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— Vamos — el castaño tomaba a rastras a la pelinegra azabache de ojos perla fuera de su casa — No puedes seguir así

— Shino-kun haz algo — esta se aferraba aun más fuerte al gran portón con su única mano libre

— Lo siento mucho Hinata pero estoy de acuerdo con Kiba — sus insectos llegaron a la mano de la chica liberando así su agarrre y elevenadola por los aires

Akamaru ladro y se colocó debajo de la chica, Shino entendió y sus insectos la depositaron encima de este.

La Hyuga con cuidado de no caerse se aferró al suave pelaje del cachorro, mientras que en su mente peleaba consigo misma por ser débil ante sus amigos.

— Bien ¡Vamos!— grito de felicidad — Akamaru trata de que no se escape

Este ladro y Shino comenzo a caminar junto a ellos, la Hyuga suspiro y enterró su rostro en el cachorro.

¿Cuanto había pasado?

Tal vez 6 o 8 meses desde que Naruto rechazo sus sentimientos.

Era 14 de febrero, la Hyuga había decidido una vez más después de mucho, recrear el chocolate que había echo para el Uzumaki, con la excepción de que esta vez se lo entregaría en sus manos y con ello sus sentimientos serían expuestos.

Se esforzó mucho, incluso todos sus amigos la había apoyado, y también de alguna manera sentía como Neji miraba lo nerviosa que estaba al sostener la cuchara mirando fijamente el chocolate en la pequeña olla puesta en la estufa.

— No me entiendo por que decide hacer esto para alguien como el Hinata-sama

Si, es algo que diría Neji, pero seguramente el ya estuviera imaginando millones de estrategias para torturar al Uzumaki si la rechazaba.

Rechazo.. Es una palabra la cual le tenía miedo, sabía que después de la cuarta guerra no había hablado o convivido con cierto rubio.

Así que ese día, era la oportunidad perfecta para acercarse a el, esta vez -aunque no quería ser grosera- decidió en no recibir ayuda de Sakura.

Sabía que la última vez que lo hizo, por temor a el rechazo no entregó aquel chocolate al rubio, sin en cambio se lo quedaron sus mejores amigos, los cuales le habían dicho que sabía horrible.

Tardo en decidir como decorar lo, la forma que les daría y en que caja lo guardaría.

Ya era noche, San Valentín ya iba a terminar, salió de su casa dispuesta a entregárselo, pero regreso una vez más al pensar que ya era tarde y seguramente el rubio se encontraría dormido.

— Solo ve y entrega celo — Hanabi había echo presencia en el momento en que su mente estaba confusa — Te esforzaste mucho, al menos deberías darse lo

La Hyuga nuevamente observo la pequeña caja en forma de círculo envuelta con papel azul y moño rojo.

— A menos que te rechace y decidas tirarlo

— Ya es muy tarde deberías ir a dormir

Sin más salió de su casa dispuesta a ir al departamento donde se encontrará Naruto.

En el trayecto se encontró a Sakura caminando junto a Sasuke quien sorpresivamente se encontraba en la aldea, sabía que el había pedido ir afueras de la aldea y se veía confusa al verlo ahí.

— Eso es.. Oh! ¡Gambare Hinata! — la pelirosa tomó de hombros a la chica dándole lo mejor

— Se fue directo a casa una vez salió de ichiraku adelante — le informó el pelinegro

El cambio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora