DE UN CASTING AL CIELO (najlonso) PAUSADA

Capítulo 1: El libreto.

Narra Najwa:

Hacía unas semanas había hecho el casting para la tercera temporada de La casa de papel. Ahora mismo me encontraba en la casa de campo que tengo en Ávila. Estaba tumbada en el sofá, junto con mi actual pareja Alejandro, veíamos la tele, últimamente no hacía nada más que no fuera trabajar, trabajar y trabajar. Entre tanta sesión de fotos, promo para mi nuevo disco, viene de largo, y que dentro de nada ya llegaban los conciertos de mi gira... estaba bastante saturada y realmente necesitaba tomarme un descanso. 

Me estaba quedando dormida en el sofá, Ale tenía un brazo por encima del respaldo del sofá, que pasaba por detrás de mi cabeza y con su mano rodeaba parte de mi hombro. Mi cuerpo se comenzaba a deslizar hacia el de él, llegando ya al punto, de que mi cabeza ahora reposaba sobre su hombro. Poco duro esa paz interior que ahora sentía, haciendo que levantara mi cabeza sobresaltada y mirando a todos lados para ver de dónde provenía el sonido que había perturbado mi sueño.

Fue mi móvil el que me despertó, me estire un poco para alcanzarlo, ya que estaba en una mesilla de salón al frente del sofá. Observe que quien llamaba era un número descocido, no tenía más remedio que contestar, podía ser trabajo. Y así era.

–¿sí? -dije contestando con la voz algo adormilada. -

–Najwa, la llamamos por el casting que ha realizado hace unas semanas para la serie, la casa de papel. -al oír esas palabras me recompuse de inmediato quedando sentada en el sofá al instante. -

–Si, ¿y qué ha pasado?

–Pues que ha sido escogida para interpretar a la nueva inspectora, Alicia Sierra. -al oír esas palabras me levanté al instante e hice un “vamos” con mi brazo sin emitir alguna palabra, tenía que mantener la compostura. -

–Genial, ¿y cuando envían los libretos o cuando hay que ir por ellos? -dije en un tono feliz, pero tampoco expresando la verdadera felicidad que sentía. -

–Los libretos ya han sido enviados a su domicilio de Madrid, dentro de dos días habrá una lectura general en la dirección que he enviado a su correo electrónico. -

–Perfecto. - rápido puse el manos libres del teléfono y revisé mi Gmail, y efectivamente ya tenía allí el correo con la dirección correspondiente, era el mismo lugar donde rodé las cuatro temporadas de vis a vis, el set era el mismo, pero obvio que tenía diferente decorado.

Colgué él teléfono y me tiré de nuevo en el sofá super feliz. Ale me miro con una sonrisa en el rostro y yo le mire a él con otra, pero la mía era deslumbrante. -

–¿Qué ha pasado? -preguntó Alejandro emocionado por saber. -

–Pasa, que me han cogido para la casa de papel, como Alicia Sierra. -sonreí de nuevo. -

–Eso es genial, naj. Me alegro mucho por ti. -se estiro un poco para rodearme con sus brazos y luego dejar un tierno beso en mis labios. Le di una sonrisa y me acomodé junto a él en el sofá. -

–Mañana por la mañana volvemos a Madrid. -

...

A la mañana siguiente recogimos toda la casa, dejándola lo más ordenada posible, seguro dentro de poco volvería. El monte es algo que me llena de paz, y encuanto tengo un momento para escaparme hacia el, no lo dudo un segundo.
Tardamos como un par de horas en  hacer todo, cargamos las maletas en el coche de Alejandro, y pusimos rumbo a Madrid.

Os preguntareis por qué no llevo mi coche, pero es increíble lo que prescindo del mío. Al fin y al cabo siempre me viene a buscar o pillo un taxi.

...

Tardamos 2 horas y algo en llegar a Madrid, la entrada a la cuidad estaba colapsada, era la hora punta realmente, pero Madrid siempre está lleno de coches.
Conseguimos salir de aquel odioso atasco y ale me dejó en la puerta de casa. Yo bajé las maletas, mientras que el se iba a aparcar el coche.

Abrí la puerta de casa y inspire aire, disfrutando de mi maravilloso hogar, solté todo de repente y di una leve sonrisa mientras dejaba las llaves en el mueble de la entrada.
Accedí a la casa y arrastrando las maletas las dejé en el salón para luego deshacerlas.

Me fui directa a mi habitación a coger algo de ropa cómoda y a darme una ducha, no tenía pensado salir de casa más hasta mañana que fuera a la lectura general y me encontrará con mis compañeros.

.

Me di un baño bastante largo, creo que tarde como una hora en salir de ahí. Me acomode y me fui hacia el salón, donde ale estaba sentado viendo la tele con una sonrisa. Me acerqué a él y dejé un beso en sus labios.

– ¿te ha costado mucho aparcar? -pregunté mientras me alejaba para ir por las llaves de nuevo, bajaría a recoger el libreto a el portal. -

– estaba todo bastante petado, pero he conseguido aparcar a unas calles. ¿Mañana quieres que te lleve a la lectura?

– no te preocupes, puedo ir yo, así saco el coche del garaje, hace demasiado que no lo muevo... -

– como quieras amor, pero aún así, voy a bajar a la garaje a mirar si arranca para que lo tengas listo, para mañana.-

Cogió el mando de la tele y la apagó, me tomo levemente por la cintura empujándome algo para que me dirigiera a la puerta.

– coge tus llaves por si acaso. Yo voy a bajar a por el libreto... -cogí de nuevo las llaves y ale cogió el ascensor para bajar mientras que yo fui por la escaleras.

Llegue a el portal y pique en el cuartillo del conserje.

– buenos días, Alberto, vengo por un paquete que me debieron de dejar aqui no hace mucho.

– el hombre se sobre salto un poco ya que no me esperaba  -buenos días Najwa. Si, aquí le han dejado varios paquetes. -

El hombre de ya edad elevada me los entrego y yo volví a subir a casa.

Deje en la mesa del salón en resto de paquetes y cogí el que tenía aspecto de libro, era el libreto. Abrí el envoltorio de papel y comencé a leer lo que iba a suceder en esa temporada.
Me quede así durante un rato hasta que Ale volvió, me dijo que todo estaba en orden y que si pedíamos algo de comer. Yo asentí. Terminamos pidiendo un deliveroo, y el resto del día transcurrió sin ningún tipo de alteración.