigo Zero arruinaron su excelente humor por poder ver al lindo doncel que le robaba suspiros. Llego antes de que Izuku saliera por lo que lo espero en la entrada del preescolar. Lo miro despedir a varios de sus alumnos que salían de la mano de sus madres e incluso se encontró con padres de sus alumnos que también recogían a sus hijos menores, a los pocos minutos Izuku salió con su mochila sonriéndole como siempre.
-buenas tardes kiri-kun, lamento haberte hecho esperar – la sonrisa de Izuku era realmente hermosa y Kirishima se preguntaba si algún día podría besarle, un sonrojo se apodero de sus mejillas y trato de mantener la compostura para no delatarse.
-no te preocupes… tus alumnos te quieren mucho, sabes, nunca te había visto en el trabajo – aquello hizo reír a Izuku, pues si bien se conocían de hace un par de años Kirishima nunca había visto al doncel tratando con los niños dentro del preescolar.
-bueno, es un requisito, ¿verdad? – Izuku sonreía abiertamente, y eso hizo a Kirishima sonreír aún más, tomo la mochila Izuku antes de que el doncel pudiera decir algo.
-yo la llevare… y no acepto un no – Izuku hizo el amague de replicar, pero al final solo se resignó, sabía que Kirishima no lo dejaría llevarla, pues si algo siempre había caracterizado al pelirrojo era su caballerosidad. Cuando subieron al auto Kirishima nuevamente le abrió la puerta del copiloto, dejo la mochila en el asiento trasero junto a la suya para al fin subir y poner en marcha el auto para buscar un restaurante del gusto de ambos. Mientras conducía escuchaba a Izuku tararear las canciones de la radio de manera divertida, la risilla del doncel era contagiosa y para él escucharla era lo mejor que podía tener.
Luego de unas vueltas encontraron un restaurante del gusto de ambos en la plaza comercial del centro, platicaban animadamente mientras esperaban su orden cuando Izuku volvió la miraba a la ventana a su izquierda y se encontró con la figura de Bakugou, a su lado una chica de cabellos castaños se colgaba de su brazo mientras parecían conversar, la mirada de Izuku no pudo apartarse, aquello era algo que su novio nunca le había permitido a él. Kirishima al notarlo busco aquello que Izuku miraba con cierto nerviosismo para encontrar también al ogro con la pelicastaña a punto de subir por las escaleras eléctricas de la plaza, rápidamente volvió a mirar a Izuku solo para encontrar como sus ojos se cristalizaban a punto de llorar, aquello le hacia la sangre hervir, el cabrón de Bakugou se paseaba como si nada con otra chica. Volvió la mirada para buscarle en cuanto vio al doncel abrir más los ojos encontrándose al rubio besando a la chica mientras subían las escaleras, aquello era la gota que rebosaba el vaso, estaba por levantarse e ir a encararlo cuando sintió una pequeña mano cálida sobre la propia, volvió la mirada para encontrarse enrostro lleno de lágrimas de Izuku.
-Kiri… podemos… ¿podemos irnos?... no… no me siento bien… - el doncel comenzó a sollozar mientras trataba de esconder su rostro lloroso.
- si… vamos a casa – Kirishima saco su billetera, dejo el dinero de la cuenta y tomo la mano de Izuku llevándolo fuera sin decir más mientras lo escuchaba sollozar levemente. Volvió a los departamentos sin decir nada, durante el camino miraba a Izuku por ratos mientras este solo miraba la ventana y una que otra lagrima escapaba de sus ojos, al llegar ayudo al doncel a bajar y subieron en silencio a su piso, se encontraba más calmado y aun así sentía ganas de ir y romperle la cara de un golpe al cabrón que se paseaba como si nada con otra chica. Cuando llegaron a la puerta del 3-B Kirishima se armó de valor para evitar dejar solo a Izuku.
