Hinata acepta que sus sentimientos nunca llegaron a cierto rubio carismático.
Sus mejores amigos Kiba y Shino tratan de animarla y que la peli negra azabache este contenta de nuevo.
Además que Shino insiste en que su idiota mejor amigo acepte los...
Hinata revisaba cada estante que había en aquella guarida, Kakashi les había dado la tarea de recopilar información en una de las guaridas que Orochimaru tenía.
Pues el aseguraba que tenía conocimientos que podrían llegar a ser encontrados y utilizarlos a su voluntad.
Así que el mejor equipo de rastreo estaba en ello, Kiba con su excelente olfato, Hinata con el byakugan y Shino con el control de sus insectos.
Esa mañana antes de partir había notado que cierto castaño le evitaba de tal forma, algo que seguía en duda de la razón.
Tal vez era por su nuevo traje para las misiones, si quizás podría ser eso, debía de su ponerlo, un traje que no era habitual en ella, además de que ese día había decidido por atarse el cabello, quizás así podría lucir un poco diferente.
Quizá Kiba pensaba que le hacia ver vulgar, Shino le había dicho que no importaba que se pusiera mientras estuviera cómoda, aun que claro no pasó desapercibido de que el de los insectos viera de cierta forma amenazante a aquellos que la vieran de más.
Suspiro cansada, revisar cada lugar con el byakugan usándolo mucho tiempo seguía siendo algo agotador para ella, sabía que tenía que acostumbrarse, pero de igual manera no dejaba de que ella seguía preocupándose por lo que paso en el pasado.
Cuando entrenaba con Neji este le hacia usar el byakugan mucho, haciendo que ella perdiera la vista por cierto tiempo, recordaba que se sentía inútil al no hacer mucho solo por no ver.
Definitivamente no quería que eso pasara de nuevo.
- ¿Quieres descansar? - Shino había echo acto de presencia
- Esta bien puedo seguir
- No necesitas ser dura contigo misma
La pelinegra agachó la cabeza, tal vez un pequeño descanso vendría bien, salieron de aquella guarida a tomar algo de aire fresco, Kiba venía de regreso con akamaru ambos mojados.
- ¿Kiba-kun? ¿A donde fuiste?
- Solo fui a refrescar me un poco
El castaño paso de largo y se adentro, Shino le había recomendado que descansará no solo por que llevaban horas en aquella caverna si no también por que Kiba venía con una resaca.
Shino no tardo en notar que su amiga se veía preocupada por aquel distanciamiento del castaño, quería decirle, pero sabía que eso no le correspondía.
Kiba tenía que ponerse los pantalones y decirle de una vez por todas lo que sentía por ella, aun cuando no tuviera oportunidad, aun cuando lo rechazaba, era mejor liberar sus sentimientos que dejar que esos mismos te sigan reteniendo.
- Shino, tu sabes algo que yo no se ¿cierto?
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¡Maldita sea Hinata!
¿Por que?
¿Por que tenía que hacer que sus sentimientos crecieran cada vez más?
