DE UN CASTING AL CIELO (najlonso) PAUSADA

Capítulo 13: ¿Sexo virtual? 1/2

Narra Pedro:

Todo había salído según lo deseado. Najwa y yo habíamos hablado después de su concierto, concordamos que en cuanto pudiera hablaría con Alejandro y le dejaría las cosas claras. Ahora nos encontrabamos en uno de los bares más lujosos de Barcelona charlando, bebiendo y dándonos cariño de la manera más dismilada posible. Aún que con solo mirarlos a los ojos, nuestra expresión y lenguaje corporal ya hablan por sí solos.

Sonrisas discretas, rubores, roces de nuestros pies con nuestras piernas por debajo de la mesa... Sin duda cualquiera que nos viera pensaría que somos iguales a dos adolescentes que acaban de comenzar a salir.
Pero es que, este es el efecto del amor en las personas. Cuando recientemente te enamoras, todos estos actos, y sentir todo lo que sientes como si fuera la primera vez, es inevitable, es intrascendente, imposible de disimular.

- y dime, ¿Alguna vez te he dicho lo preciosa que eres?- Najwa se encontraba bebiendo de su copa. Automáticamente la deja sobre la mesa y me mira a los ojos, formadosele en la boca una sonrisa que no pude evitar corresponder.

- mmm... Algo me suena que me hayas dicho...- se pone coqueta y comienza a juguetear con el líquido del interior de su copa, agarrándola nuevamente como forma de su propia distracción ante mis comentarios.-

- pues que lo sepas, eres preciosa. - vuelve a mirarme y sonríe de nuevo, a lo que yo vuelvo a corresponder esa hermosa sonrisa.-

Pasado un rato, decidomos volver al hotel mientras paseábamos tomados de la mano. Ella contaba experiencias con sus fans músicales, que usualmente solían ser también fans de todos los trabajos que hacía Najwa.

Contaba que cuando empezó en esto no tenía la misma voz que ahora. Antes tenía una más dulce y más suave, y debido al problema con sus cuerdas vocales y a el tabaco, su voz se volvió mucho más grave.
Los fans de cuando sacó su disco 'Till it's break', todos o la mayoría eran personas ya mayores de edad y adultas con familias formadas o sin familias, pero ya con cierta edad alcanzada.
Fue cuando comenzó a trabajar como Zulema, que la audiencia adolescente, apareció como sus mayores fieles seguidores, y que hacía mucho que no disfrutaba tanto de realizar diferentes tipos de proyectos, sabiendo de por sí, que iban a ser muy bien acogidos. Y eso le alegraba.

- tengo que decir, y no me regañes... Que, bueno, he sacado información a la recepcionista de tu hotel para que me pusiera cerca de tí diciendole que eras mi mujer... - ella me mira y frunce el ceño, a la vez que achina sus ojos.

- creo que no solo me tienes que contar cómo conseguiste una habitación puerta con puerta conmigo. Cuéntame también como narices sabes en qué hotel me estoy alojando y como conseguiste entrada para mí concierto- cuentiona Najwa entrado por la puerta del hotel.

- te lo diré cuando estemos en la habitación - dejo de hablar, y caminamos hacia el ascensor, cuando Najwa toca el botón y las puertas se abren, me posiciono detrás de ella y la empujó hacia adentro, mintras rápidamente tocó el botón de nuestra planta. - y me des unos de esos besos tan ricos que me das tú... - la tomo por la cintura y la atraigo hacia a mí.

- sabes que podrías habermolo dicho y te lo hubiese dado sin que me arrastrarme hasta al ascensor como un desesperado.-

- ¿señorita Nimri? ¿Me daría un beso de esos que quitan el aliento a cualquiera?-

- encantada lo hago... - menciona mientras lentamente se acerca a mí. Rodea mi cuello con sus delgados brazos y acerca su boca a la mía. Comienza besándome lento, suave, de vez en cuando acaricia con su lengua el exterior de mis labios, disfrutando de mi sabor. Pido acceso a su boca, ella lo consiente de inmediato, y sin pensarlo demasiado entro en su boca y enredo mi lengua con la suya.