-Izu-chan, te preparare algo de comer… te compensare la salida – trataba de que el doncel le respondiera para saber que no estaba tan sumido en sí, pero no obtuvo respuesta y ahí supo que no podía dejarle solo, no ahora – que te parece… si entramos, podrías dormir un rato – Kirishima se acercó un poco más al pequeño doncel y con sus dedos toco su mejilla para llamar su atención, aquello saco de sus pensamientos al menor que levanto su mirada aun con rastros de las lágrimas.
-kiri-kun… yo… lo... lo siento… arruine la comida… - ahora parecía que Izuku trataba de disculparse por lo ocurrido cuando el solo era la víctima en todo eso, Kirishima le sonrió levemente y negó con la cabeza.
- no importa… que te parece si pido algo para los dos, una película no estaría mal ¿verdad? – trataba de distraerle para poder quedarse con él, no podía dejarlo solo ahora. Izuku solo asintió y saco la llave de su departamento para abrir, sus manos estaban temblorosas y Kirishima lo noto.
-Izu-chan… ¿puedo? – Kirishima se acercó pidiendo la llave para abrir, Izuku le entrego la llave para luego llevar sus manos a su pecho apretándolas con fuerza. Abrió la puerta del departamento, dejo pasar al menor y luego entro él quitándose los zapatos en el genkan y cerrando la puerta tras él, vio a Izuku ir al sillón y sentarse sin decir nada y aprovecho ese momento para ir a la cocina y servirle un vaso de agua, cuando volvió Izuku escondía su rostro entre sus manos tratando de calmase, solo se escuchaban los sollozos del menor mientras trataba de mantenerse tranquilo, verlo así le oprimía el corazón estaba enamorado de él y verlo llorar por el cabrón que lo había dejado embarazado mientras se divertía con otras le hacía hervir la sangre, pero en este momento solo quería abrazarlo y consolarle. Dejo el vaso de agua en la mesita de centro y se sentó a su lado en silencio, con su derecha acaricio los rebeldes cabellos verdes del doncel y poco a poco lo acerco hasta poder abrazarlo, nunca antes se había tomado un atrevimiento así, pero no quería verlo sufrir, si podía consolarle o aria.
Izuku no podía contener el llanto aquella imagen de su exnovio con una chica besándose había sido en definitiva lo peor, a él nunca lo dejo abrazarlo o besarlo en público, ni tomarle del brazo al salir, pero con aquella chica todo eso había pasado delante de sus ojos, toda esperanza de arreglar las cosas se había ido por la borda. En cuanto sintió su cuerpo ser abrazado la realidad le golpeo más, estaba por comer con Kirishima cuando todo paso, le había llevado de regreso, había sido muy paciente con lo que pasaba y ahora lo consolaba mientras él no podía dejar se llorar por un cobarde que no quería hacerse responsable de su hijo y que además salía con otra. No pudo más que aferrarse a la camisa de Kirishima y seguir llorando, sentía como el varón pelirrojo le confortaba sin decirle nada, y solo siguió llorando hasta que sintió sus parpados pesar y como su respiración se relajaba poco a poco hasta la inconciencia.
Cuando Kirishima sintió el cuerpo de Izuku relajarse se dio cuenta que se había quedado dormido, aquello le hizo suspirar para relajarse un poco, aún tenía el menudo cuerpo entre sus brazos le había estado abrazando y a pesar de que la situación no era lo que hubiera deseado, en tener a Izuku tan cerca de él era una sensación cálida que no quería perder. Con cuidado le giro para recostarlo en el sillón evitando despertarle, tomo su móvil del celular para pedir algo de comer y luego llamar a su hermana y contarle lo ocurrido, cuando la pelirosa le respondió solo le dijo “salió mal, ven ahora mismo, Izu-chan a estado llorando y no pienso dejarlo solo” para luego colgar e ir a la cocina por algo de agua. Estaba cerrando el refrigerador cuando escucho el móvil del doncel sonar y rápidamente se apresuró a tomarlo de la mochila del menor y silenciarlo, el identificador tenía el numero como Tsuyu-chan y Kirishima recordó que se trabaja de su amiga del preescolar por lo que respondió a la llamada.
