Y ahí estaba HyunJin caminando por el centro comercial, tranquilo, luciendo su gran y bonito abrigo en estas épocas festivas del año, diciembre.
Hacía frío, era un hecho, pero su nueva prenda, la canción icónica de Mariah Carey sonando de fondo, la decoración y la compañía de su amigo, Christopher Bang -ojo, que el pelinegro le había dicho a su acompañante que la tonada era más importante que él mismo. Claro, en broma de buen plan de amigos-, hacían que el ambiente se tornara cálido, a la vez que muy alegre.
O sea, ver toda esa gente protegiéndose del clima comprando y siendo consumistas por alguna razón le llenaba el corazón de emoción.
Y para mejorar el día, el australiano propuso ir por un chocolate caliente en algún puesto de esos que colocan solo por la época. Sí, de esos que parecen casitas de jengibre que rodean a un gran árbol con un santa que atiende la emoción de los niños.
Hwang HyunJin se consideraba el mejor fanático de la navidad, no había duda de ello.
-Me da dos chocolates calientes, por favor. -Pidió el australiano, una vez que llegan, al dependiente de aquel adorable puestito, quien asiente sonriendo en forma de respuesta.
Por mientras el pelinegro se entretenía buscando con la mirada cualquier cosa que le llamase la atención. Por ejemplo, aquel puñado de infantes saltando y corriendo de un lado para el otro, tratando ser parados por sus pobres padres mientras esperaban a que fuera su turno con el Santa Claus del mall.
-¿Quieren que le agregue alcohol al chocolate? -Preguntó el muchacho castaño emocionado sosteniendo una botella de algún licor que Chris no se fijó mucho en lo que era-. Verán, puede sonar raro, pero es una nueva tendencia que viene del otro extre-
-¡Oh por Dios! -Fue interrumpido por el alto pelinegro. El chico que estaba hablando de la moda de la bebida, Seungmin, se sintió culpable de haberles ofrecido eso, pues pensó que eran chicos cristianos o algo por el estilo-, ¿¡ese no es el sabroso de Lee Minho!? ¡El Santa Claus!
No, olvídenlo, no eran cristianos. Bueno, ahora su sentimiento de culpabilidad se había esfumado por uno de gracia al ver babear al atractivo pelinegro por una persona disfrazada de un personaje infantil.
-Sí, échale todo el licor que puedas-. Asintió con convicción aún mirando al feliz Minho, de ir a pedirle un deseo él también.
-No le hablas ni en la Universidad lo vas a hacer aquí. Qué pendejo estás, Hyunjin.
En ese momento el nombrado sí despegó su mirada de su guapo chico con barba blanca y barriga falsa, solo para intentar aniquilar al más bajo con sus ojos, mas no le funcionó, con mucha lástima.
-¡Es que estamos en facultades diferentes!
-Ya, pero lo conociste por el festival que hubo cuando lo viste bailar en el escenario, desde allí vives enamorado de él.
-Pero si quieres le cuentas el color de mis calzoncillos también a Seungmin. -Rodó los ojos con hastío y ganas de ir a sentarse en las piernas de su chico. Sí, sí, por si se lo preguntan vio la placa en la camiseta del chiquillo castaño.
Bueno, la cuestión más relevante del momento es que anhelaba ser uno de esos pequeños ruidosos, es más, los envidiaba muchísimo en esos momentos. Lo frustraba no poder ir tan fácil hasta allí sin que lo juzgaran de ser un rarito.
-Son azules y de Spiderman. -Respondió Chan con felicidad, recordando que Hyunjin le había mandado fotos de estos mismos más temprano, puesto que subconfianza era tan grande que no le tomaban mucha relevancia ver los desechos fisiológicos del otro por medio de una fotografía, menos una de ropa interior infantil.
-No quería saber eso. -Contestó el castaño arrugando el entrecejo mientras negaba vertiendo el alcohol en una licuadora junto a los otros ingredientes, todo un show de bartender o mixología.
-¿Los quieres ver? -Cuestiona HyunJin, seguidito de que el vendedor terminara de formular su oración. Si Hyunjin alzó las cejas con coquetería fue por pura chulería ya que su corazón no dejaba de latir por aquel muchacho peligris.
-No, gracias, mi mami me dice que no me junté con tipos regalados.
El coreano de cabellos negros separó sus labios con exageradas a la vez que colocaba una palma sobre su pecho, pretendiendo estar ofendidísimo cuando era todo lo contrario, solo le generaba mucha risa, mas en él estaba eso de ser dramático, una característica innata de Hwang. Hwang es igual a dramatismo y viceversa.
-¡Uy, hasta a mí me dolió! -Jaraneó su amigo, quien se supone que lo debía defender, pero solo estaba allí, muerto a carcajadas con el otro muchacho alcohólico.
Ya se las pagaría. No obstante, no era el momento porque dejó a su traicionero compañero junto al tal Seungmin y el chocolate navideño atrás para acercarse a la cola de padres junto a sus hijos. Hablando de filas, cualquier persona decente, con un mínimo de moralidad aguarda pacientemente por su turno, y no, no es el caso de Hyunjin; es que las familias estaban distraídas, por supuesto había que aprovechar, ¿qué podría hacer él?
Ah, Christopher se había dado cuenta demasiado tarde y se prometió no volver a retar al menor de manera indirecta. No, no podía creer que aquel tímido -con respecto al guapote de MinHo- alto estuviese pidiendo sentarse en las piernas del chico disfrazado.
En cuanto a Seungmin, bueno, él escupió el chocolate que anteriormente le habría pertenecido al pendejo de allá más adelante.
-Dime, joven, ¿qué desea está navidad? -Consultó el famoso un poco incómodo por el adulto encima suyo, aunque no negaba lo bueno que estaba junto a su melena larga.
-A usted en mi cama, señor Santa. -Replicó con firmeza y vergüenza en bufonada, apreciando lo que se podía mirar de ese agraciado rostro detrás de la larga barba blanca.
Chan comenzó a toser de un forma tan atroz que cierta gente calculó que se escuchó hasta el último piso de la edificación; incluso el castaño de la pequeña tienda de chocolate caliente tuvo que salir a socorrerlo, ¡se estaba ahogando con su producto!
-Voy a hacer que te comas el papel higiénico del baño si dices otra tontería así en medio de todas estas personas, estoy en medio trabajo, idiota, no quiero que me despidan. -Susurró el peligris en contra de la oreja de nuestro protagonista. Era de esperarse que Hyunjin casi mojara sus pantalones con pipí por tremendo regalo navideño.
-Sí.
-Oye, sé que me observas en la Universidad.
-Es que soy gay, Santa. -Comentó sin sentido alguno, aún en las piernas del otro muchacho universitario.
-What the fuck?
૮ ˙Ⱉ˙ ა
FELIX NEVER BAD, GENTE.
oIGan, a todo el mundo ya le está llegando el christmas evel y el mío ni idea ajshjs </3
cambiando de tema, aquí está el fic idiota del año. ¡ALEX XMAS PRESENT!
ESTÁS LEYENDO
¿santa gay? ⸼ HYUNHO
Фанфик⸼ ───── "-Dime, joven, ¿qué desea esta navidad? -A usted en mi cama, señor santa". Una linda e inspiradora historia de amor navideña digna de una película de Netflix, ¿cierto? ──── 𖦹︎ gay...