-bueno?... -Kirishima se sentía apenado por contestar.
-Izu-chan? – la voz de la chica al otro lado de la línea se notaba contrariada – lo lamento si me equivoque.
-oh! No… Izu-chan no puede contestar… soy Kirishima Eijirou – no sabía cómo explicarle a la amiga del doncel que Izuku no estaba en condición de hablar.
- oh! Kirishima-san, Izu-chan está bien… me conto lo que paso con ¿su exnovio? – Kirishima suspiro ante eso y se relajó, ahora sabía que Izuku ya ke había contado lo ocurrido.
-estamos en su departamento, Izu-chan… no está bien, creo… sería bueno que viniera, necesita a sus amigos.
-si… Kirishima-san ¿podría quedarse con él en lo que llego a su departamento? Estoy segura que Izu-chan te lo agradecerá mucho – Kirishima se sonrojo por el comentario.
-sí, claro… aquí le espero – colgó la llamada y volvió a la sala, dejo el móvil del doncel en la mesa de centro mientras en se sentaba en el sillón individual, no paso mucho cuando a su móvil llego un mensaje de su hermana “ya estoy aquí afuera del departamento” por lo que se levantó y abrió la puerta encontrándose a su hermana y a Zero con cara de preocupación, solo les pidió guardas silencio y les dejo pasar, los recién llegados observaron dormir a Izuku en el sillón para luego seguir a Kirishima a la cocina.
-Kiri, ¿Qué ocurrió? – Mina fue la primera en preguntar por lo que Kirishima suspiro antes de comenzar a contarle todo desde que salieron en la mañana del departamento: como había invitado a Izuku a comer y como por desgracia se habían encontrado al exnovio con otra chica en la plaza.
-bien, eso salió terrible, te arruinaron la oportunidad, viejo – Zero rascaba su nuca con algo de pena por su amigo.
-dejemos de lado que le arruinaron la jugada a mi hermano… el muy cabrón sale con otras mientras Izuku-chan le llora porque no quiere hacerse responsable… yo lo mato.
-Mina, nadie me arruino ninguna jugada… pero Izu-chan se puso muy mal y mejor volvimos a casa, he pedido algo de comer, y su amiga Tsuyu viene para acá – Kirishima volvió la mirada a la sala donde Izuku aun dormir – no se si soy buena compañía con todo esto.
- ¿qué dices? Mejor compañía no hay, eso te lo aseguro – Mina se cruzaba de brazos con algo de molestia – a ver, ¿quieres a Izuku-chan, o no?
-claro que si… tú sabes… - el pelirrojo la miraba algo molesto por la pregunta.
-entonces plántate aquí y apóyalo, Midoriya necesita alguien a su lado… y no me refiero solo a un hombre, si no a alguien que de verdad le quiera, a él y a ese bebé – Zero había tocado el punto principal, el bebé, Izuku estaba embarazado y las emociones del día eran algo que podía ser malo para él, Kirishima volvió la mirada preocupado hacia la sala y con paso rápido se acercó al sillón donde dormía el menor. Mina y Zero se miraron sonriéndose mutuamente, sabían que su hermano/amigo estaba enamorado, su reacción era suficiente para saber que Izuku estaba en buenas manos.
-Nos vamos al departamento de Zero – Mina tomo la mano de su novio antes de caminar hacia la puerta – si algo pasa llámanos – la pelirosa y su novio salieron del departamento dejándolos solos nuevamente, suspiro recordando las palabras de su hermana, si quería a Izuku seria fuerte y paciente, ahora lo importante era que el doncel estuviera bien.
Mientras se encontraba pensando en que hacer el repartidor con la comida llego y aunque no era lo que había planeado aun podía tener un momento tranquilo con el doncel a pesar de todo. Dejo la comida servida en la mesa y fue al sillón para despertar al menor, cuando se acercó acaricio su mejilla con sus dedos, le veía tan tranquilo que no quería traerlo de vuelta a la cruda realidad, pero debía hacerlo comer.
- Izu-chan, despierta, debes comer algo – El varón lo movió suavemente para hacerlo despertar, el doncel comenzó a abrir lentamente los ojos – he pedido algo de comer, no puedes saltarte las comidas – Kirishima lo ayudo a sentarse en el sillón mientras el frotaba sus ojos.
-Kiri-kun… - una vez enfoco su vista y miro al varón delante de él una tenue sonrisa escapo de sus labios – gracias… - Izuku recordaba lo que había pasado, el mal rato que paso al ver a su exnovio con otra y como Kirishima le había cuidado, se había quedado con el hasta dormirse y había pedido comida para ambos, un sonrojo se apodero de sus mejillas el varón delante de él se había comportado como todo un hombre cuidándole y el solo le estaba dando preocupaciones – Kiri-kun... .yo… lo siento… - Izuku se levantó del sillón con rapidez ocasionándole un mareo que lo huyo tropezar, cerro lo ojos sintiendo que caería al suelo pero eso no sucedió, cuando volvió a abrirlos se encontraba en brazos de Kirishima quien lo sujetaba por la cintura y le miraba con algo de preocupación.
- ¿estas bien Izu-chan? No debes levantarte así… es peligroso – Kirishima le miraba sin sentarle y el seguía mirándolo sintiendo como sus manos se posaban en el pecho del varón que tenía delante.
-lo… lo siento Kiri-kun – el sonrojo en sus mejillas aumentaba mientras el varón delante de él seguía mirándole sin soltarle, al fin reacciono dando un paso atrás – lo siento… yo… te estoy causando preocupaciones con mis problemas… lo siento – Izuku se disculpaba a cada dos palabras mientras Kirishima negaba con la cabeza.
-no Izu-chan… yo… te dije que puedes contar conmigo… llamarme a cualquier hora… - Kirishima le miraba con tanta ternura y solo entonces se percató que sus manos seguían en la cintura del pequeño doncel, con suavidad le soltó para no hacerle sentir incomodo antes de volver a mirarle – deberías comer, no es bueno que te malpases así – el doncel solo asintió para luego seguir al varón a la mesa y poder comer algo, ya era tarde y con todo lo que había pasado no habían comido. La comida paso en un silencio nada incomodo, la presencia del varón siempre le daba tranquilidad a Izuku y lo mismo era para el varón quien mantenía una sonrisa tranquila mientras comían. Casi al terminar de comer escucharon el sonido del timbre e Izuku fue a abrir encontrándose con su amiga Tsuyu.
-Tsuyu-chan, ¿paso algo?
-hola Izu-chan… eso quiero saber… te llame en la tarde y… -la mirada de la chica busco al pelirrojo que aún estaba en la mesa y quien al mirarla se puso de pie para acercarse a la entrada y saludar a la chica moviendo su mano.
-lo siento Izu-chan estabas dormido cuando llamo y no quise despertarte… te ayudare a limpiar – volvió a la mesa para recoger los platos y llevarlos a la cocina mientras escuchaba como la chica e Izuku entraban nuevamente al departamento e iban a la sala. Se tomo el tiempo de lavar los platos y dejan en orden la cocina, no pensaba dejarle más trabajo al doncel, cuando termino salió a la sala donde la chica e Izuku estaban – Izu-chan voy a mi departamento, si necesitas algo llámame ¿sí? – tomo su mochila y su móvil de la mesa.
-si… muchas gracias Kiri-kun – Izuku se levantó y lo acompaño a la puerta, se despidió de él y una vez lo vio al varón entrar a su departamento el doncel cerró la puerta y volvió a la sala con su amiga que lo miraba con más preguntas por hacerle.
-Izu-chan ¿Qué paso? Tus ojos eran muy irritados.
Izuku suspiro y se sentó frente a su amiga para contarle lo que había pasado: como se encontró con Bakugou y que Kirishima le había llevado a casa, sería una plática muy larga, pero poder hablar con Tsuyu realmente le ayudaría.

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